Mientras que los dueños siguen dándole vueltas a esto de alargar la temporada regular, con el único fin de engrosar la cuenta de resultados (se ve que no conocen la fábula de la gallina de los huevos de oro), ha quedado demostrado que en la AFC han bastado 16 jornadas, 15 partidos por equipo, para separar el grano de la paja.

 

Ya se conocen los nombres de 5 de los 6 clasificados para la postemporada y sólo una derrota de los Colts sumada a una victoria de los Jaguars alteraría el resultado actual. Ambos equipos acabarían empatados a «casi todo» y sólo el mayor número de victorias en la conferencia de los Jaguars les daría la plaza para los playoffs.

 

15, y no digamos 16 partidos, son más que suficientes para que el equipo que se lo merece juegue los playoffs y el que no lo merezca se quede fuera. Siembre habrá un equipo que se quede fuera por mala suerte y otro que entre con menos méritos (sólo hay que mirar a la NFC Worst), pero en el 90% de los casos el resultado es justo. Ampliar la temporada regular no aumentará este porcentaje de «justicia» sino todo lo contrario, ya que puede hacer que los partidos decisivos los jueguen los equipos con su 2º QB, su 3º RB o su 4º receptor, debido a las lesiones.

 

La 16ª jornada ha clasificado a varios equipos, pero no ha hecho más que confirmar lo que se reflejaba en la 15ª. Probablemente la mayor sorpresa ha saltado en la AFC Oeste. Los Kansas City Chiefs (10-5) tenían un cómodo encuentro en un Arrowhead que vuelve a ser un campo inexpugnable. Los Tennessee Titans (6-9) no estaban matemáticamente eliminados, pero están fuera de juego desde hace bastantes jornadas. Para cuando Kerry Collins (14/37, 235 yardas, 2 TD, 2 picks, uno de ellos retornado 54 para TD por el rookie Eric Berry) movió un poco el balón, los Chiefs ya dominaban el marcador 24-0 a mediados del 2º cuarto. La aportación de Chris Johnson (14 acarreos, 58 yardas) fue testimonial.

 

El que ha retomado su nivel enseguida después de su cirugía ha sido Matt Cassel (24/34, 314 yardas, 3 TD), que tuvo una soberbia actuación, ayudado por su socio principal, Dwayne Bowe (6 recepciones, 153 yardas, incluyendo una escapada de 75 para TD, el más largo de su carrera), y por Jamaal Charles, que sumó 117 yardas desde el scrimmage y dos TD de recepción. Por su parte, Thomas Jones se encargó de comer el reloj con sus 23 acarreos para 51 yardas. Collins sólo pudo disfrutar del balón durante 20 minutos.

 

Después del paseo sólo les quedaba batir a los Raiders en casa el domingo que viene, para lograr el primer título divisional desde 2003 y romper la hegemonía de los San Diego Chargers (8-7) de los últimos 4 años, pero éstos se lo pusieron aún más fácil, al ser derrotados por los Cincinnati Bengals (4-11) tres horas y media después.

 

Los Chargers venían de tener un «minibye» gracias a su partido-entrenamiento del jueves pasado contra los Niners, y es incomprensible su floja actuacíón del domingo. Frío y viento no deben ser excusa para un equipo que había perdiido sólo en una ocasión en los últimos 21 partidos disputados en diciembre. Phillip Rivers (27/40, 256 yardas, TD, pick) tuvo una actuación subpar y tampoco ayudó la lesión de Mike Tolbert en el 1º cuarto. Por el contrario, Carson Palmer (16/21, 269 yardas, 4 TD) tuvo una actuación perfecta, como si quisiera reivindicarse ante equipos interesados, a un paso de abandonar la franquicia. Y eso que tenía una nómina de receptores suplentes alrededor, liderado por Jerome Simpson (6 recepciones, 124 yardas, 2 TD). O tal vez fue por eso. por tener fuera a T.O. y a Chad Ochocinco.

 

Los Chargers tienen estadísticamente el 2º mejor ataque total, el 2º mejor ataque aéreo, la mejor defensa total, la mejor defensa aérea y la 2ª mejor defensa terrestre, pero están ya de vacaciones. Hay mentiras, grandes mentiras y estadísticas.

