Parece que uno no se puede ir de puente y desconectar unos días en su «Fortaleza de la Soledad» particular. Es dejar de ver un par de telediarios, enchufar el «pintxo» en el portátil, conectarse al mundo y leer que hay medio millón de pasajeros empantanados en los aeropuertos, el espacio aéreo cerrado, el estado de alerta, la militarización de las torres de control… ¿qué pasa? ¿está algún Orson Welles detrás de esto?
Y todo ello con la televisiones emitiendo películas de la serie Aterriza como Puedas en homenaje al gran actor Leslie Nielsen, fallecido la semana pasada. Una locura.
Pero no me toca a mí hablar de aeropuertos, aunque esto de la locura tiene su relación con la NFL. Porque el domingo conecté con el Game Pass una vez cumplidos la mayoría de los deberes familiares y veo que los Colts pierden en casa 17-0, que los Raiders ganan 21-3 en San Diego, que Chiefs y Broncos, que venían de anotar 42 y 33 puntos, respectivamente, y de encajar 24 y 36, terminaban su enfrentamiento con un pobre 10-6. En resumen, otra jornada de locura en la NFL, con mucha igualdad, poco dominio y todo por decidir a 4 semanas del final de la temporada regular.
Si Peyton Manning apareciera en Aterriza como Puedas, como Kareem Abdul-Jabbar, su frase sería la del controlador aéreo (¡qué oportuno!) interpretado por Lloyd Bridges, «Ha sido un mal día para dejar de fumar«.
Manning no ha tenido un mal día, lleva tres consecutivos. En sus últimos 3 encuentros el 4 veces MVP suma 11 intercepciones, 4 de ellas retornadas para TD. Ni que decir tiene que son los peores números de su carrera.
Los Indianapolis Colts (6-6) encadenan así tres derrotas consecutivas. La racha de 12 victorias es historia, pero la que además corre serio peligro es la de 8 temporadas consecutivas con 10 victorias o más, alcanzando los playoffs. No ha faltado a la postemporada desde que se creó la AFC Sur. Sin embargo, aún dependen de sí mismos. Si ganan los 4 partidos restantes volverán a ganar su división.
Pero eso no va a ser nada fácil si siguen en la línea de los tres últimos encuentros. Los Dallas Cowboys (4-8) corrieron 217 yardas frente a las 40 de los Colts. Así es difícil ganar hasta con el mejor Manning.
Tashard Choice (19 acarreos, 100 yardas, TD) y Felix Jones (22, 83 yardas) llevaron el peso del ataque de unos Boys que arrancaron 17-0 en el Lucas Oil Field. Los retornos de picks de Orlando Scandrick y de Sean Lee cuando los Colts estaban a una anotación, parecía que mataban a los locales. Pero Manning (36/48, 365 yardas, 2 TD, 4 picks), apoyado en Pierre Garçon (8 recepciones, 56 yardas, TD) y en el sensacional partido de Reggie Wayne (14 recepciones, 200 yardas, TD), fue limando las diferencias hasta que un TD de retorno de un punt bloqueado por Taj Smith, puso a los Colts milagrosamente un punto por delante.
Sería increíble que unos Colts sin juego de carrera, sin defensa contra la carrera y con un Manning fallón ganaran el partido. Pero lo cierto es que lo tuvieron en su mano. Los Cowboys se tuvieron que conformar con un FG en su siguente drive, con tres minutos y medio para Manning para llegar a FG range y dejar las cosas como estaban. Pero de vez en cuando salta un jugador que demuestra un absoluto desconocimiento de la situación del partido y firma el gaffe de la semana (después de lo del DT de los Bengals). Eric Foster se subió literalmente a la chepa de un defensor para intentar bloquear el FG, algo totalemtne innecesario, además de ilegal. El resultado fue un 1º down, que Jon Kitna (18/26, 167 yardas, TD) aprovechó para conectar con Jason Witten en la endzone.
