Lo que un trade esconde

Cuando un equipo de la NFL quiere librarse de un jugador con el que tiene contrato tiene varias opciones. La primera, y la mas sencilla, es cortarlo rompiendo de manera unilateral el contrato que une a las partes, asumir las consecuencias salariales que tenga que asumir y el jugador queda como agente libre, con lo que puede firmar por cualquier equipo.

Las franquicias tienen otra opción con los veteranos denominada el “Waiver Wire”, el jugador es puesto en una lista especial que recibe ese nombre. Los demás equipos, en orden inverso a la clasificación, pueden reclamar al jugador, y lo mas importante y por lo que resulta interesante para el equipo que renuncia al jugador, su contrato salvo la parte referente al bonus.

La última opción es hacer un intercambio, lo que en lenguaje de la NFL se llama hacer un TRADE. Los trades no solamente se usan para prescindir de un jugador, sino que en muchas ocasiones hay jugadores que lo piden porque quieren abandonar la franquicia con la que tienen contrato, puede ocurrir que un equipo le interese librarse de un jugador y su contrato, quiere reconstruir con lo que pueda recibir a cambio (en la NFL no se puede recibir dinero sino otros jugadores o elecciones de draft), o simplemente la oferta que se recibe a cambio del jugador es irrechazable.

El trade mas famoso es sin ninguna duda el que fuera conocido como el “Hershell Welker trade”, un mega intercambio de jugadores y elecciones de draft entre los Dallas Cowboys y Minnesota Vikings en que los Cowboys fueron los claros ganadores. Jimmy Johnson pudo con lo que recibió a cambio construir los Cowboys de los 90, equipo que ganó 3 Superbowls en 4 temporadas.

Otros trades famosos fueron los de O.J. Simpson a los San Francisco 49ers desde los Buffalo Bills, donde los 49ers perdieron mucho y los Bills no ganaron nada. En la historia de la NFL hay muchos y diversos trades con consecuencias muy diferentes, en unos casos buenas, en otra no tanto, y otros simplemente un fracaso en toda regla.

No es mi intención aquí contaros los mayores trades de la NFL, sino que quiero hablar de uno en concreto y el verdadero “leit motiv” que hay detrás de él, me refiero al trade que acabó con Anquan Boldin en San Francisco a cambio de una sexta ronda para los Baltimore Ravens, un trade que a la vista de lo sucedido en este primera semana de la nueva temporada pueda que resulte cada vez menos comprensible. Y de dependiendo como avance la temporada puede terminar siendo uno de los mejores trades de toda la historia, pero para eso deberemos esperar hasta febrero, hasta entonces todo son habladurías y especulaciones.

Los motivos por los cuales se puede dar un trade son de los mas variopintos. Detrás de un trade siempre hay un interés, algo que se ve pero también hay lo que no se puede ver. El equipo que pierde al jugador busca ganar algo a cambio, pero lo que también se busca es no reforzar a un rival, sobre todo si es directo o dentro de la misma división. Por eso cuando un equipo decide hacer un trade por uno de sus mejores jugadores ante todo trata de evitar reforzar a un rival divisional y los primeros equipos descartados suelen ser esos, aunque excepciones siempre las hay y ha habido como veremos.

Si un jugador muestra sus intenciones y quiere abandonar la franquicia para la que juega y desea marcharse a otro equipo, que puede pagarle mas, o donde tengas mas opciones de ganar, entonces ocurre qué el equipo que tiene el jugador sabe que tiene una patata caliente. Pero lo que no puede hacer bajo ninguna circunstancia es reforzar a un rival, sobre todo si es directo. De allí que cuando el propietario del contrato empieza a buscar compradores suele haber una lista de equipos que no tienen ninguna opción, ese fue el caso de Marshall Faulk.

Faulk era la estrella de los Indianapolis Colts hasta que Bill Polian elige a Peyton Manning en el draft y empieza un proceso de reconstrucción de la franquicia. Polian sabe que tiene que traspasar a su RB y el primer candidato que muestra interés son los Miami Dolphins de Dan Marino y Jimmy Johnson. El Head Coach necesita un RB desequilibrante para su backfield para tener opciones al anillo y copiar la fórmula que estaba dando éxito a los Denver Broncos con Terrell Davis y John Elway. Ante la incapacidad de encontrar un RB vía draft Jimmy Johnson quiere a cualquier precio a Faulk.

Debemos tener en cuenta que entonces la realineación de la NFL no se había producido aún, Indianapolis Colts y Miami Dolphins compartían la AFC East. La máxima de los trades tiene entonces lugar, aunque tu rival divisional pueda ofrecerte mas por el jugador no lo aceptes y traspásalo a un equipo que aunque ofrezca menos no es un rival directo. De allí que Polian aceptara la oferta de los St..Louis Rams, un equipo mediocre hundido en la NFC West, y rechace la oferta de un contendiente y rival de división como eran los Miami Dolphins, que a saber donde podrían haber llegado de haber tenido al RB en sus filas. (Los Dolphins también intentaron hacer un trade por Barry Sanders).