 

El resto de los clasificados para los playoffs de la AFC tenían compromisos bastante asequibles. Salvo los Jets, pero como se clasificaron aunque perdieron, da igual. Los New England Patriots (13-2) se dieron otro festín a cuenta de los Buffalo Bills (4-11), a quienes derrotaron por 15ª vez consecutiva.

 

Tom Brady (15/27, 140 yardas, 3 TD) batió el récord de Bernie Kosar con sus 319 pases sin ser interceptado, «and counting». El TE rookie Rob Gronkowski recibió dos de los pases de TD. BenJarvus Green-Ellis (19 acarreos, 104 yardas) y Danny Woodhead (125 yardas desde el scrimmage, TD) también dusfrutaron de las bondades de la defensa de los Bills. Ryan Fitzpatrick (16/26, 223 yardas) fue interceptado en tres ocasiones y perdió dos fumbles, al igual que el rookie C.J. Spiller. 7 turnovers en total. Los Pats, por el contrario, llevan 7 partidos sin cometer ninguno.

 

La visita de los Carolina Panthers (2-13) fue toda una bendición para los Pittsburgh Steelers (11-4), ya que pudieron ganar el partido sin Troy Polamalu y casi sin bajarse del autobús. Los Panthers sólo sumaron 119 yardas ofensivas y anotaron un triste FG con el que el vergonzante John Fox quería evitar otro rosco en su historial como inminente ex-head coach. Ben Roethlisberger (22/32, 320 yardas, TD. más otro de carrera), con Rashard Mendenhall (18 acarreos, 65 yardas, TD), menearon un poco el balón y se dedicaron a preparar ya la season finale en Cleveland, donde una victoria les asegura el título divisional y el bye en Wild Cards.

 

Los Baltimore Ravens (11-4) les aguantan la pelea hasta el final. Su victoria frente a los siempre «queridos» Cleveland Browns (5-10) les garantiza una plaza en playoffs, pero aún pueden pelear por el título divisional y el bye en Wild Cards. Los Browns pusieron poca carne en el asador. Colt McCoy (15/29, 149 yardas) está aún un poco verde para enfrentarse a una defensa como la de los Ravens, que esta vez sí que frenó a Peyton Hillis (12 acarreos, 35 yardas). McCoy fue interceptado en tres ocasiones, dos de ellas por Ed Reed. Mohamed Massaquoi también perdió un balón, pero lanzó un pase de TD de 29 yardas a Brian Robiskie en una trick play.

 

En ataque Ray Rice (25 acarreos, 92 yardas) meneó el árbol y Joe Flacco (12/19, 102 yardas, 2 TD, pick) recogió los frutos. Ahora sólo les queda ganar a los Bengals en casa y esperar que los Browns se muestren más sólidos contra los Steelers el próximo domingo.

 

JORNADA FANTASMA EN LA AFC SUR

Decía que 15 partidos bastan en la AFC, aunque la división Sur se vaya a decidir en la última jornada. Todo ello es debido a que la jornada 16 es casi como si no hubiera existido en la AFC Sur. La pasada jornada sólo podía servir para que los Jaguars retomaran el mando divisional si ganaban y los Colts perdían. Cualquier otro resultado dejaba las cosas para la season finale.

 

Despreciando los más que improbables empates, la derrota de los Jaguars hizo que la victoria de los Colts no sirviese de nada. Y al revés, la victoria de los Colts hizo que la derrota de los Jaguars diera igual. Si los Colts pierden frente a los Titans y los Jaguars vencen a los Texans los de Florida se harán con el título divisional. Cualquier otro resultado dará la ventaja a los potros.

 

Pero a pesar de todo, el que los Jacksonville Jaguars (8-7) fueran incapaces de ganar un partido frente a unos Washington Redskins (6-9) que venían con su 2º QB (Rex Grossman, 19/39, 182 yardas, TD, pick), un montón de bajas en su defensa y una racha de 4 derrotas consecutivas, no dice nada bueno del equipo de Jack Del Rio. Sí, les faltaba Maurice Jones-Drew, pero Rashad Jennings (15 acarreos, 32 yardas) debería estar capacitado para cubrir su ausencia, o debería haber estado.