Manning dirigió un cómodo drive para empatar el partido a 33 segundos del final y pudieron incluso ganarlo si hubieran recuperado un fumble del retornador Bryan McCann, pero no lo hicieron. En la prórroga Manning lanzó su 4º pick del día y 5 carreras de los Cownboys después, David Buehler chutó un FG de 38 yardas para la victoria.
Así, y contra todo pronóstico, los Jacksonville Jaguars (7-5) dominan la división después de machacar a unos Tennessee Titans (5-7) que jugaban en casa y con Kerry Collins (14/32, 169 yardas, 2 picks) a los mandos, no con Rusty Smith, pero que parecen un equipo que se ha rendido ya esta temporada.
Los Jaguars volvieron a subirse al carro de Maurice Jones-Drew, que acarreó, valga la redundancia, 31 veces el balón, contra 8 jugadores sistemáticamente en el box, para 186 yardas (récord personal). Sumando las de Rashard Jennings (10, 44 yardas, TD) y las del propio David Garrard (14/19, 126 yardas, 10 carreras, 19 yardas, TD), los Jaguars tuvieron el balón durante 40 minutos. Los Titans quedaron totalmente desarbolados, con un Collins inoperante y un Crhis Johnson (13 acarreos, 53 yardas) totalmente inofensivo. Por cierto, Randy Moss apareció por allí y atrapó un pase para 13 yardas. Magnífico. Los Titans llevan 3 partidos sin anotar un TD.
LA AFC SE PERFILA EN PRIMETIME
Los estelares del domingo y lunes definían dos de las divisiones de la AFC al enfrentar a sendos colíderes. Los resultados condicionarán probablemente el cuadro de playoffs dentro de un mes. El SNF fue otro típico encuentro entre Ravens y Steelers. No existen dos equipos más igualados en la liga. El MNF, en cambio, resultó un K.O. desde el primer asalto.
Pittsburgh Steelers (9-3) y Baltimore Ravens (8-4) protagonizaron el 4º enfrentamiento consecutivo entre ambos equipos resuelto con 3 puntos de diferencia. En los cuatro enfrentamientois de las dos últimas temporadas ambas escuadras han anotado 67 puntos (7 TD y 6 FG cada uno). Más igualdad imposible.
Y el del domingo no fue distinto. Ambos equipos llegaban con idéntico récord y con armas similares. Volvimos a ver una batalla en las trincheras digna de la ofensiva del Marne, batallando por cada yarda y con una defensas imponiendo su ritmo. Como en toda batalla hubo heridos: los TE Todd Heap y Heath Miller, el RT Flozell Adams, el punter Daniel Sepulveda y hasta el propio Ben Roethlisberger, que ya venía tocado de casa con un tobillo cascado, acabó con fractura de los huesos de la nariz, por un puñetazo de Haloti Ngata, aunque siguió en el campo.
Pero aunque la igualdad domine la rivalidad, es cierto que los Ravens llevaron controlado casi todo el partido, gracias a una especie de «break» que lograron con un magnífico drive de Joe Flacco (17/33, 266 yardas, TD) en el 1º cuarto, un drive de 92 yardas de 7 minutos con un pase de 61 yardas a Anquan Boldin y otro de 14 para TD para el mismo receptor. Así llevaron controlado el partido, con Big Ben maniatado (22/38, 253 yardas, TD, pick), permitiendo sólo ocasionales intercambios de FG.
Así podría haber terminado el partido. A falta de 3:22 para el final, Flacco tenía el balón en medio campo, 4 puntos arriba en el marcador. Entonces vino la mejor jugada de los Steelers de la temporada. Una jugada que define a un jugador y a un equipo. Una jugada, por otro lado, que un offensive coordinator, un head coach y un QB más despierto no pueden permitir. Flacco realizó un dropback y un Troy Polamalu no bloqueado se le vino encima como un felino, provocando un fumble. LaMarr Woodley recuperó el balón y lo llevó hasta la yarda 9, donde Big Ben conectó en 3º down con Isaac Redman, que se paseó por toda la defensa sin ser derribado, para el TD de la victoria.