Aunque desde entonces ha habido muchos trades y que pueden no cumplir la máxima que acabo de exponer, no reforzar a tu rival bajo ningún concepto, tenemos dos excepciones con los New England Patriots. Wes Welker se había un hueco en el roster de los Dolphins tras ser descartado por los San Diego Chargers, fue la única nota positiva en la calamitosa temporada del 1-15. Los Dolphins necesitaban elecciones de draft y traspasaron al pequeño WR a New England, rival divisional, los Dolphins seguramente no sabían al jugador que estaban traspasaban, Welker no había explotado, y por otro lado tenían tantas necesidades que el trade estuvo mas que justificado en aquel momento. El caso Randy Moss es muy diferente, llega desde Oakland, misma conferencia, diferente división, pero Randy Moss llevaba dos años de vacaciones en la Bahía y nadie podía creer que reharía su carrera como lo hizo.

Otro caso de trade anómalo fue el que acabó con Charles Haley en Dallas. Haley, que había ganado dos anillos en San Francisco, se marchó a reforzar a los Dallas Cowboys en 1992. Haley, un espíritu libre tenía problemas con su Head Coach George Seifert además de un enfrentamiento físico con Steve Young. Los 49ers no tenían mas opción que traspasarlo. Tampoco los Cowboys cuando se produjo el traspaso se pensaba que terminarían siendo el equipo que acabaría siendo, Haley terminó siendo la pieza que necesitaba Johnson para cimentar su defensa, de haberlo sabido los 49ers nunca lo hubieran traspasado, ambos equipos protagonizaron durante 3 años consecutivos la final de la NFC.

EL CASO BOLDIN

Volvemos al caso Boldin. El WR fue junto con Dennis Pitta el hombre clave en la explosión de Joe Flacco en la postemporada, el encargado de hacer las recepciones duras y difíciles con sus grandes manos, nunca fue un WR que se caracterizara por su velocidad, si por su dureza. Boldin en el camino hacia la Superbowl atrapaba cualquier pase que le lanzara Joe Flacco, sobre todo cuando lo tenía que buscar en las situaciones mas difíciles.

Una vez ganado el Vince Lombardi los Ravens se enfrentan a varias cuestiones relacionadas con la confección de la plantilla para la próxima temporada. La prioridad es renovar a Flacco, MVP de la Superbowl y el mejor jugador durante todos los playoffs. Finalmente llegaría la mas que polémica renovación, un contrato que si se cumple supondrá para el QB ganar 120,6 millones, lo que convertía al QB nominalmente en el mejor pagado de la liga. No vamos ahora a entrar en discusiones si el contrato se lo merece, si ha hipotecado financieramente o salarialmente a los Ravens, si el dinero destinado a Flacco supuso no poder renovar a otros jugadores y otras muchas cuestiones, para eso es necesario entender como funciona el Salary Cap, además de que es algo que en artículos anteriores he dejado mas que explicado.

Ozzie Newsome y sus ayudantes hacen su análisis y a su juicio Boldin no merece los 6 millones que tenía estipulados en su contrato para la temporada 2013. Newsome propone reducir el salario del WR en 2 millones de dólares y dejarlo en 4, algo a lo que el WR se opone radicalmente. En este caso el WR tenía la sartén por el mango, venía de hacer una gran temporada y sabe que si los Ravens hubieran decidido cortarlo en el mercado libre podía aspirar a una cantidad similar, quizás no sean los 6 millones que tenía inicialmente firmado, pero si mas de los 4 millones que los Ravens le ofrecían.

Entonces Newsome y John Harbaugh toman una decisión: nosotros no estamos dispuestos a mantener al jugador por 6 millones pero tampoco estamos dispuestos a dos cosas, una que quede como agente libre y sea libre de firmar donde quiera, y dos, traspasándolo se podía recibir algo a cambio. Harbaugh habla con su hermano Jim y cierran el traspaso a cambio de una modesta 6ª ronda. Entran en juego los que hemos dicho en juego, los intereses que siempre hay detrás de todo trade, que no siempre puede que se vean, como fue este caso.

Si los Ravens hubieran cortado a Anquan Boldin, como agente libre que quedaba podía haber firmado por cualquier equipo. Si hay dos equipos que la gerencia de los Ravens no quería ver al WR en su roster eran New England o Denver, equipos que seguramente podrían haber ofrecido un contrato mas que jugoso al WR, sobre todo New England si Welker acaba saliendo del equipo, como así fue. Tampoco se podía descartar Denver, un WR de las características es lo que le faltaba al ya potente ataque de Denver, de hecho Welker acabó firmando allí, pero quien sabe si Boldin hubiera podido ser el candidato de haber sido agente libre.

