Army Black Knights

2010 será el tercer año (segundo de Rich Ellerson) desde el restablecimiento del ataque option en West Point. Si tenemos en cuenta que generalmente los jugadores rookies no suelen participar mucho en las academias militares (por la dificultad de adaptación a las condiciones que rigen la vida en estos lugares) este dato es importante, pues significa que para esta temporada habrá ya jugadores sophomores (el cambio al ataque option se realizó en 2008 pero una vez que prácticamente ya había acabado el período de recruiting) listos para jugar que han sido específicamente reclutados por sus habilidades para este sistema. Añadámosle que en 2009 el equipo quedó a una única victoria de un viaje a una bowl (algo que no sucede desde la Independence Bowl jugada contra Auburn en 1996) y el resultado es un 2010 lleno de altas expectativas para los cadetes. Si se mejora el resultado de la campaña anterior, Army iría a la Armed Forces Bowl que se juega en Fort Worth (Texas).

Los cambios que se vienen produciendo por el Hudson en los últimos años han contribuido a un cierto renacer del equipo de cara al país. Quizá no haya ejemplo mejor de esto que el partido que tendrá lugar en Nueva York el próximo 20 de noviembre entre la academia militar y la Universidad de Notre Dame. Será una buena ocasión de recordar viejas rivalidades y, si es posible, dar la campanada como ya hiciera Navy en los últimos años. La lástima es la falta de continuidad de esta rivalidad, pues en 2011 los Irish desaparecen de nuestro calendario, aunque no así el escenario del partido, el Yankee Stadium, que repetirá, al menos, en 2011 (Rutgers) y en 2012 (Air Force).

Siguiendo con el tema de los calendarios, ha sido notable el enfado de los aficionados este año cuando se han confirmado algunos duelos para próximas temporadas. Desde la academia se busca aunar, por un lado, una cierta homogeneidad de valores (y así jugar contra Notre Dame, Northwestern – en 2011 -, Boston College – en 2012 – o Stanford – en 2013) con la configuración de un calendario equilibrado y realista, con partidos fáciles, partidos parejos y partidos en los que tiene que salir todo perfecto para poder ganarlos. Los rivales antes mencionados deben ser motivo de orgullo para Army y no hay duda de que dan lustre al calendario (a ellos hay que añadir a toda una powerhouse como Oklahoma para el final de la década, pero los aficionados, por su parte, se quejan de los pocos partidos que se juegan en casa (el hecho de que el partido en el Yankee Stadium cuente como partido local no gusta a todos) y de algunos rivales elegidos. Se puede entender que se juegue todos los años contra el Virginia Military Institute, pero el aficionado se cansa de ver a Eastern Michigan y Buffalo,  y cuando se anuncian series contra Stony Brook y Kent State algunos se enfadan. Al menos, se mantiene el partido contra Rutgers (se está intentado crear una especie de rivalidad interestatal llevando uno de esos partidos al Yankee Stadium), vuelve Fordham (un histórico) y, a la tradicional visita al estado de Texas (con North Texas unos años, Texas A&M otros) que es un caladero de jugadores muy importante de Army (allí está, además, la base de Fort Hood), en los próximos años veremos visitas a San Jose State y Hawaii (quizá una forma de abrir nuevos mercados para el equipo). Sin embargo, el exigente aficionado veterano, no se conformará y pedirá a Syracuse, pero creo que siendo objetivos el calendario es bastante razonable.

Y es que esta temporada recibe a los Black Knights con prácticamente todo el equipo titular de 2009 (sólo 5 bajas reseñables), algo inusual en las academias militares y fruto de la juventud de los últimos años. El calendario empareja a los cadetes este otoño con equipos como Eastern Michigan, North Texas, VMI y Kent State. Una derrota ante cualquiera de estos cuatro rivales sería inexcusable para un equipo en crecimiento y con ambiciones de jugar una bowl. Tulane y Temple por su parte han mordido el polvo contra Army en los últimos años, así que no sería aventurado pronosticar una o incluso dos victorias aquí. Los partidos contra Hawaii, Duke, Rutgers y Notre Dame se presentan como los enfrentamientos más complicados. Quedando las academias, con la visita de Air Force y, como es tradición, se acaba con Navy (a la que hace ya demasiados años que no se la gana) en Philadelphia. Al menos otra victoria se debería conseguir aquí, y la pronostico contra los Falcons, para llegar ya con los deberes hechos al Army–Navy Game. En definitiva, espero un balance positivo este año para los Black Knights y, por tanto, un viaje a una bowl en el mes de Diciembre. A ver si no me equivoco.