Los Ravens tuvieron su oportunidad para empatar el partido, con un «4ª y 2» en la yarda 31, demasiado lejos para intentar un FG con el fuerte viento en contra. Pero Flacco se quedó corto en su pase y el partido quedaba para los anales de la rivalidad. Es posible que no sea el último «Ravens vs. Steelers» de la temporada. Es la mejor rivalidad de la liga y se merece una revancha.
Para el lunes esperábamos un espectáculo similar entre dos equipos que siempre han ofrecido duelos tensos e igualados, pero esta vez el espectáculo sólo lo dieron los New England Patriots (10-2), con un dominio absoluto, de principio a fin, a ambos lados del balón. Tom Brady (21/29, 326 yardas, 4 TD), impecablemente protegido por su OL, tuvo uno de sus partidos perfectos, repartiendo balones hasta a 8 miembros de su variopinto cuerpo de receptores. BenJarvus Green-Ellis (18 acarreos, 72 yardas, 2 TD) también tuvo su aportación, pero hay que destacar al pequeño «chico para todo» Danny Woodhead, con 115 yardas desde el scrimmage y significativas actuaciones en la cobertura de equipos especiales, frente al equipo que le dejó marchar.
En el otro sentido del juego la denostada defensa patriota, última de la liga en yardas permitidas, tuvo el mejor partido de la temporada. Mark Sanchez (17/33, 164 yardas), que llevaba una serie de 8 TD sin intercepciones contra equipos de la AFC Este, se llevó tres picks, y el juego de carrera de Shonn Greene y LaDainian Tomlinson (111 yardas entre ambos) no fue un factor.
Los New York Jets (9-3) ni las veían venir. Se vieron absolutamente perplejos y ya para el 2º cuarto estaban prácticamente rendidos. Rex Ryan fue el 1º en mostrar su desconcierto pidiendo un challenge absurdo antes de jugarse un 4º down y luego no pedirlo cuando dieron por bueno un TD a los Pats en un aparente «out of bonds». El arrogante Ryan se mostró humilde en la rueda de prensa y se manifestó avergonzado por su partido, indigno de la NFL.
Brady bate con esta victoria, la 26ª, el récord de Favre de «W» consecutivas en casa. Los Jets perdieron al safety Jim Leonhard al romperse la tibia en el entrenamiento del jueves y se notó mucho su ausencia. Una gran pérdida para lo que queda de temporda.
LOS JEFES DE LA AFC OESTE
Vistas las otras tres, queda por diseccionar la división Oeste de la AFC, precisamente la única en la que el líder tiene una ventaja superior a un partido en toda la liga. Después del doble enfrentamiento intradivisional, con la poco habitual derrota de los Bolts en diciembre, los Chiefs dan un paso de gigante hacia el título divisional.
Pero el triunfo de los Kansas City Chiefs (8-4) no fue nada cómodo, frente a un rival divisional como los Denver Broncos (3-9), aunque sí suficiente para vengar la derrota por 20 puntos de hace tres semanas en el Mile High. Desde entonces los Chiefs encadenan tres triunfos y los Broncos 3 derrotas.
En contra del shootout previsible, tuvimos todo un duelo defensivo. Los Chiefs corrieron, como de costumbre, con 116 yardas en 21 acarreos de Jamaal Charles, a los que hay que hay que sumar las 53 yardas en 11 carreras de Thomas Jones. Pero en cambio el ataque aéreo fue muy limitado por la gran defensa de Champ Bailey sobre el receptor de moda, Dwayne Bowe, quien después de sumar 32 recepciones, 465 yardas y 7 TD en los últimos 3 partidos, fue blanqueado por su marcador, y no atrapó ninguno de los tres pases que le lanzó Matt Cassel (17/31, 196 yardas, TD).
Claro que en el otro sentido del juego la producción ofensiva de los Broncos fue aún menor, con Kyle Orton, víctima del pass rush liderado por Tamba Hali (2 sacks, fumble forzado), completando sólo 9 de los 28 pases que lanzó, para 117 yardas, y con Knowshon Moreno (23 acarreos, 161 yardas) como único referente ofensivo.
