Sólo hubo un color en el estadio de los Panthers, el blanco que anoche lucieron los New York Giants. De principio a fin los defensores del título dominaron a un equipo local que fue una auténtica decepción y que más que pantera recordó al lindo gatito que divierte a Piolín. Al descanso los hombres de Tom Coughlin ya dominaban por 20-0 y al final un 36-7 que permitió incluso que David Carr disfrutara de unos minutos de juego.
Los grandes protagonistas de la noche fueron dos suplentes habituales de Nueva York. El running back Andre Brown, 113 yardas y 2 TDs, y el receptor Ramses Barden, 9 recepciones, 138 yardas. Ambos no tuvieron ningún problema para triturar a la defensa de Carolina -realmente mal- y al descanso ya tenían números de «probowlers».
Eli Manning (27/35, 288 yardas, 1 TD) movía a su ofensiva por el campo y conectaba una y otra vez con sus receptores, aprovechando a demás que los defensa de Carolina eran incapaces de aprovechar dos claras oportunidades de interceptar pases que pasaban entre sus manos.
Cam Newton por su parte firmó una primera parte horrorosa en la que la defensa de los Giants no le permitió ninguna alegría y sólo pudo maquillar sus números tras el descanso (16/20, 242 yardas, 3 ints).
En definitiva un contundente toque de atención para el equipo al que Ryan Khalil daba como campeón de la Superbowl. Mucho van a tener que trabajar los Panthers si quieren estar presentes en esa cita.