Los Denver Broncos arrancaron la temporada de manera espectacular pasando por encima de los Baltimore Ravens, defensores del título, en un partido colosal de un Peyton Manning (26/41, 452 yardas, 7 TD) que agrando aún más su leyenda llevando a los suyos a una victoria por 49-27 al tiempo que igualaba el récord de más pases de TD en un partido de la NFL. El encuentro comenzó con 45 minutos de retraso ante la amenaza de tormenta eléctrica sobre el Sports Authority Field. Después la tormenta fue de color naranja.
Tras un rápido intercambios de punts en unos drives iniciales bastante imprecisos, Joe Flacco (34/62, 362, 2 TD, 2 Ints) empezó a carburar en la segunda serie de los Ravens y la redondeo con un pase al fullback Vonta Leach que fue el encargado de anotar el primer touchdown de la temporada.
Peyton Manning parecía tener sólo ojos para Wes Welker y el ex-WR de los New England Patriots era el encargado de conseguir todos los primeros downs del primer cuarto para los Broncos sin embargo, el veterano QB no terminaba de meter a la ofensiva en ritmo y los de Colorado se veían obligados a alejar la pelota. En uno de estos punts se produjo la jugada más tonta del partido. Jacoby Jones era envestido por un compañero cuando se preparaba para retornar el balón y tenía que abandonar el campo con un esguince de rodilla.
Para colmo de males en la inmediata serie ofensiva Flacco era intercptado de manera espectacular por Chris Harris y, ahora sí, Manning no desaprovechaba el regalo para, en conexión con el TE Julius Thomas, completar un envío de 23 yardas con el que se empataba el choque.
No duro mucho la alegría de los locales. Welker, en su intento por atrapar un punt dentro de su propia yarda 5, era incapaz de controlar un balón que quedaba suelto y era recuperado por los equipos especiales de los Ravens. Ahora era Ray Rice el que no perdonaba y devolvía la ventaja a los actuales campeones.
Thomas se convertía en el arma secreta de los Broncos y primero con una recepción de 44 yardas y luego con otra de 23 para TD prácticamente monopolizaba un drive que volvía a poner las tablas en el marcador.
Antes del descanso los Ravens aún tuvieron tiempo para que Justin Tucker anotara un field goal que puso el 17-14 con el que se llegó al intermedio.
La segunda parte no pudo empezar mejor para los Broncos. Primero Manning firmaba su mejor serie de la noche -un drive a tal velocidad que los Ravens no tuvieron tiempo ni de apreciar que un pase a Welker fue incompleto- y la culminaba con un precioso pase de TD para Andre Caldwell. Después la defensa recuperaba un «pass rush» hasta entonces poco efectivo, lograba un sack y forzaba a Baltimore a ejecutar un punt que era bloqueado dentro de su «Red zone». Desde allí Manning conectaba con Welker que de esta manera firmaba su primera anotación como jugador de Denver ante el desconcierto de los visitantes.
No acabó ahí el infernal tercer cuarto vivido por Baltimore. Tras otro punt el veterano QB de Denver volvió a dirigir otro maravilloso drive «no huddle» en el que, combinando pases y carreras con total eficacia, desmanteló a la defensa de los campeones. Con un nuevo pase para Welker, su quinto envío de touchdown de la noche, los Broncos pusieron el marcador en 35-17.
Parecía que los Ravens habían encontrado la manera de detener el huracán ofensivo de los Broncos pero fue sólo un espejismo. Al inicio del último cuarto Manning volvía a ejercer de cirujano y con otro preciso pase para Demaryius Thomas sumaba su sexto pase de TD del partido.
Flacco seguía sin encontrar soluciones y era interceptado por Danny Trevathan quien parecía retornar el balón para TD. Por desgracia para él, la repetición dejaba claro que el defensa de los Broncos había soltado el balón antes de cruzar el plano de la goal line y, en la que sin duda será una de las jugadas más estúpidas de la temporada, el balón volvía a manos de los Ravens que se libraban de un TD cantado.
El drive seguía vivo y Flacco conectaba con Marlon Brown para acortar las diferencias y maquillar un tanto el marcador.
Pero la noche nos reservaba un momento mágico. Manning conectaba en un corto «screen» con Demaryius Thomas, el WR rompía por velocidad a la defensa de Baltimore, se iba 78 yardas para TD y convertía a Peyton en el primer QB desde 1969 en lanzar 7 pases de anotación igualando el récord de la NFL.
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