 

El caso es que los Redskins jugaron por su orgullo, defendieron muy bien y lo poquito que mostraron Grossman y Ryan Torain (65 yardas y un TD en 20 acarreos) bastó para que fueran la mayor parte del partido por delante en el marcador. David Garrard (22/38, 299 yardas, TD, 2 picks) volvió a fallar cuando más se le necesitaba. Consiguió empatar el partido con un scramble de 20 yardas para TD, pero fue interceptado en el 1º drive de la prórroga, lo que dejó a Graham Gano un fácil FG de 31 yardas para ganar la 3ª de las 4 OT que los Redskins han jugado esta temporada.

 

Conocido el resultado, los Indianapolis Colts (9-6) no se jugaban nada en el Black Hole, y los Oakland Raiders (7-8) volvieron a arrancar fuertes, con Jacoby Ford retornando el kickoff inicial 99 yardas para TD. La defensa local frenó los dos primeros drives de los Colts, pero cuando Peyton Manning (16/30, 169 yardas, 3 TD, 2 picks) se puso a diseccionar la defensa de los locales el partido estuvo en sus manos. El peor ataque terrestre de la liga corrió más que nunca. Recuperado Joseph Addai, junto con Dominic Rhodes y Donald Brown sumaron 171 yardas y un TD, mientras que en el sentido contrario la defensa de los Colts frenó al peligroso Darren McFadden (45 yardas en 11 acarreos, 31 en 4 recepciones) y puso el partido en manos de Jason Campbell (29/42, 231 yardas, TD). Así, contuvieron a los Raiders a base de FG (4/5 para Sebastian Janikowski, el más largo de 59 yardas) y sólo permitieron un TD ofensivo en el último drive de los locales.

 

Manning volvió a ser interceptado en dos ocasiones (una de ellas de rebote), pero los Raiders no capitalizaron los turnovers. A 1:39 del final, en «3ª y 2», los Colts necesitaban un 1º down para rematar el partido y Manning con un perfecto naked bootleg se fue solo para la endzone rival. Aún estando asfixiado, tras 27 yardas de carrera, tuvo la inteligencia de tirarse al suelo para evitar anotar el TD o que Matt Shaughnessy le atrapara por detrás. El partido estaba ya ganado.

 

LA NFC ESTÁ CARA

Salvo que juegues en la división Oeste, claro. Con dos campeones divisionales (Bears y Eagles), otro «in prectore» (Falcons), el otro irrelevante, y los Saints clasificados, el interés radica en la última plaza para Wild Cards. Packers, Giants o Bucs se pueden quedar fuera de los playoffs con un meritorio 10-6.

 

Por ello el partido de la jornada en la NFC era el de Lambeau Field. Allí, los Green Bay Packers (9-6) trituraron a unos New York Giants (9-6) que cometieron hasta 6 turnovers. Aaron Rodgers pudo ser de la partida, olvidada su conmoción cerebral, y jugó un partido magistral, convirtiendo 25 de los 37 pases que lanzó, para 404 yardas y 4 TD. Perfecto se le queda corto. Sin una OL especialmente competente, Rodgers evitó uno de los pass rushes más demoledores de la liga con su rapidísimos pases o con su movilidad, ganando tiempo en el pocket. Sus principales aliados fueron Greg Jennings (7 recepciones, 142 yardas) y Jordy Nelson (4, 124, TD). El FB John Kuhn fue el otro héroe del partido, anotando tres cortos TD, dos corriendo y uno recibiendo.

 

En el otro sentido del juego el dominio tuvo el mismo color. Eli Manning (17/33, 301 yardas, 2 TD) tuvo uno de esos días en el que el juego de carrera no consigue imponerse y se pone a lanzar balones sin sentido y fue interceptado en cuatro ocasiones. Y por si eso fuera poco tanto Brandon Jacobs como Ahmad Bradshaw, el RB que más fumbles ha cometido en la temporada, complementaron su pobre actuación perdiendo sendos balones. Mario Manningham, con un TD de 85 yardas, fue de nuevo el jugador más productivo de los neoyorkinos, pero aún con la resaca del «Miracle at the New Meadowlads», los Giants están mas «out» que «in».

 

Los Packers, sin embargo, tienen aún un duro hueso por roer para clasificarse para los playoffs. Deben ganar a unos Chicago Bears (11-4) que no se juegan ya nada, pero que seguro les gustaría eliminar a sus rivales. Hay que tener en cuenta además que los Bears llevan dos meses de juego extraordinario, con 7 victorias y una derrota, y con Jay Cutler lanzando 16 TD por 7 intercepciones. El domingo derrotaron a los New York Jets (10-5) en un espectáculo ofensivo bajo la nieve.