Pero la noticia saltó después del partido, en forma de despido de Josh McDaniels. El peculiar head coach comenzó su andadura en Denver con unas sorprendentes 6 victorias consecutivas, pero desde entonces acumuló un récord de 5-17 y dejó la franquicia esquilmada de talento, con la marcha de jugadores que están triunfando en otros equipos como Cutler, Marshall o Hillis. Parece ser que se les acabó la paciencia en Colorado, después de verse matemáticamente eliminados de la lucha por los playoffs.
Otra de las sorpresas de la jornada fue la victoria de los Oakland Raiders (6-6) en San Diego. Esto con Tomlinson no pasaba. Siempre tenía marcados en su calendario los enfrentamientos contra los Raiders. Eran los partidos en los que los San Diego Chargers (6-6) corrían más y L.T. sumaba sus estadísticas más espectaculares.
Pero esta vez sólo tuvimos 7 carreras de Mike Tolbert para 16 yardas. El partido se puso cuesta arriba desde el mismo inicio, cuando Darren Sproles falló en la recepción de un punt y los Raiders anotaron 4 jugadas después. En el siguiente drive Phillip Rivers (23/39, 280 yardas, TD, pick) fue interceptado y los Raiders volvieron a capitalizar el turnover. A partir de ahí el partido fue un duelo entre un Rivers impotente y unos Raiders comiéndose el reloj (casi 40 minutos) con el juego de carrera de Darren McFadden (19 acarreos, 97 yardas TD) y Michael Bush (23, 95, TD), además de las del propio Jason Campbell, que sólo lanzó 16 pases, completando 10 de ellos para 177 yardas y un TD a Jacoby Ford, y que corrió en 7 ocasiones para 37 yardas y otro TD.
El 5º título consecutivo de los Chargers se ve lejano, aunque nada se puede decir de esta división hasta que se acabe la temporada regular, que mayores remontadas ya las hemos visto. Su récord de victorias en diciembre se quedó en 18. Una más habría supuesto un récord de la liga para equipo y mes.
LA BATALLA POR LA NFC
Sin cambios en la batalla por la NFC. Todos los contendientes (salvo los Bucs) a una plaza para la postemorada sumaron una victoria el domingo. Esto no ayuda a definir las primeras posiciones, pero sí a separar el grano de la paja. Dejando al margen la plaza de la división oeste, disputada por Rams y Seahawks, 7 equipos se disputan los otros 5 billetes.
Los que dan un gran salto adelante son los Atlanta Falcons (10-2). En primer lugar se deshicieron de un peligroso rival, los Tampa Bay Buccaneers (7-5), que si bien no han ganado aún un partido contra un equipo con récord positivo, estuvo a punto de hacerlo el domingo. Por otro, a los Falcons les queda jugar dos veces contra el peor equipo de la liga y van a recibir a su principal rival en el Georgia Dome. Es un calendario asequible para lograr su ansiado Home Field Advantage.
En Tampa estuvieron contra las cuerdas, 10 puntos abajo a 10 minutos del final. Matt Ryan (18/36, 205 yardas, 2 TD) había sido interceptado por 2ª vez y el partido había girado claramente a favor de los locales. Pero los Falcons tienen a Matty Ice y lo que parece ser la suerte de los campeones, ya que nada más ponerse los Bucs 10 puntos arriba con un trick play con pase de TD de Earnest Graham a John Gilmore, Eric Weems se sacó de la manga la jugada más larga de la historia de la franquicia en forma de retorno de kickoff de 102 yardas para TD. Ryan se encargó del resto en el siguiente drive, de 67 yardas, incluyendo un pase de 25 a Roddy White en 3ª y 20, culminado con un pase de TD a Michael Jenkins.
