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Estadísticas 2013 (8-8):
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Draft 2014:
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Desde las dos finales de conferencia consecutivas en aquellos años en los que Mark Sanchez rendía, los New York Jets han estado sumidos en la mediocridad. El año pasado acabaron con un récord de 8-8, para acabar segundos de la división empatados con los Miami Dolphins. A pesar de estar siempre en la pelea por los playoff, la enorme irregularidad del equipo acabó con las posibilidades de la clasificación para la post temporada, y eso que el sexto puesto de la AFC estuvo muy barato. La irregularidad sobre todo vino desde el puesto de quarterback, ya que en su primer año Geno Smith alternó buenas actuaciones con partidos lamentables.
El año pasado el equipo entró en una dinámica de reconstrucción, con la contratación de John Idzik como GM, además de cambios en el staff técnico y la adquisición de su previsible QB de futuro. Aun así, las luces y sombras en los movimientos de la agencia libre y unos drafts dudosos tampoco han acabado de dar resultados.
Ésta agencia libre el equipo ha hecho unos movimientos interesantes, entre los que destacan la contratación del WR de los Broncos Eric Decker y el runningback Daryl Richardson procedente de los Rams, además de las contrataciones estrella, como el RB Chris Johnson y el QB Michael Vick, en una línea muy clara de hacer del juego de carrera la piedra angular del equipo. Entre las adquisiciones de la agencia libre hay mucha incógnita, ya que los fichajes de más renombre son dos jugadores que no aseguran absolutamente nada, pueden salir o muy bien o muy mal. En los últimos años se ha tirado mucho en la agencia libre a jugadores de ese perfil (como pudo ser Tim Tebow en su momento) y los resultados no fueron buenos. Pero si consiguen meter en cintura a Chris Johnson, puede ser un gran año para los neoyorkinos.
Pasando al tema del draft, en lo que muchos consideran un draft regulero. Aunque más o menos las necesidades del equipo fueron cubiertas, quizá podían haber conseguido mejores jugadores. Caso claro es la elección en primera ronda del safety Calvin Pryor por encima del nº1 claro de la posición en el draft, como lo fue HaHa Clinton-Dix. Es posible que el pick fuese por el parecido a su antecesor en el puesto, LaRon Landry. En el resto del draft, destacan el tight end Jace Amaro, el QB Tajh Boyd y el WR Jalen Saunders.
 MVP ATAQUE: Nick Mangold: Uno de los veteranos del equipo y uno de sus mejores jugadores. Con el rumbo que ha tomado el staff parece claro que este año van a correr como campeones y todo el peso va a recaer sobre él. Sólo hace falta que sus compañeros le sepan seguir. |
Dado el rumbo que está tomando el ataque, el impacto de Chris Ivory en el backfield del año pasado y las nuevas contrataciones en ese aspecto, los Jets intentarán dar más importancia al juego terrestre, máxime con el estado actual de los quarterbacks y el estilo de receptores que tiene el equipo.
En el puesto de quarterback está todo abierto. En principio son dos los que optan a ser los titulares. Por una parte tenemos a Geno Smith, que en su segundo año todavía tiene que demostrar que merece el puesto. Teniendo en cuenta esto viene la contratación de Michael Vick, un parche a corto plazo que denota que la confianza en Geno Smith no es muy alta. Un hombre que puede mover el árbol y hacer funcionar al equipo, pero entre su edad y las dificultades que tiene para mantenerse sano, pinta que su aportación no será muy destacada. En cuanto al resto de QBs, están en rookie Tajh Boyd y el jugador de segundo año Matt Simms, que tendrán que pelear por el puesto de tercer quarterback, ya que después de los training camps presumiblemente uno de los dos se tendrá que marchar.