 

El partido fue un «toma y daca» en el que el marcador fue alternando ventajas. Cutler (13/25, 215 yardas, 3 TD, pick, TD de carrera) volvió a estar espléndido, con Johnny Knox (4 recepciones, 92 yardas, 2 TD) como principal diana y con Devin Hester (3, 48, TD), anotando también como receptor, además de protagonizar un par de buenos retornos. Matt Forte equilibró el ataque con 113 yardas y un TD en 19 acarreos, además de sumar 56 yardas de recepción. Cutler, Knox, Hester y Forte, un magnífico poker para el ataque de Mike Martz, que ahora sí que está funcionando.

 

Los Jets, cuya defensa no hizo acto de presencia en el partido salvo en el afortunado pix six de Dwight Lowery, respondieron con Mark Sanchez (24/37, 269 yardas, TD a Santonio Holmes, pick) y con su dueto LaDainian Tomlinson – Shonn Greene (98 yardas y dos TD en 25 acarreos), pero se pasaron todo el 4º cuarto sin poder anular la última ventaja de los Bears, hasta que Chris Harris interceptó a Sanchez en su agónico intento de protagonizar un drive ganador en el último minuto. Al final, todos quedaron contentos cuando Gano anotó el FG de la victoria de los Redskins, que clasificaba a los Jets.

 

El MNF, perdió el halo de «final de la NFC Sur» cuando los Saints perdieron en Baltimore, pero no dejaba de ser un partido muy interesante. Y no fue un duelo de ataques explosivos, como podía preverse, sino un gran esfuerzo defensivo por ambas partes, enfocado a frenar el juegpo de carrera y presionar al QB rival.

 

Los New Orleans Saints (11-4) empezaron más entonados, con dos «tres y fuera» consecutivos de la defensa y aprovechando sendos fumbles de los Atlanta Falcons (12-3), uno en el snap y otro de Michael Turner (17 acarreos, 48 yardas) en la goaline. Drew Brees (35/49, 302 yardas, TD, 2 picks) aprovechó los erroes de los Falcons y llevó el peso del ataque, aunque Pierre Thomas colaboró con 63 yardas y un TD en sus 19 acarreos.

 

Matt Ryan (15/29, 148 yardas, TD) tuvo un día difícil para hacer gala de su récord en el Georgia Dome, pero consiguió acortar distancias con Roddy White (3 recepciones, 43 yardas, TD). El partido no tenía dueño, pero Brees, a comienzos del 4º cuarto fue interceptado en drives consecutivos, de maneras parecidas y tal y como le ocurrió en el partido de ida. Nadie va a discutir la calodad de Brees, pero este año ha lanzado demasiados picks y debería tener más capacidad para aprender de sus propios errores.

 

Los Falcons se adelantaron de la mano de Chauncey Davis, que retornó para TD el 1º pick de Brees. Sin embargo, el MVP de la pasada Super Bowl se redimió con un impecable drive de 13 jugadas en 7 minutos, rematado por el pase de TD al TE rookie Jimmy Graham. Matty Ice tenía tres minutos y medio para volver a remontar un partido, pero Mike Smith devolvió incomprensiblemente el balón en un 4ª y 6 desde su yarda 43, a 2:52 para el final. No hay que decir que los Falcons no volvieron a tocar el balón.

 

Los Falcons llevaban 24 victorias consecutias cuando iban ganando el el 4º cuarto (desde hace dos años, cuando también fueron derrotados por los Saints), pero tienen aún en su mano el Home Field Advantage, les basta con ganar en casa al peor equipo de la liga, pero Smith va a tener que tomar decisiones más audaces si quiere avanzar en los playoffs.

 

Por último, el frío, el viento y la nieve pospusieron el SNF a la noche del martes, en una especie de Tuesday Night Football por primera vez desde 1946. Esto debió despistar a los Philadelphia Eagles (10-5), quienes fueron sorprendidos por unos casi difuntos Minnesota Vikings (6-9), que jugaron con un QB rookie, Joe Webb (17/26, 195 yardas, TD de carrera), y con un Adrian Peterson (22 acarreos, 118 yardas, TD, fumble perdido) cojo.

