El entrenador de Ohio State Urban Meyer había permanecido en silencio al respecto del caso del ex-TE de los New England Patriots Aaron Hernandez. Hasta ahora.
Meyer, quien dirigió a Hernández durante tres temporadas en la Universidad de Florida de 2007 a 2009, rompió su silencio este sábado para comentar como su programa había lidiado con el jugador ahora acusado del asesinato en primer grado de Odin Lloyd.
«Mis oraciones y pensamientos están con la familia y amigos de la víctima» comentó Meyer en unas declaraciones recogidas tanto en The Columbus Dispatch como en The Gainesville Sun. Relacionar estos cargos tan serios con la Universidad de Florida, conmigo o con mi staff es incorrecto e irresponsable.»
Meyer desmintió las informaciones en las que se citaba que Hernández había dado positivo en multiples controles antidroga y que había recibido trato de favor en Florida.
«Recibí un email de un amigo donde me comentaba que había una acusación de multiples controles de droga positivos por Hernández tapados por la Universidad de Florida y su staff de entrenadores. Es no es verdad en absoluto,» sentenciaba Meyer. «Hernandez fue sometido a la misma política de controles que cualquier otro jugador.»
«Fue atleta de Florida hace 4 años y se hacen algunos comentarios que no son correctos. Nuestro staff, yo mismo y nuestras familias trabajaron muy duro para enseñarle y guiarle (a Hernández).»
A parte de los rumores de uso de droga, el departamento de policía de Gainesville (Fla.) emitió un informe sobre un incidente de 2007 en el que se alude a un doble tiroteo sobre por el que varios jugadores de Florida, entre ellos Hernández, fueron interrogados.
El tiroteo sucedió cuando Hernández era un freshman de 17 años. Dos hombres resultaron heridos incluyendo uno al que dispararon en la cabeza. El informe policial, en el que el nombre de Hernández está incluido, indica que las dos víctimas fueron tiroteadas en un coche tras abandonar un nightclub. Un testigo visual comentó que había dos tiradores incluyendo un «hawaiano» o «hispano musculado y «con muchos tatuajes.»