En cuanto a los runningbacks, en éste momento hay superpoblación. Se nota que quieren tener una buena base para poder elegir lo mejor en lo que debe ser el puesto clave en el rendimiento del equipo. A priori el de más nombre es el mencionado Chris Johnson, que sólo por la calidad que atesora debería ser el nº1 de calle, que con su velocidad y elusividad world class debería aportar mucho al equipo. La gran pregunta es si el chico va a tener ganas de jugar o no. En segundo plano vienen todos los demás. De momento entre ellos debería estar un paso por delante Chris Ivory, quien a pesar de no llegar a las 1000 yardas hizo partidos de mucho mérito (incluido un partidazo contra los Patriots) y se ganó el crédito de Marty Morningweg, su coordinador ofensivo. Por calidad el tercero en discordia debería ser Bilal Powell, otro de los corredores que ya estaba en los Jets. Y a partir de aquí está todo muy abierto, y los mejor posicionados detrás de la tripleta son Daryl Richardson y Alex Green. El primero ha sufrido un bajón desde su gran primer año en los Rams, y viene a demostrar que todavía tiene un hueco en la liga, y el segundo, después de su lesión de rodilla hace 2 años, quiere seguir buscando su oportunidad. Como fullback el que está ahora mismo en roster es Tommy Bohanon, que es un jugador bastante polivalente, que bloquea bien, pero que también sabe recibir, y podrá encontrar su rol en los Jets. Aunque ésta posición está en peligro de extinción, éste jugador puede aportar mucho debido a la importancia que le dan los Jets al juego de carrera.
Y pasamos ya a hablar de los targets que tendrán los QB’s de los Jets. La dupla de la temporada pasada se mantiene. Jeremy Kerley y Stephen Hill van a ser a priori las referencias por aire del equipo. El primero con versatilidad para correr todo tipo de ruta y el segundo siendo más un wideout puro, aunque sin ser una gran amenaza profunda. Además se les une Eric Decker, uno de los maestros en conseguir yards after catch que puede ser una ayuda tremenda para el QB que sea el que se ponga a los mandos del ataque. Dada la configuración del equipo, no será raro verlo en el slot. El sueldo que tiene es de WR1, pero nunca ha sido la referencia por aire en un equipo, veremos qué tal se le da. Como cuarto en discordia ha venido Jacoby Ford, un jugador rápido como pocos y que viene a cubrir el rol de la amenaza profunda, aunque el pase profundo no sea lo que más utilicen los Jets. Por momentos en los Raiders rindió, y aunque se ha apagado un poco, todavía puede dar muchas sorpresas. También se incorpora Jalen Saunders, un receptor que aunque pequeño, tiene muy buenas manos y corre buenas rutas, que a buen seguro aportará mucho en rutas cortas y medias. En the best of the rest, los mejores situados para hacer el roster son Greg Salas, Clyde Gates y David Nelson, aunque ahora mismo el roster tiene un total de 12 WR.
Aunque no esté claro que vaya a jugar desde la línea, el que lleva ventaja en el puesto de tight end es el reciente pick de segunda ronda Jace Amaro. Su rol en Texas Tech se podía comparar con un Aaron Hernandez en Florida, pero incluso más presente en el slot. Un comodín que va a desahogar mucho el juego aéreo de los neoyorkinos. En el rol de TE más clásico estará un año más el clásico (valga la redundancia) Jeff Cumberland, que sin estridencias realiza su trabajo y aporta mucho al equipo en bloqueo. Y procedente de New England llega Zach Sudfeld, en otro movimiento más de intercambio de información entre las dos franquicias rivales, aunque quizá puedan encontrarle un hueco para darle utilidad.
En la línea un año más tendrán en el centro a uno de los mejores, Nick Mangold. Y como suele ser habitual, lo mejor de la línea lo tendrá a su izquierda, con un Brian Winters como guardia que el año pasado se ganó el puesto y D’Brickshaw Ferguson de tackle, que sin ser de los más conocidos, es uno de los mejores tackles izquierdos de la liga. Las dudas vienen un poco más por el lado derecho, con Willie Colon de guard y Breno Giacomini de tackle, dos jugadores con cierto nombre, pero que su rendimiento en el campo dista mucho del reconocimiento que tienen. Como suplentes tienen a gente en formación como Ben Ijalana, Caleb Schlauderaff o William Campbell, pero su profundidad es limitada y si ya están un poco cojos ahora mismo, como se lesione alguno van a tener una temporada larga.
 MVP DEFENSA: Sheldon Richardson: Este año la unidad dominante debe ser la línea defensiva, y con la calidad que atesora y el upside que se le presupone, éste debe ser el año de su explosión. |
Un año más, y esto no cambiará en los Jets mientras Rex Ryan sea el head coach, se jugará con la 3-4 tan agresiva que nos tienen acostumbrados los neoyorkinos. Con los jugadores ya asentados y los aciertos del draft de los últimos años, parece que ésta defensa va a mejor.