 

Por los Eagles parecía que sólo jugaba Michael Vick (25/43, 263 yardas, TD, pick y 63 yardas de carrera con otro TD). También cometió dos fumbles. DeSean Jackson no apareció, a Jeremy Maclin tampoco, y LeSean McCoy sólo tuvo 13 acarreos, para 44 yardas (y 41 de recepción). Un inciso. Lo he repetido varias veces, no veo a otro equpo placando peor que los Eagles.

 

Con la broma, los de Andy Reid pierden la opción de pelear por el bye y recibirán al que obtenga la 2ª plaza de Wild Cards: Packers, Giants o Bucs.

 

CHEERLEADER DE LA SEMANA

Hacía tiempo que las cheerleaders de los St. Louis Rams (7-8) no estaban tan contentas. No es para menos. Su equipo está a una victoria de volver a los playoffs, después de una travesía del desierto de 5 años, con un récord de 6-42 en los últimos tres.

 

En la 1ª de las dos «finales» de la NFC Worst, los de Steve Spagnuolo derrotaron a unos malos San Francisco 49ers (5-10), quienes en el partido más importante de la temporada volvieron a flojear demasiado, a pesar de haber tenido 3 días más para preparar el partido.

 

El ya ex-head coach de los Mineros, Mike Singletary volvió a dar la tirularidad a Troy Smith (7/19, 153 yardas, TD, pick, Safety) y la jugada no le pudo salir peor. No sólo la actuación del buckeye fue bochornosa, sino que además, harto de las continuas broncas del Samurai, se enfrentó al mister a grito pelado en la banda, delante de las cámaras en un sonrojante espectáculo de desgobierno.

 

A los 49ers sólo les metió en el partido el retorno de punt de 78 yardas para TD de Tedd Ginn, era el 2º cuarto y Smith sólo había completado un pase, para 4 yardas. A pesar de todo, un big play en forma de pase de TD de 60 yardas a Michael Crabtree permitió a los visitantes llegar al descanso con el marcador favorable.

 

Pero sólo fue un espejismo. Los Niners sólo anotaron un FG en toda la 2ª mitad, mientras que los Rams, con unos serios Sam Bradford (28/37, 292 yardas, TD) y Steven Jackson (24 acarreos, 48 yardas, TD) en ataque, y con una gran defensa, liderada por su «closer» particular, Chris Long, controlaron el partido.

 

Si los Rams ganan en Seattle recibirán, casi seguro a los Saints en Wild Cards. Singletary, por su parte, además de leer las ofertas de empleo de los periódicos, tendrá que aguantar en casa al que puede ser su yerno, Oshiomogho Atogwe, novio de su hija, quien contribuyó a su despido con una intercepción.

 

Lo bueno para los Niners es que ya nadie le señala con el dedo como el posible peor campeón divisional de la historia. Ahora todas las miradas se dirigen hacia los Seattle Seahawks (6-9), que pueden ser los primeros clasificados para playoffs con récord negativo. Serán campeones de la NFC Worst si ganan en casa a los Rams en el partido que cierra la temporada regular, después de haber perdido sus últimos tres partidos por 19, 16 y 23 puntos.

 

Matt Hasselbeck sigue demostrando que no está para esto. Esta vez sufrió un tirón tras un scramble para TD, ¡de una yarda! Charlie Whitehurst (11/18, 66 yardas) volvió a dirigir un inoperante equipo que sólo sumó 174 yardas ofensivas. Los Tampa Bay Buccaneers (9-6), por el contrario, llegan a la season finale con opciones de Wild Card, ¡quién lo iba a decir en pretemporada!. Josh Freeman (21/26, 237 yardas) lanzó ¡5 pases de TD! y LeGarrette Blount sumó 164 yardas en 18 acarreos. Un festival ofensivo total. Kellen Winslow y Mike Williams recibieron pases de TD a pares.

 

Los Bucs necesitan ganar en el Superdome y que pierdan Packers y Giants. No es fácil que ocurra, pero nunca es descartable. Cosas más difíciles ya se han visto.

 

TWO MINUTES WARNING

El tiempo apremia. Ya me he enrollado bastante. Toca resumir el resto de la jornada en un «Two Minutes Drill».

 

En el 2º «Thursday» Night Football, disputado el sábado, en Navidad, el rookie John Skelton (11/25, 183 yardas, TD) sólo consiguió conectar con su mejor receptor en una ocasión en toda la noche, pero valió por todo el partido. Su pase de 26 yardas a Larry Fitzgerald en «4ª y 15», sentó el FG de 48 yardas con el que Jay Feely dio la victoria a los Arizona Cardinals (5-10). Atrás quedaba el extra-point fallado por David Buehler, que propició que el FG de Feely fuera para la victoria en vez de para frozar la prórroga.

