Un informe independiente denunció este jueves que algunos de los máximos responsables de la universidad pública de Pensilvania, Penn State, conocieron y ocultaron durante años los abusos sexuales contra alumnos cometidos en el equipo de fútbol americano.
El famoso entrenador Joe Paterno, fallecido en enero, y otros altos cargos del prestigioso centro universitario conocían los hechos, por los que fue condenado el también entrenador Jerry Sandusky, según un informe publicado por el exdirector del FBI Louis Freeh.
El informe, de 267 páginas, es fruto de una investigación de ocho meses llevada a cabo por la empresa de Freeh, contratada por la universidad después de que Sandusky fuese detenido el pasado noviembre, lo que desencadenó uno de los mayores escándalos deportivos del país.
Según las investigaciones del exdirector del FBI, Paterno y algunos de los responsables del centro ocultaron los hechos debido a que estaban preocupados por la mala publicidad que le pudiera acarrear a la universidad.
El informe concluye que tanto Paterno como el presidente, Graham Spanier; el director deportivo, Tim Curley, y el vicepresidente, Gary Schultz, «no hicieron nada parar detener» a Sandusky durante más de una década.
«Con el fin de evitar las consecuencias de la mala publicidad, los dirigentes más poderosos de la universidad, ocultaron en varias ocasiones hechos importantes relacionados con el abuso de niños por Sandusky», indica el informe.
La familia de Paterno emitió un comunicado, tras hacerse público el informe, en el que responde a las alegaciones.
«Joe Paterno no era perfecto. Cometió errores y se arrepintió de ellos. Sigue siendo el único que dio un paso adelante y dijo que, mirando atrás, le hubiera gustado hacer más. Pensar, sin embargo, que habría protegido a Jerry Sandusky para evitar la mala publicidad no es realista, simplemente», se afirma en el comunicado.
Además, los familiares de Paterno valoraron positivamente el esfuerzo realizado durante la investigación, pero rechazaron algunas conclusiones del texto relativas a los motivos y las intenciones que presuntamente explican el silencio del entrenador.
«Se puede argumentar que Joe Paterno debería haber ido más lejos. Tendría que haber presionado a sus superiores para ver que estaban haciendo su trabajo. Aceptamos las críticas».
«Pero, al mismo tiempo, Joe Paterno y todos los demás sabían que Sandusky había sido investigado por las autoridades que aprobaron sus múltiples adopciones y la crianza temporal de niños», añade el comunicado.
Por otro lado, tras el informe publicado, el presidente de la firma Nike, Mark Parker, anunció que la marca deportiva ha decidido cambiar el nombre del Centro de Desarrollo Infantil Joe Paterno, un centro de cuidado infantil en la sede de la empresa.
Hace apenas dos semanas, un jurado en Bellefonte (Pensilvania) encontró culpable a Sandusky de 45 de los 48 cargos que pesaban en su contra por agredir sexualmente a por lo menos 10 niños entre 1994 y 2008.
Sandusky, de 68 años, que se declaró no culpable de todos los cargos, que al principio fueron 52, podría pasar el resto de su vida en la cárcel cuando se dicte la sentencia, que no se dará a conocer hasta dentro de al menos tres meses.
Sandusky fue entrenador ayudante de fútbol americano del prestigioso centro universitario de Penn State, junto al mítico Joe Paterno, despedido a consecuencia del escándalo y fallecido el pasado enero.
-EFE