Parece que fue ayer cuando la temporada empezó a andar y sin darnos cuenta nos hemos comido ya media temporada. Estamos en noviembre, se ha terminado el baseball, ha comenzado la NBA y la NHL, a partir de esta semana los jueves por la noche tendremos football y Acción de Gracias no está tan lejos como cuando los Saints y Vikings daban inicio a una temporada que puede ser la última que conozcamos en un tiempo.

Y como media temporada que es, nos toca de nuevo a los que nos denominamos analistas a hacer balance, y como a uno le han colgado la etiqueta de Analista Senior, supongo que lo de Senior es porque soy el que más tiempo lleva haciendo esto y no por edad, me toca de nuevo mojarme, aunque como he dicho siempre, afortunadamente todo esto queda entre nosotros. Si los analistas tuviéramos el poder de adivinar lo que realmente pudiera suceder nos dedicaríamos a apostar, ganar dinero a espuertas y supongo que mi principal dedicación sería recorrer los diferentes estadios de los USA viendo football en directo, y baseball, y baloncesto, y cuando no pudiera hacer nada de ello tomar el sol en alguna playa de Baja California, dar paseos por Maritima Bay, comer cangrejos en Fisherman´s Wharf o dedicarme al “dolce farniente” en una mansión de Sausalito, porque tengo claro que viviría en la Costa Oeste.

En NFLhispano estamos celebrando este año una efeméride muy importante, nuestro décimo aniversario. Parece mentira que llevemos 10 años aquí, y esperemos estar otros 10, por lo menos. Por eso, para celebrar que llevamos 10 años en lugar de hacer un balance de media temporada, que es lo que parece tocar, vamos a destacar las 10 cosas más importantes que a mi juicio han ocurrido esta temporada. El orden es aleatorio, no por importancia, y estoy seguro que me dejaré algo en el tintero y es que sintetizar media temporada en 10 comentarios es poco menos que imposible.

1. EL HUNDIMIENTO DE LOS COWBOYS

Que levante la mano quien pensaba que en el ecuador de la temporada los Boys iban a estar fuera de la contienda de los playoffs. Yo creo que absolutamente nadie, es posible que muchos pronosticaran que pudieran no entrar en los playoffs pensando que había equipos mas preparados en su división, pero nada indicaba eso. Los Skins están en reconstrucción en el primer año de Mike Shanahan, los Eagles sin Donovan McNabb confiaban su destino a un desconocido Kevin Kolb y los Giants sin defensa y un juego terrestre que la temporada pasada no carburó. Nada parecía amenazar a la presunta hegemonía de los Cowboys, un equipo que dominó con solvencia la NFC East la temporada pasada y avanzo en los playoffs con relativa comodidad hasta topar con los Vikings, salvo una cosa, ellos mismos, los peores enemigos del equipo de Dallas han sido los propios jugadores de Dallas.

Es inexplicable que un roster de los mejores pagados de la liga, con estrellas en ataque y defensa como Tony Romo, Miles Austin, Jason Witten, Felix Jones, Marion Barber, DeMarcus Ware, Anthony Spencer, Jimmy Ratcliff, Brady James, Terence Newman, etc., se haya podido estrellar de tal manera, o sí, la absoluta falta de disciplina del equipo y su falta de vergüenza profesional. Como no se puede prescindir de más de 50 jugadores, al propietario Jerry Jones sólo le ha quedado una opción, prescindir de su Head Coach Wade Phillips, un buen tipo que ha durado quizás demasiado en uno de los banquillos más calientes y exigentes de toda la liga, pero dudo que la marcha del buenazo de Phillips sea la solución, este equipo necesita alguien que los meta en cintura, que les enseñe disciplina y sobre todo que les diga qué uniforme es el que representan cada domingo. Una cosa es que un equipo sin nada de talento pueda ir 0-8 ó 1-7, casos de Buffalo o Carolina, pero otra muy diferente que un equipo del peso, historia y sobre todo plantilla de los Cowboys se arrastre por el sótano de la liga.