Pero el Capitain Comeback junior tenía su oportunidad para ir aumentando su cuenta. Josh Freeman (19/38, 181 yardas, TD, pick) había tenido un partido discreto, apoyado en el juego de carrera de LeGarrette Blount (20 acarreos, 103 yardas, TD), pero sus drives finales son espectaculares. Parecía que iba a volver a conseguirlo, después de convertir un 4ª y 11 increíble al filo del two minutes warning, pero fue interceptado acrobátiamente por Brent Grimes en la reanudación. La jugada fue revisada y se intuía que el balón habría tocado el suelo en un momento, pero justo el culo (con perdón) de Grimes tapó el momento y el pick fue dado por válido. A eso se le llama tener una flor en el culo.
Los Bucs además del partido perdieron a Aqib Talib para el resto de la temporada. Pueden ser los primeros en descolgarse del grupeto en lucha por los playoffs.
A la estela de los Falcons siguen los New Orleans Saints (9-3), después de ganar un partido con tanta astucia por su parte como estulticia por la del DT Pat Sims. Los Cincinnati Bengals (2-10) jugaron un buen partido, contrarrestando la producción de Drew Brees (24/29, 313 yardas, 2 TD, pick) y de Chris Ivory (15 acarreos, 117 yardas, 2 TD) con un buen partido de Carson Palmer (23/33, 249 yardas, TD) y de Cedric Benson (19 acarreos, 49 yardas, 2 TD).
Pero este año los Bengals están más Bungles que nunca. Después de adelantarse por primera vez en el marcador gracias a un FG a 4:30 del final, consiguieron frenar el drive de Brees a 34 segundos del final, en su yarda 7. Era «4ª y 2» y con un FG la prórroga estaba más que cantada. Brees, sin embargo, se colocó en formación de jugar y a hacer un poco de teatro en un «hard count». Los 60.000 asistentes al Paul Brown Stadium sabían que no iba a haber snap. Los millones de espectadores televisivos sabían que no iba a haber snap. Mi hijo Ander, de 7 años, sabía que no iba a haber snap. Todo jugador defensivo sabe que lo único que tiene que hacer es estar quieto, pero Sims picó y saltó «off side». 1º down y en la siguiente jugada el pase de Brees a Marques Colston para el TD de la vctoria.
En la división Este, los Philadelphia Eagles (8-4) lograron en la noche del jueves una importante victoria sobre los Houston Texans (5-7) en un partio de ida y vuelta… e ida otra vez. Es el «estilo Texans». Primero los Eagles arrancaron con su ataque explosivo, con Michael Vick (22/33, 302 yardas, 2 TD, pick, más 48 yardas de carrera y otro TD) moviendo el balón sin problemas, y con LeSean McCoy machacando con carreras y sobre todo en jugadas de screen (130 yardas desde el scrimmage, 2 TD).
Los Eagles pusieron un marcador de 17-3 en los primeros 20 minutos de partido. Pero los Tejanos cuado se ponen, se ponen, y frenaron primero a Vick a base de golpes y luego con Matt Schaub (22/36, 337 yardas, 2 TD, pick), Andre Johnson (6 recepciones, 149 yardas ante la ausencia de Asante Samuel) y Arian Foster (109 yardas desde el scrimmage, 2 TD) dieron la vuelta al marcador en el 3º cuarto. Pero el ciclo volvió a girarse y Vick no tardó demasiado tiempo en darle la vuelta al maracador de nuevo en el 4º cuarto.
Los New York Giants (8-4) también siguen sumando a la espera de un fallo de los líderes o a la visita que les deben éstos, dentro de 15 días. El domingo, uno de los peores Washington Redskins (5-7) de las últimas temporadas, no les dieron demasiado trabajo.
Los Giants no necesitaron ni que Eli Manning (15/25, 161yardas, pick) hiciera un buen partido. Les bastó con poner a correr a sus trotones. La inefectividad de los Redskins a la hora de placar hizo el resto. Ahmad Bradshaw sumó 97 yardas y 2 TD en 25 acarreos. Pero es que Brandon Jacobs no necesitó más que 8 carreras para empatar a su compañero (103 yardas, 2 TD). Donovan McNabb tuvo que lanzar en 44 ocasiones (26 completados, 296 yardas, TD, 2 picks) para anotar el TD de la vergüenza. Los Redskins cometieron 6 turnovers y sumaron su 5ª derrota en los últimos 7 partidos.