Hace un año por estas fechas, cuando todavía no había comenzado el preseason camp, situé a Chip Bowden como quarterback titular  y sólo me atreví a mencionar a Trent Steelman como opción B, tras haber superado según algunos informes a Carson Williams en el depth chart. Pues bien, Steelman fue el primer novato en la historia de West Point en jugar de titular todos los partidos, y el primer quarterback freshman (o plebe, como se les denomina en el ámbito de las academias militares) en jugar de titular para los cadetes desde 1944. Si esto no tiene suficiente importancia, hay que indicar que el novato sufrió una lesión de costillas en el primer partido de pretemporada de la que nunca se recuperó al 100%, siendo sustituido en algunos partidos por amplios períodos tanto por Bowden como por Williams. En definitiva, una de las posiciones que presentaba más lagunas en 2009 comienza 2010 como una de las fortalezas del equipo y todo ello personificado en un jugador al que le quedan, con ésta, tres temporadas más en college. Como suplentes se encuentran el ya mencionado Chip Bowden (senior), que se lesionó de gravedad en el partido contra Air Force en una jugada de equipos especiales (¡el quarterback suplente cubriendo un punt!) pero que en los primeros entrenamientos de verano (tras perderse los entrenamientos de primavera) parece totalmente recuperado y, en tercer lugar, Max Jenkins (junior) que no tiene experiencia como quarterback. Jenkins es mejor jugador para el ataque de Army (tiene más juego de carrera) pero la capacidad de pase de Bowden, así como su experiencia, puede venir bien para desatascar algunos partidos.

Los dos runningbacks titulares de Army en 2009 vuelven al equipo en 2010 y eso es una excelente noticia. Los seniors Pat Mealy y Jameson Carter corrieron para, respectivamente, 673 y 258 yardas en 2009. A un segundo nivel estaría el sophomore Malcolm Brown (112 yardas en 2009) que, tras no funcionar el “experimento” de primavera cuando probó como receptor, vuelve a la posición de corredor. No me puedo olvidar de los destellos mostrados por el también sophomore Brian Cobbs y, en los primeros entrenamientos de verano, por el plebe Raymond Maples.

Quizá el punto débil del juego de carrera en 2009, que explica no sólo los buenos números de Steelman sino también los de Villanueva, radicó en la fragilidad de la posición de fullback. El junior Cedarius Williams empezó muy bien la temporada pero enseguida se lesionó y Kingsley Ehie no ralló a la altura de lo esperado. Williams vuelve este año pero la novedad principal es el sophomore Jared Hassin, un transfer de Air Force que, por ese motivo, no pudo jugar la pasada campaña.

El cuerpo de receptores pierde dos piezas claves en 2010: Damion Hunter y Alejandro Villanueva (autor de 5 TDs – los únicos de Army – la temporada pasada). Sus sustitutos son los juniors Austin Barr y Davyd Brooks que en 2009 sumaron 5 recepciones, entre los dos. No parece que haya mucha profundidad más tras estos dos jugadores. De hecho, como tercer receptor se postula el sophomore Kyler Martin, reclutado como receptor en West Point pero que jugó todo 2009 como middle linebacker (llegando a jugar dos partidos como titular).

Para cualquier equipo, esta mezcla de bisoñez y escasez de efectivos en la posición de receptor debería ser muy preocupante. Recordemos que Army tiene implementada una ofensiva triple-option en la que el pase es, o debería ser, la excepción y no la regla. Bien es cierto que a Rich Ellerson utilizaba con asiduidad a Ramses Barden en su época de Cal Poly y, qué decir de Alejandro Villanueva en 2009, pero este último recurso fue, en la mayor parte de los casos, fruto de las dificultades que tenía el juego terrestre para alcanzar sus objetivos.

Terminamos el análisis del ataque con otra buena noticia, ya que la línea ofensiva (responsable en buena medida de contar con el decimosexto ataque terrestre del país y el tercero que menos sacks permitió en 2009) sólo pierde a un jugador (Fritz Bentler). Los seniors Anees Merzi (left tackle), Zach Peterson (center), Seth Reed (right guard) y Jason Johnson (right tackle) no deberían tener problemas para mantener su titularidad en 2010. Se incorpora a este grupo el left guard sophomore Frank Allen. Como suplentes estarían situados Thomas Hagen (senior) de center, Brad Kelly (junior) de left tackle, Joe Bailey (junior) de left guard, Matt Villanti (sophomore) de right guard y  Mike McDermott (junior) de right tackle.