Todo empezó como un mal sueño, pero se achacó a un accidente, los Boys perdían partidos por fallos clamorosos como en Washington o ante Chicago, pero aquello sólo era un anticipo de lo que quedaba por venir, más de 90 puntos en los últimos 3 partidos, una desidia total de varios miembros del equipo y la próxima visita al coco de la división, los NY Giants, han colmado la paciencia de Jerry Jones. Lo único que les queda a estos Boys es terminar la temporada de la forma más digna posible y buscar un entrenador que sea capaz de imponer disciplina a un equipo con muchísimo talento en todas partes, pero igual de disfuncional en todas ellas. De momento Jason Garrett es el encargado del equipo, pero algo me dice que no es tampoco la solución, sino incluso parte del problema.

2. EL CULEBRÓN DE BRETT FAVRE

En mi columna del regreso de vacaciones, y primera de esta temporada, ya contaba lo que había sido el culebrón Brett Favre en los propios Estados Unidos. El anuncio de la retirada de Favre paralizó todas redacciones de prensa del país, igual que su retorno, o más bien, su no anuncio de no retirada. Favre ocupó portadas, abrió telediarios y ocupó cientos de líneas, como dije en su momento, la única opinión que eché en falta fue la de los comentaristas de Digital+, imperdonable olvido de la ESPN.

Y al contrario de la serie Perdidos, que ha provocado más decepciones que alegrías, Brett Favre ha protagonizado un auténtico culebrón en su temporada número 20. No se puede decir que haya decepcionado y no hay semana en que el hombre del pelo gris no sea noticia en esta liga, en un sentido o en otro, pero noticia a fin de cuentas, como solía decir un veterano periodista deportivo español, no importa que hablen mal o bien de ti, lo importante es que hablen de ti. Brett Favre ha sido noticia por sus lesiones, por sus actuaciones, por sus decisiones en el campo, por sus enfrentamientos con Brad Childress e incluso ha sido noticia por algo por lo que nunca había sido noticia hasta la fecha, por unos presuntos mensajes de contenido sexual con una reportera deportiva de New York en el año que pasó en los Jets.

Todo parecía que la racha de titularidades de Brett Favre había tocado a su fin, los Vikings eran un equipo que se hundía, la ausencia de Sydney Rice era un factor determinante hasta el punto que el equipo fichó a Moss en plena temporada, de lo que luego hablaremos. Después saltaría el escándalo de las mensajes, fotografías y demás relacionado con la estancias de Favre en New York, lo que suponía que la oficina de la NFL empezara una investigación, y cuando nada podía ir peor Favre se lesionaba un tobillo con el resultado de dos fracturas que se juntaba a una presunta tendinitis en su brazo lanzador. Por primera vez en sus 20 años de profesional parecía que Favre no podría saltar al campo, y nada más lejos, lo está haciendo y con partidos como el del último domingo donde se pudo ver a Brett Favre en estado puro y en su mejor versión, todo parece indicar que al veterano QB como no lo saquen con los pies por delante del campo nada ni nadie lo hará ya. Yo sí creo que es la última temporada de Favre, no me puedo creer que su mujer e hijas no le rueguen al ya abuelo que lo deje de una vez, que no tiene nada que demostrar y que se dedique de una vez por todas a pasar el otoño y el invierno conduciendo su tractor.

3. EL OTRO CULEBRÓN, RANDY MOSS

Hace mucho tiempo pude leer una de las mejores citas del football de ese auténtico genio que era Paul Zimmerman, más conocido como el Doctor Z, uno de los más, sino el que más, respetado periodista de la NFL. Zimmerman como muchos sabrán sufrió un derrame cerebral y no escribe desde hace tiempo, pero en sus cientos de columnas ha dejado auténticas legados para la posterioridad. Uno de ellas se refería a Randy Moss, decía que el mayor error de Dios había sido poner aquel cuerpo en Randy Moss. Randy Moss por talento podía haber sido el mas grande WR de todos los tiempos y haber superado incluso al legendario Jerry Rice, pero su mala cabeza, su desidia y su aptitud han jugado en su contra.