Sin trampa ni cartón, Damon Harrison se hizo con el puesto de nose tackle en la temporada pasada, y éste año se vuelve a perfilar como el ancla de ésta defensa. Kenrick Ellis, con sus problemas con la justicia y que no acababa de confirmar lo que prometía en su primer año, ha visto como ha perdido su titularidad. Flanqueando a Harrison estarán otro año más Muhammad Wilkerson y el rookie defensivo de la temporada pasada, Sheldon Richardson. Entre el gran rendimiento que lleva dando el primero durante años y el temporadón de Richardson, que sólo se espera que mejore aún más, estamos posiblemente ante la mejor unidad del equipo. Pero detrás de éstos sólo hay un puñado de rookies, entre los que destacan Anthony Grady y Kerry Hyder, pero las incógnitas son muchas y seguridad poca la que transmiten sus suplentes.
En cuanto al cuerpo de linebackers, a priori se mantendrá el bloque de la temporada pasada: el veterano David Harris junto con el joven y prometedor DeMario Davis por el interior, y el superveterano Calvin Pace (que por primera vez en su carrera tuvo una temporada de 10 sacks) con Quinton Coples en el lado contrario, un Coples que no estando en su posición ideal, aporta mucho al juego de los Jets. Al final un esquema que acaba siendo un 5-2 con los dos linebackers exteriores expertos en el pass-rush. En el banquillo estarán esperando una oportunidad Garrett McIntyre, que está previsto que sea el relevo cuando se retire Pace, Nick Bellore o Jermaine Cunningham.
En las esquinas, como suele ser habitual, tendremos a dos cornerbacks de nivel: el jugador de primera ronda de los Jets del draft de 2013 Dee Milliner y el versátil Kyle Wilson, que le ha tocado jugar de nickle y hasta de free safety en ocasiones. Desde que se han ido los dos titulares de los años anteriores (Darrelle Revis y Antonio Cromartie), siempre se ha visto la posibilidad de ponerle como cornerback a tiempo completo. A la expectativa estarán un mediocre Dimitri Patterson y otro venido desde New England como Ras-I-Dowling. Como strong safety, pocas dudas que jugará la primera ronda de éste año: Calvin Pryor. Un pegador nato pero que suele fallar placajes por exceso de agresividad. Menos clara está la posición de free safety, donde hay dos contendientes claros por el puesto de titular: el veterano Dawan Landry y el joven Antonio Allen.
Kyle Wilson volverá a ser el retornador titular, pero no a tiempo completo, ya que su rol de titular en defensa no le permitirá hacer todos los retornos. Para eso tendrán a jugadores como Jalen Saunders o Jeremy Kerley le pueden dar descanso.
Como kicker estará un año más el veterano Nick Folk. Después de la mala racha que tuvo en Dallas hace 3 años ha vuelto a su nivel y ha vuelto a ser el kicker fiable que no tenía acostumbrado. Aunque no esté lejos de ser la mejor pierna de la liga, su seguridad en los kicks de menos de 50 yardas evita muchos dolores de cabeza al staff de los Jets. Ryan Quigley se encargará de los punts, en lo que no es ni mucho menos un top de la liga, compaginándolo con las tareas de holder, y Tanner Purdum será el long snapper otro año más.
 – La línea de defensa está a un nivel muy alto, y a nada que haya progresión en sus dos jugadores jóvenes, el trabajo de los linebackers puede ser muy sencillo.– La llegada de Eric Decker y Jacoby Ford, aparte de otras promesas, hace que el cuerpo de receptores sea muy completo. – A pesar de tener que hacer el relevo casi hasta forzado, el puesto de cornerback está muy bien cubierto. |
 – Con tantos jugadores con rendimiento difícilmente previsible, es difícil que el rendimiento del equipo vaya a ser muy alto.– El juego de carrera va a depender mucho del rendimiento de Chris Johnson, que es tan impredecible como acertar el número premiado de la lotería. – La línea de ataque tiene poca profundidad y gente inexperta, Nick Mangold va a tener mucho trabajo organizándola. |