Los Tampa Bay Buccaneers se han visto obligados a tratar sus instalaciones de entrenamiento para eliminar cualquier resto de existencia de MRSA, una infección bacteriana que ha dejado fuera de combate al guarda pro-bowler Carl Nicks y que ha provocado que el kicker Lawrence Tynes haya tenido que pasar por el quirófano esta semana para tratar una infección en un dedo del pie. Así lo ha confirmado el general manager del club Mark Dominik.
Los doctores diagnosticaron que Nicks y Tynes había contraido la MRSA, una poderosa bacteria resistente a la penicilina. Nicks reveló recientemente que tenía una infección de estrafilococos en el pie que le iba a tener fuera de juego de manera indefinida. El preparador atlético de los Bucs Todd Toriscelli también ha batallado con una infección bacteriana aunque parece que no se trata de MRSA.
«Hemos tenido a una empresa trabajando en el edificio hace una semana después de que los cultivos tomados a Nicks y Tynes demostraran que se trataba de MRSA,» añadió Dominik. «Ha sido una medida preventiva pero no nos lo queremos tomar a la ligera. Hemos tratado la instalación y la liga ha aprobado nuestras acciones.»
Los Bucs firmaron a Rian Lindell el mismo día que Tynes era operado para eliminar la infección de su pie.