He de confesar que nunca he visto a nadie con su talento en ese puesto en un campo, velocidad, tamaño, excelentes manos, en resumen, “the complete package” como dicen en USA. Randy Moss empezó con mal pie en la liga, en el draft cayó muchos puestos cuando en circunstancias normales tenía que haber sido el número 1 absoluto, pero sus problemas y su carácter lo hundieron hasta que Dennis Green lo eligió para sus Vikings, y el resto de la liga, al menos los 18 equipos que dejaron escapar a Randy Moss se dieron cuenta de su tremendo error. Moss arrasó en su primer año como rookie y en los siguientes sólo confirmó el excelente jugador que era, cuestión diferente era la persona que es. Pero con la retirada de Chris Carter y sin Dennis Green por el vestuario la carrera de Moss empezó a ir cuesta abajo. El punto álgido fue un feo gesto en Lambeau Field que terminó con la salida del jugador de Minnesota y su marcha a Oakland, sitio en el que durante dos años pasó en el olvido.

Repescado por los New England Patriots, reflotó su carrera y tuvo su mejor año como profesional, con Tom Brady lanzando y Bill Belichick en la banda, Randy Moss se quedó a unos minutos de una Superbowl, una temporada perfecta y sus mejores marcas personales. Randy Moss continuó dos años más en New England y aunque sus prestaciones seguían siendo buenas no se igualaron a las de aquel año, pero este verano Moss empezó con sus habituales cantinelas, veía como a Tom Brady le ofrecían el gran contrato que él no podía conseguir y que demandaba. Su rendimiento también había bajado en el campo y es cuando Belichick decide desprenderse del WR y lo envía donde todo empezó. Un Randy Moss contento con el traspaso anuncia grandes emociones en Twin City. Y razón no le faltaba, pero no por sus prestaciones en el campo, escasas, sino por como ha terminado su estancia en Minnesota, apenas un mes y costando a los Vikes una tercera ronda del draft. Brad Childress creía obtener la pieza que le faltaba para que los Vikes fueran de nuevo un peligro en ataque, pero Randy Moss acabó aportando poco y no encajó demasiado bien en el veterano vestuario de los Vikes, ni tan siquiera Brett Favre, que siempre quiso jugar con Moss le apoyó públicamente. La decisión de prescindir de Moss casi le cuesta el puesto a Brad Childress.

De momento Randy Moss se marcha a los Tennessee Titans, a un vestuario con un entrenador a prueba de bombas como Jeff Fisher. En Tennessee se reunirá con un viejo conocido como Kerry Collins, aunque quien le lanzará los pases será Vince Young.

4. VIOLENCIA EN EL FOOTBALL

Uno de los asuntos que mas ha dado que hablar esta temporada han sido los golpes violentos a jugadores en situación indefensa, aunque la polémica no saltó hasta pasado casi un mes por una serie de acciones puntuales, especialmente las del LB de los Pittsburgh Steelers James Harrison, un jugador con fama de violento.

Antes de nada me gustaría dejar claro una cosa, yo soy un defensor del juego duro y físico, lo que se está denominando desde diferentes instancias de la liga “pysicality of the game”. El football es un deporte duro, físico, doloroso y todo ello forma parte del juego, es una parte consustancial del juego, no podría entender este deporte sin ese aspecto del juego. A lo que sí me opongo es a la violencia innecesaria del football, aunque en ocasiones establecer una barrera entre lo que es una acción dura de lo que es una acción violenta requiere hacer todo un ejercicio de filosofía. El caso es que hay un enfrentamiento entre aquellos que siguen defendiendo la dureza del football, uno de cuyas caras mas visibles es Bill Cowher, que no desaprovecha ni una sola ocasión en su puesto de comentarista de la CBS para defender la existencia del juego duro y de defender acciones del juego que él interpreta como acciones duras, pero nobles y no violentas. Frente a ellos está la pléyade de seguidores del juego indoloro cuyo principal baluarte es curiosamente el comisionado de la liga, Roger Goodell, al que muchas veces he dicho si por él fuera acabaría prohibiendo el contacto y transformaría el football en una partida de playstation, su mejor exponente, la última Superbowl, un partido sin faltas ni apenas contacto hasta casi los minutos finales.

