El propietario de los Cincinnati Bengals Mike Brown declaró que accedió a recibir de nuevo a las cámaras de «Hard Knocks» en el training camp del equipo porque quiere que los televidentes vean que su equipo ha cambiado.
Brown comento este martes en el tradicional almuerzo de pretemporada de la franquicia que la mala reputación de los Bengals se debe a haber drafteado y fichado a jugadores problemáticos repetidamente. Asumió la responsabilidad y añadió que su forma de pensar había cambiado. Los Bengals han evitado a jugadores conflictivos en los últimos drafts.
Brown tocó temas de todo tipo. Comentó que no había ninguna evidencia de que las conmociones cerebrales terminarán en demencia aunque agradeció que la NFL haga énfasis en la seguridad de los jugadores. Donde mostró su disconformidad con la liga es en el hecho de incluir cámaras en los vestuarios para mejorar la experiencia de los fans. Brown lo explicó diciendo que era «uno de los discutiendo por los viejos buenos tiempos.»