 

Los Dallas Cowboys (5-10) habían remontado un partido que se le había puesto cuesta arriba con Jon Kitna (12/20, 115 yardas) lanzando más pases de TD a los de colorado (pick sixs de Dominique Rodgers-Cromartie y de Greg Toler) que a los de blanco y plata (Jason Witten). Luego vino su lesión y sustitución por Stephen McGee (11/17, 111 yardas, TD), que dio la vuelta al partido con un pase de TD de 45 yardas a Miles Austin, pero ya conocemos el desenlace final.

 

 

Los Houston Texans (5-10) lo volvieron a hacer. Tal vez no es que sean inconsistentes sino que los partidos deberían durar 30 minutos. La hora se les hace muy larga a los tejanos. En el Mile High se fueron al descanso con un 17-0 en el marcador de la mano de Matt Schaub (23/33. 310 yardas, TD, pick) y Arian Foster (135 yardas desde el scrimmage, TD), a pesar de la ausencia de Andre Johnson, pero en la 2ª mitad fueron unos corderitos y permitieron al remontada de los Denver Broncos (4-11), de la mano de un buen Tim Tebow (16/209, 308 yardas, TD, pick, 27 yardas de carrera con otro TD a tres minutos del final) y un productivo Correll Buckhalter (92 yardas desde el scrimmage, con TDs de carrera y recepción).

 

El duelo entro dos de los peores equipos de la conferencia se resolvió cuando Schaub fue interceptado en el umbral del FG range. Curiosamente, los equipos cuentan con los líderes de la liga en el juego aéreo y terrestre. Brandon Lloyd sumó otras 111 yardas para consolidar su liderato entre los receptores de la liga. Foster, líder de los corredores sobrepasó las 2.000 yardas desde el scrimmage. Hasta ahora sólo otro jugador no drafteado lo había conseguido: Priest Holmes.

 

Por último, los Miami Dolphins (7-8) volvieron a perder en casa (1-7), en los minutos finales, con otras 2 sangrantes intercepciones a Chad Henne (29/44, 278 yardas, TD) en drives consecutivos, y un patético play calling en los últimos segundos, cuando se buscaba el empate a la desesperada. Los Detroit Lions (5-10), que jugaron con su 3º QB, Shaun Hill (14/26, 222 yardas, 2 TD), pueden decir ahora que llevan un récord de 0-2 en sus últimas salidas. El partido se decidió cuando la defensa liderada por Ndamukong Suh presionó más a Henne. Tras la 1ª intercepción, los Lions empataron el partido con un FG, pero 3 jugadas después DeAndre Levy volvió a interceptar a Henne y caracoleó 30 yardas entre la pasividad de los de blanco hasta acertar con el TD de la victoria.

 

 

Seed		Record
1		13-2	Campeón de la AFC Este. Consigue el Home Field Advantage
2		11-4	Clasificado para los playoffs. Por delante de BAL por récord divisional
3		10-5	Campeón de la AFC Oeste
4		9-6
5		11-4	Clasificado para los playoffs
6		10-5	Clasificado para los playoffs

Sigue vivo:	(8-7)
Recién eliminados:	, y

 

Seed		Record
1		12-3	Clasificado para los playoffs
2		11-4	Campeón de la NFC Norte. Consigue el bye en Wild Cards
3		10-5	Campeón de la NFC Este
4		7-8
5		11-4	Clasificado para los playoffs
6		9-6	Por delante de NYG y TB por strength of victory

Siguen vivos:	(9-6) > (9-6) > (6-9)
Recién eliminados:

 

		Los playoffs pasan por Foxboro.
		Aún no están clasificados para los playoffs, pero me parecen el equipo que puede ganar el George Halas Trophy.
		A pesar de la derrota tienen el Home Field Advantage a tiro, pero Saints, Bears o Eagles podrían ocupar perfectamente su plaza.

 

Los Panthers son ya proietarios del pick #1 del próximo draft. Con Jimmy Clausen lanzando dos TD por 8 picks, pero con muchos huecos por cubrir… ¿Irán a por Andrew Luck? ¿Venderán la plaza?