Lo que está claro es que hay que velar por la salud de los jugadores, eso está muy bien, pero no deja de ser contradictorio que por el contrario Goodell defienda ampliar la liga en dos partidos mas cuando en el formato actual ya tenemos muchas lesiones ¿Vamos a exponer a los jugadores mas tiempo aún a una lesión grave? Si lo vemos desde el punto de vista “goodelliano” puede acabar el football como el baseball, partidos todos los días y a todas horas, playoffs con series de 7 partidos y a la cárcel si le tocas al QB, eso sí, puede que algunos dejemos de verlo, a lo mejor termina habiendo mas sufrimiento en el baseball que en el football.

5. TREMENDA IGUALDAD

¿Paridad o mediocridad? En este primer año sin límite salarial y cuando los equipos son libres de gastar cuanto quieran en sus plantillas resulta curioso que la liga está mas equilibrada que nunca. No hay ni en la AFC ni en la AFC ningún equipo cuyo record destaque sobre todos los demás. El año pasado a estas mismas alturas teníamos dos equipos aún invictos, alguno con solo una derrota y varios hundidos en lo mas profundo, la liga estaba rota en dos. Pero este año habiendo equipos por los sótanos lo que es estila es la clase media, tenemos una división donde no hay un solo equipo con record negativo y tenemos otras 3 donde sólo un equipo tiene record negativo y en otras muchas la diferencia entre el primero y el último o antepenúltimo es de un sólo partido. Sólo la AFC North está rota, Pittsburgh y Baltimore han abierta brecha con el resto, pero por ejemplo en las divisiones West solo hay un equipo descolgado del resto, los Broncos, todos los demás equipos, incluso San Francisco que sólo tiene 2 victorias pueden desde ganar la división a terminar en la cola.

Y ahora viene el sempiterno debate ¿Paridad o mediocridad? No he visto jugar a los 32 equipos de la liga, aunque sí he visto a casi todos con esa maravilla que es el Game Pass, permite seguir toda la liga aunque uno se vuelve loco de vez en cuando. No he visto ningún equipo que pueda decir que es claramente superior al resto, sí sin embargo hay al menos media docena de equipos que son malos equipos como Buffalo, Carolina, Dallas, Denver, San Francisco o Cincinnati. Entre los demás está claro que la máxima de Pete Rozelle de “un domingo cualquiera…” se cumple a rajatabla. Pero en mi opinión, y ésta es mía y e intransferible, se debe más a que la mediocridad hace tiempo que está tan instalada en la liga que ya ni nos damos cuenta y tendemos a confundir la paridad con la mediocridad.

6. CONDICIÓN CARDIOVASCULAR DE McNABB.

Desde siempre he creído que el football lo practicaban super atletas, una especie de super hombres con unas condiciones físicas excepcionales. Hombres no solo con una capacidad atlética sobresaliente sino con una dureza a prueba de bombas. Ver a un jugador profesional es toda una experiencia, cuando uno los ve en televisión y los compara con los demás no lo nota, pero cuando uno los tiene apenas a unos metros se da cuenta del tamaño de los jugadore. Os lo digo porque aún guardo en la memoria el entrenamiento que presencié este verano de los Cowboys. Ver a unos escasos metros a estos gigantes te das cuenta de lo pequeño que uno resulta a su lado.

Otra de las cuestiones relacionadas con el football es la extrema dureza de muchos jugadores, es raro, por no decir imposible, que un jugador no salga al campo cada domingo con al menos media docena de lesiones que al común de los mortales nos tendría postrados en una cama e hinchándonos a calmantes, pastillas y tratamientos. El caso mas extremo es Brett Favre, que este año le tuvieron que partir la boca en el sentido literal de la palabra para sacarlo del campo. Otro duro es Percy Harvin, un jugador con problemas de migrañas metido en un cuerpo imposible que cada domingo se lleva unas raciones de golpes que a cualquiera lo dejaba para su entierro. Y podemos seguir con ejemplos como Demarcus Ware, Wes Walker, etc…