También siguen las cosas igual en la Black&Blue. Los favoritos siguen sumando y los Chicago Bears (9-3) siguen ganando a los Detroit Lions (2-10) favorecidos por una cuestionable decisión arbitral. Nada nuevo bajo el sol.
Los Lions llevan 5 derrotas consecutivas. Ya detentan el récord de la NFL de derrotas consecutivas a domicilio y el domingo sumaron otro milestone más, el de la 19ª derrota consecutiva contra un rival divisional, algo que nungún equipo ha protagonizado desde la fusión de 1970. Pero dicho todo esto, hay que decir que los Lions tienen mala suerte, y fueron castigados por Ed Hochuli.
Contra los Bears hicieron un buen partido con su 3º QB. Drew Stanton completó 16 de los 24 pases que lanzó para 178 yardas, un gran pase de TD de 46 yardas a Calvin Johnson, además de correr para otro, sin cometer ningún turnover frente a la agresiva defensa de los Bears y con escaso apoyo de su juego de carrera. Pero Jay Cutler (21/26, 234 yardas, TD, fumble perdido) hizo lo suficiente para llevarse el partido, con el apoyo de Matt Forte (100 yardas desde el scrimmage, TD) y de Earl Bennett (7 recepciones, 104 yardas). La jugada clave fue la previa al pase de TD a Brandon Manumaleuna, con Hochuli señalando una «violencia innecesaria» en un empujón de Ndamukong Suh a Cutler en un scramble de éste. Increible.
Los Green Bay Packers (8-4), o quienes fueran los que jugaron con ese curioso uniforme de 1929, ganaron sin problemas a los San Francisco 49ers (4-8), como era previsible. El resultado habría sido más escandaloso si los Packers hubieran estado más finos en la 1ª mitad y Vernon Davis no se hubiera escapado 66 yardas en el único TD de los mineros. Sin Frank Gore en el roster, ni Brian Westrbrook ni Anthony Dixon pasaron de la treintena de yardas de carrera, y el ataque dirigido por Troy Smith (11/23, 129 yardas, TD, pick) volvió a naufragar. La próxima semana Alex Smith volverá a la titularidad. Un giro de 360º para volver al mismo sitio.
Por lo demás, Aaron Rodgers (21/30, 298 yardas, 3 TD, más 39 yardas de carrera) hizo su partido, con Greg Jennings (6 recepciones, 122 yardas, 2 TD) y Donald Driver (4, 73, TD) recibiendo largos pases de TD y sumando yardas tras la recepción ante la pasivida de la secundaria de los 49ers, especialmente sangrante en el caso de un receptor de 35 años que se recorrió medio campo contactando hasta con 4 defensores mineros sin que ninguno de ellos consiguiera derribarlo.
CHEERLEADER DE LA SEMANA
La NFC Worst tiene su pelea particular. Aquí no se lucha por una plaza de Wild Cards. Sólo se pelea por el título divisional… y si es posible con un récord no negativo.
El domingo Seahawks y Rams dieron un paso adelante en los dos objetivos y, de momento, ambos equilibraron suis récords.
Los Seattle Seahawks (6-6) dieron la vuelta a un partido en el que arrancaron 0-14, Matt Hasselbeck (17/30, 229 yardas) había sido interceptado en dos ocasiones en la 1ª mitad y en el que no abrieron su marcador hasta convertir un FG al filo del descanso.
No pintaba nada bien el partido al descanso en el Qwest Field. Pero enfrente estaban los Carolina Panthers (1-11). La ventaja proporcionada por las carreras de Jonathan Stewart (21 acarreos, 92 yardas, TD) y Mike Goodson (3, 19, TD) se disipó con 31 puntos incontestados de los locales, con un Marshawn Lynch estelar (21 acarreos, 83 yardas), anotando tres TD de carrera, y un pick six de Lofa Tatupu a Jimmy Clausen (18/34, 169 yardas).