Continuamos con la defensa como terminamos con el ataque: con buenas noticias. La unidad ralló a gran altura en 2009 y el sistema Double Eagle Flex de Rich Ellerson hizo estragos en los ataques rivales. Para 2010 se espera una versión mejorada ya que el grupo sólo ha perdido a tres titulares (el defensive back Mario Hill, el defensive end Brad Marren y, principalmente, el defensive tackle Victor Ugenyi), además de que también vuelven varios reservas claves.

La línea defensiva estará capitaneada por el defensive end Josh McNary (senior), que es el líder histórico en sacks del equipo con 18 (12.5 en 2009). Al otro extremo de la línea se encuentra el senior Marcus Hilton y como tackle está Mike Gann. La mayor novedad en la línea es la inclusión, esta pasada primavera, de un híbrido entre defensive line y linebacker (llamado bandit) que será ocupado por el sophomore Nate Combs. Como reservas se encuentran el senior Carson Homme y los sophomores Chris Swain (tackle), A.J. Mackley (tackle) y su hermano Jarret (end). Para el puesto de bandit estaría el también sophomore Nate Schaff.

Los tres linebackers, piezas elementales del éxito defensivo en 2009, retornan esta temporada. Andrew Rodriguez (líder en placajes en 2009) ocupa el puesto de whip linebacker, Stephen Anderson vuelve al medio tras lesionarse contra Air Force y perderse lo que quedaba de temporada y Steve Erzinger continuará en la posición de rover. Una de las modificaciones principales de los entrenamientos de primavera fue el cambio de Kingsley Ehie, fullback titular en 2009, a la posición de linebacker, postulándose como MLB suplente y habiendo contado con snaps en la primavera al no haber participado Stephen Anderson en esos entrenamientos por estar aún convaleciente de su lesión. Chad Littlejohn, que también está considerado como el tercer bandit, aparece como whip linebacker suplente y Sean Westphal lo hace como suplente de Erzinger en la posición de rover. Muchos seniors en esta unidad tanto en los titulares como en los suplentes, veremos qué tal se produce el relevo al acabar esta temporada.

En 2009 Army permitió 152 yardas de carrera por partido (terceros del país) y de ello son principales responsables los integrantes de la secundaria. Donovan Travis (free safety) intentará superar los 71 placajes realizados en 2009 y, a su lado, contará con la ayuda del senior Donnie Dixon. Jordan Trimble será el primer suplente de ambos (29 placajes y 1 intercepción en 2009). Los dos cornerbacks serán Antuan Aaron (junior) y Richard King (senior), que se perdió toda la temporada pasada por un golpe en la cabeza (jugó 11 partidos en 2008) pero que en los entrenamientos de primavera recuperó con relativa facilidad la titularidad. Los sophomores Joshua Jackson y Ty Shrader se encuentran a un nivel algo inferior para pelearles el puesto a los dos cornerbacks titulares.

A pesar de que fue gracias a un fieldgoal en la prórroga como Army consiguió una de las mejores victorias de 2009 ante un rival como Vanderbilt, lo cierto es que el juego de pateo adoleció de cierta irregularidad. El equipo cuenta con dos kickers que en 2009 se repartieron el trabajo: el senior Matt Campbell (18 de 24 FGs en 2009) y el junior Alex Carlton (13 de 13 en extrapoints). Se espera competición por el puesto ya que en primavera Carlton no tuvo buenos resultados (dicho esto por el propio Ellerson que, además de entrenador principal, es coordinador de equipos especiales) y Campbell estaba jugando a baseball. Es posible que algún novato impresione en los entrenamientos de verano y consiga escalar posiciones en el depth chart.

Las labores de punter seguirán siendo responsabilidad del senior Jonathan Bulls (media de 39.2 yardas en 2009) y como retorneadores estarán los runningbacks Patrick Mealy y Malcolm Brown (para kickoffs) y los jugadores de la secundaria Josh Jones y Richard King (para punts).

	La defensa parece asentada y, si se mejoraran un par de aspectos en ataque (el juego de carrera del fullback, principalmente), no sería nada descartable jugar una bowl en 2010, la primera en catorce años.
	Los equipos especiales tuvieron una actuación irregular en 2009 y no parece que haya habido grandes mejoras este año. Por pequeños detalles Army no consiguió tener un récord positivo de victorias/derrotas el año pasado, y es esencial un comportamiento más consistente de esta unidad para que no se repita la misma situación.

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