Sin embargo lo que nunca en toda mi vida había oído es que un jugador no podía salir al terreno, y más después de haber estado durante más de 50 minutos en el campo, porque su condición cardiovascular no era adecuada. Así como suena, unos tipos que tienen que salir despavoridos porque les vienen encima jugadores con 130 kilos o más de peso a velocidad supersónica o que pasan unas revisiones médicas exhaustivas, que han estado en partidos de playoffs, finales de conferencia e incluso Superbowls no sale al campo por semejante bagatela. Vale que es cierto que todos vimos vomitar a Donovan McNabb en su única Superbowl en aquel drive final que podía haber dado la victoria a los Eagles, pero aquello se achacó a la deshidratación, algo habitual en un deporte que no se para de sudar nunca por muchísimos motivos,. Cierto es también que Donovan McNabb no se puede decir que es un Favre, un Brady o un Manning cuando de remontar se trata, nunca ha sido conocido por su faceta de Captain Comeback, pero lo que sí ha sido Donovan McNabb toda su carrera es un excelente atleta con una piernas fabulosas y un brazo prodigioso, no muy preciso, pero sobrado de potencia. Por eso cuando uno escucha las explicaciones de Mike Shanaham para poner a ese bulto sospechoso que ha sido toda su carrera Rex Grossman, del que podemos decir que los Chicago Bears llegaron a una Superbowl a pesar de él, no por él, es que algo que no sabemos está ocurriendo en Washington, lo que por otra parte tampoco me extrañaría. Ya me pareció rara la salida de McNabb de Philadelphia, pero que ahora en Washington asistamos, o mas bien, escuchemos lo de la condición cardiovascular, no deja de sonar a disculpa tonta para justificar lo que es un error evidente de Shanaham, que los mejores tiempos de Donovan McNabb han quedado detrás y que Andy Reid le metió un gol traspasando el veterano QB.

7. EL REGRESO DE MICHAEL VICK

A principio de temporada ya comenté este tema en una larga columna el regreso de Michael Vick a la primera página de la NFL tras un largo y penoso proceso penal con estancia en la cárcel incluida. Aunque Michael Vick había vuelto la temporada anterior lo hizo buscando mas una oportunidad que otra cosa, aceptó un papel menor en los Philadelphia Eagles y no rechistó ni protestó, él que lo había sido todo en la NFL. Pero este año aprovechó las circunstancias, había subido un escalafón en el roster de los Eagles, de 3er QB había pasado a 2º QB, suplente de Kevin Kolb, el nuevo protegido de Andy Reid. Pero Vick aprovechó la lesión de aquel en el primer partido para demostrar cuan grande podía haber sido como jugador si se hubiera centrado en el football. La mala suerte quiso que mi columna sobre Vick coincidiera con la semana en que se lesionaba y de nuevo dejaba de jugar. Pero Michael Vick ha madurado muchísimo, ha esperado a estar plenamente recuperado, dejar que Kevin Kolb lo hiciera bien en su ausencia y volver cuando estaba para jugar al 100% de nuevo.

Y otra vez hemos visto al Vick de los primeros partidos, un Vick paciente, que lee defensas y que sigue teniendo una capacidad atlética prodigiosa. Las carreras que hizo el domingo ante una de las defensas mas rápidas sino la mas de toda la liga sola las puede hacer él, pero es que además ahora juega con el brazo como ya dijimos antes, ese pase de más de 50 yardas incrustado en su propia endzone no hay 2 QB en toda la liga que lo puedan hacer con esa pasmosa facilidad. Yo creo que ni siquiera llegó a utilizar todo el brazo para ejecutar el lanzamiento, sino que lo acompaño con la muñeca. Desde luego la facilidad para hacerlo no la tiene nadie en la liga. Lo que es una auténtica pena es que Michael Vick no haya tenido desde el principio de su carrera el ambiente que tiene en Philadelphia para poder dar de sí todo lo que lleva y llevaba este tremendo atleta. De Andy Reid se podrán decir muchas cosas, pero tiene un gran ojo para ver a un QB y sabe aprovecharlos al máximo, aunque su playcalling en ocasiones deje mucho que desear, pero al hilo del comentario anterior, cuando Reid traspasó a McNabb a Washington yo creo que sabía perfectamente lo que hacía, si el experimento Kevin Kolb me sale mal tengo en la reserva a una versión mas atlética, mas resistente y sobre todo más moldeable de McNabb en la recámara. En su tiempo las defensas supieron encontrar como parar a Michael Vick, pero esta versión 2.0 de Vick es mas difícil de parar, no correrá tanto, pero sí tiene la cabeza mejor amueblada y está mejor entrenado y dirigido que nunca, y desde luego es el claro candidato al Comeback Player of the year.