Los St. Louis Rams (6-6) ganaron por fin en Arizona, después de 8 derrotas consecutivas en el desierto. Lo cierto es que estos Arizona Cardinals (3-9) son de lo más flojo que han visto los Rams en estos años. Ken Whisenhunt ya ha tenido suficiente paciencia con Derek Anderson (7/20, 93 yardas, pick) y éste ya no va a volver a la titularidad. Y después de que Max Hall (1/3, 10 yardas, pick) volviera a lesionarse, el rookie John Skelton (3/6, 45 yardas) parece que va a ser el nuevo timonel de los Cards.
Los Rams ganaron hasta con un mal patido de Sam Bradford (18/29, 187 yardas, pick). Un TD de Steven Jackson (28 acarreos, 102 yardas), 4 FG de Josh Brown y una completa actuación defensiva fueron más que suficientes.
TWO MINUTES WARNING
El tiempo apremia. Ya me he enrollado bastante. Toca resumir el resto de la jornada en un «Two Minutes Drill».
Los Minnesota Vikings (5-7) de Lesile Frazier volvieron a ganar a pesar (o gracias) de que Brett Favre, en su primer pase del partido, fuera golpeado e interceptado y tuviera que retirarse al vestuario con un hombro dislocado. Tarvaris Jackson, a pesar de que en sus primeros compases lanzara un «pick six» y acabara lanzando 3 intercepciones, movió suficientemente el balón (15/22, 187 yardas, 2 TD) para hacer funcionar el ataque vikingo y Adrian Peterson (16 acarreos, 107 yardas, 3 TD) hizo el resto, a pesar de estar listado como cuestionable para el partido. También fue bienvenida la aportación de Sidney Rice, con 5 recepciones para 105 yardas y 2 TD, uno de ellos realmente espectacular. Todo ello a pesar de las ausencias de Percy Harvin y del guard Steve Hutchinson. De los Buffalo Bills (2-10), poco digno de señalar.
Esta semana tendremos nuevo tema con la posibilidad de que Favre sume su 298ª titularidad consecutiva o no. Pero por lo menos, estoy seguro de que esta offseason no vamos a tener culebrón Favre.
Por último, los Cleveland Browns (5-7) vencieron a la versión «casera» de los Miami Dolphins (6-6) en un partido tan igualado como aburrido. No ganaban en Miami desde 1970, pero el partido no pasará a la posteridad. Lo más brillante de los de casa fue el FG de 60 yardas de Dan Carpenter, que iguala al 5º más largo de la historia de la liga. Pero el que valió fue el de 23 yardas de Phil Dawson, después de que Chad Henne (16/32, 174 yardas, TD, 3 picks) fuera interceptado en el que debía ser su drive ganador.
Seed
|
Record
|
||
1
|
10-2
|
||
2
|
9-3
|
||
3
|
8-4
|
||
4
|
7-5
|
||
5
|
9-3
|
||
6
|
8-4
|
Siguen vivos:
|
(6-6) > (6-6) > (6-6) > (6-6) > (5-7) > (5-7) > (5-7) |
|
Recién eliminados:
|
|
Seed
|
Record
|
||
1
|
10-2
|
||
2
|
9-3
|
||
3
|
8-4
|
Por delante de NYG por enfrentamiento directo | |
4
|
6-6
|
Por delante de SEA por enfrentamiento directo | |
5
|
9-3
|
||
6
|
8-4
|
Por delante de GB por récord de conferencia |
Siguen vivos:
|
(8-4) > (7-5) > (6-6) > (5-7) > (5-7) > (4-8) > (4-8) > (3-9) |
|
Recién eliminados:
|
Ninguno |
Como dicen por allí, Best team in football, right now. | ||
Best team… en la NFC. | ||
Siempre van a ser un peligroso rival en playoffs. |
Después de ponerse 14-0 les cayeron 31. |
||
Siguen encontrando maneras absurdas de perder. |
||
Siguen perdiendo, aunque esta vez por una injusta decisión arbitral. |