8. CUESTIONABLES DECISIONES DE LOS CEBRAS

Este es otro asunto que ya comenté en otra de mis columnas, pero este año están siendo más palpable que nunca los graves errores arbitrales. Los cada vez mas avanzados sistemas de grabación de imágenes permiten que nada quede sin poder verse en el campo, las TV repiten cientos de veces cada jugada y nada queda fuera de las cámaras. Eso que antes se podía hacer en un campo y que sabías que era difícil que te grabara ya no es posible, en ocasiones uno no sabe si cada jugador que está en el campo no tiene una cámara que graba todo lo que hace. Aunque también hay que decir que no todo es culpa de los árbitros, que ellos a fin de cuentas pitan lo que ven en décimas de segundos, sino de las cada vez mas complejas reglas que cada verano se saca de la manga la liga y obliga muchas veces que los árbitros no sólo tengan que pitar lo que ven, sino que luego lo deben interpretar.

Durante años he despotricado, y lo seguiré haciendo una y otra vez contra la absurda regla del pass interference, la jugada con la sanción mas grave de todo el football. Como dije en su momento, yo creo que hay equipos que tienen jugadas en los playbooks diseñadas expresamente para buscar la falta, es una regla que da mucha ventaja al WR sobre el CB y si a eso unimos la conspiración goodelliana tenemos lo que tenemos. Pero este año una nueva regla ha levantado polémica, o más que polémica es una jugada que ya existía en el campo pero ahora es aplicable a las endzones, un WR no sólo tiene que atrapar un pase, sino que debe haber una indisputable evidencia que ha hecho tras la recepción una jugada de football. Si pierde el control de la pelota, y es aquí donde se lía la cosa ¿Qué es exactamente un movimiento de football tras un pase? Yo no lo sé, o como decía Sócrates, yo sólo sé no se nada. Cada vez que hay que interpretar la jugadita de marras veo una cosa diferente.

Y luego otra cuestión es la verdadera utilidad de la revisión de jugadas. Esta no sirve de nada si al final no se acaba por determinar la jugada correcta y no sólo para determinar si la jugada que es objeto de revisión estuvo bien pitada o no. Hemos visto varios ejemplos de ello este año siendo la mas importante una que le costó a los Miami Dolphins una derrota. Y también hay otra cuestión que empieza a chirriar, es cierto que cada equipo puede pedir la revisión dos veces en cada partido y en ocasiones las revisiones se queman muy rápido, pero ya llevo varios partidos donde he visto fallos clamorosos de los árbitros donde no existe la posibilidad de revisión y en mi opinión si en los dos minutos finales sólo un equipo de la NFL puede pedir la revisión, también lo debería hacer cuando el fallo es clamoroso y no se puede revisar.

9. El FUTURO QUE NOS ESPERA

En Londres ya hablamos de este tema, pensando que es posible que el año que viene pueda haber huelga o cierre patronal por la imposibilidad de hacer nuestra escapada anual a Londres. La NFL ha sido durante los últimos 20 años el espejo en que se han visto reflejados el resto de las ligas por haber alcanzado durante mucho tiempo la paz laboral. La NBA, MLB y NHL no han podido ver comos sus competiciones no se jugaban haciéndoles un daño tremendo del que aún no se han recuperado. El baseball ahora empieza a tener niveles de popularidad parecidos a los que tenía antes de la huelga. La NHL y NBA siguen pagando las consecuencias de sus últimas huelgas.

Ahora la que tiene un frente abierto es la referencia, la NFL. No es que la huelga sea algo que no haya ocurrido antes en la liga, pero nunca con la virulencia y graves consecuencias que puede tener ahora. Cada comisionado que ha tenido la NFL ha dejado un legado, Bert Bell fue el primer comisionado de la NFL y el inventor del draft, con él la NFL empezó a ser un juego popular en USA. Pete Rozelle le tocó vivir momentos muy difíciles con la expansión y la fusión de la NFL con la otra liga, la AFL, pero Rozelle dejó los cimientos de la NFL. Paul Tagliablue alcanzó cotas más altas, dejando la NFL como el deporte número 1 en las preferencias con una paz laboral envidiable, unos contratos de derechos billonarios y unas cuentas mas que saneadas. El legado de Roger Goodell está aun por verse, pero hasta la fecha no parece que sea precisamente brillante, y si la huelga finalmente es un hecho, Goodell es posible que pase a la historia como el peor comisionado de la NFL.

10. RECTIFICACION DE LOS PRONOSTICOS

Y para terminar, una de las grandes ventajas que nos permite hacer estos balances de media temporada es rectificar nuestros pronósticos de antes de empezar la temporada. Yo prefiero casi ni mirar los míos, seguro que no acierto una, y con un tramo de temporada tan loco como ha sido este año no hay motivos para pensar que no pueda ocurrir lo mismo pero exactamente al revés, es poco probable. Tengo serias dudas que los Bills, Cowboys y Panthers ganen 8 ó 7 partidos, sino más bien lo contrario, que los pierdan, pero sí que me creo que los Vikings son capaces de ganar de 7 a 8 partidos y los Patriots de perder media docena, lo de equipos que de repente resucitan o se colapsan no es nada nuevo en esta liga.

Aprovechando por tanto que el Pisuerga pasa por Valladolid, aquí van mis pronósticos versión 2.0.

AFC East:

1. NY Jets (Bye)
2. New England Patriots
3. Miami Dolphins
4. Buffalo Bills

AFC North

1. Baltimore Ravens (Bye)
2. Pittsburgh Steelers (Wildcard)
3. Cleveland Browns
4. Cincinnati Bengals

AFC South

1. Tennessee Titans
2. Indianapolis Colts (Wildcard)
3. Houston Texans
4. Jacksonville Jaguars

AFC West

1. Oakland Raiders
2. San Diego Chargers
3. Kansas City Chiefs
4. Denver Broncos

NFC East

1. NY Giants (Bye)
2. Philadelphia Eagles (Wildcard)
3. Washington Redskins
4. Dallas Cowboys

NFC North

1. Green Bay Packers (Bye)
2. Minnesota Vikings (Wildcard)
3. Chicago Bears
4. Detroit Lions

NFC South

1. Atlanta Falcons
2. New Orleans Saints
3. Tampa Bay Buccaneers
4. Carolina Panthers

AFC West

1. St. Louis Rams
2. Seattle Seahawks
3. San Francisco 49ers
4. Arizona Cardinals

WILD CARDS

• Indianapolis Colts @ Oakland
• Raiders Pittsburgh Steelers @ Tennessee Titans
• Minnesota Vikings @ St. Louis Rams
• Philadelphia Eagles @ Atlanta Falcons

DIVISIONALES

• Indianapolis Colts @ NY Jets
• Tennessee Titans @ Baltimore Ravens
• Minnesota Vikings @ Green Bay Packers
• Philadelphia Eagles @ NY Giants

FINALES DE CONFERENCIA

• Indianapolis Colts @ Baltimore Ravens
• Minnesota Vikings @ NY Giants

SUPERBOWL: Minnesota Vikings @ Baltimore Ravens. Curiosamente es la misma que dije al principio de temporada, y sigo pensando que los Vikings la van a ganar y de forma inesperada por todos, ese tipo de cosas que sólo ocurren una vez de cuando en cuando.

• MVP: Phillip Rivers (sin que los Chargers se metan en playoffs)
• Offensive Player: Adrian Peterson
• Deffensive Player : Clay Matthews
• Rookie: Sam Bradford
• Deffensive Rookie: Ndamukong Suh
• Comeback Player : Michael Vick