Antes que reforzar a un rival de tu propia conferencia, y además rival directo, los Ravens prefieren recibir una modesta 6ª ronda por el jugador y de paso mandarlo a los San Francisco, lejos tanto de New England o Denver. Con el jugador en otra conferencia desaparece el peligro de que pueda ser la diferencia, y de serlo que lo sea en un equipo que solamente te puedes encontrar en una hipotética Superbowl. Con ellos los Ravens cumplían dos objetivos, el principal y verdadero motivo del trade, evitar que quedando como agente libre reforzara a un rival directo, y el segundo, secundario, recibir una elección de draft.

Como todo trade nunca sabes si es bueno o malo hasta que ves el producto en el campo, otros trades en el pasado han resultado todo un fiasco, en otras un gran éxito, pero eso es para el equipo que recibe al jugador, para el que lo traspasa sus objetivos ya están conseguidos como hemos expuesto.

Lamentarse ahora tras lo sucedido en esta primera semana de competición que hubiera pasado si Boldin fuera parte de los Ravens es un debate a mi juicio absurdo. La gerencia de los Ravens, Newsome, había hecho su trabajo de evaluación, para ellos Anquan Boldin no valía 6 millones de dólares al año sino 4, cantidad que si ofrecieron al WR. Lo único que puede ser criticable es si esa evaluación se había hecho correctamente, pero hecho esa evaluación los Ravens hicieron lo único que podían hacer. Nadie puede afirmar que el Boldin que vimos el domingo machacar a los Packers hubiera sido el mismo Boldin que se hubiera enfrentado a los Broncos. Hay tantos factores que entran en juego que resulta imposible hacer valoraciones, por no hablar de la motivación del jugador que no sería nada extraño que en este primer partido fuera extra.

A toro pasado es muy fácil decir que este trade es un tremendo fiasco para los Ravens, pero como he dicho lo que es criticable en todo caso es la evaluación, no el trade, los Ravens consiguieron sus objetivos. Y si no hacerse una pregunta muy sencilla ¿Qué hubiera sucedido si Boldin es cortado termina en Denver y es parte del equipo que humilló a los campeones en el partido inaugural de la temporada? Entonces la presión sobre Newsome hubiera sido insoportable y muy justificada, sin embargo en San Francisco la cosa cambia mucho, es un equipo que a los Ravens solo les puede preocupar en una Superbowl.

La mejor prueba de lo contrario es Elvis Dummervil. Tras su polémica salida de Denver y aterrizaje en Baltimore, la casualidad quiso que su primer partido fuera contra su ex equipo. Dummervil no estuvo mal, pero tampoco estuvo brillante, si hubiera machacado a Peyton Manning y hubiera sido la diferencia en el partido, John Elway hubiera tenido que dar muchas explicaciones.

• No, de momento no me voy a extender en hablar del sistema ofensivo de Chip Kelly que dejó boquiabierto a casi todos tras la primera parte en Washington, sobre todo a los Redskins, que fueron totalmente incapaces de ofrecer una sola fórmula para parar el vendaval ofensivo de Michael Vick y cía. Tiempo y mas partidos habrá para analizar si el sistema y las ideas de Chip Kelly triunfan en la NFL, pero lo que he visto hasta el momento solo confirman lo que adelanté en mi columna previa al inicio de la temporada, con los Eagles nos vamos a divertir, y no lo digo por el uso de los carteles que usaron los coordinadores defensivos, sino porque Kelly pretende revolucionar la NFL.
• En todo caso cuando se habla de snaps también habría que hablar de productividad, no necesariamente ejecutar mas número de jugadas equivale a algo, sirvan de ejemplo los Jacksonville Jaguars. Los de Gus Bradley ejecutaron un total de 70 snaps el pasado domingo ante los Kansas City Chiefs, 7 menos que los Philadelphia Eagles y lejos de los 89 de los New England Patriots. Sin embargo los Jaguars se las apañaron para acumular la friolera de 2 puntos en todo el partido, puntos que además llegaron en un safety cuando bloqueron un punt de los Kansas City, de no haber sido por eso se hubieran quedado completamente en blanco. Póngase ese dato en comparación con los Eagles, ellos ejecutaron un total de 77 snaps y anotaron 33 puntos, los Patriots 89 snaps para 21 puntos y los Jaguars, bueno, son los Jaguars, en 70 snaps no anotaron una sola vez, o dicho en castellano, productividad cero.
• Los Kansas City Chiefs no pudieron empezar mejor su nueva etapa bajo la batuta de Andy Reid, con victoria, con una “W”, en una sola semana ya han conseguido un 50% de lo conseguido el año pasado. Lo fácil será decir que es una victoria que no debería contar, pero en la NFL una “W” es una “W” se mire como se mire. Qué se lo digan a Atlanta, que muchos despreciaron su record de victorias y casi se plantan en la Superbowl. La victoria es un bálsamo para muchos jugadores de los Chiefs que vivieron la bajada a los infiernos que supuso la temporada pasada, también es un bálsamo para el criticado y controvertido QB Alex Smith, muy correcto y que bajo el protectorado de Andy Reid puede tener un gran año, al igual que Jamaal Charles. Creo que hace tiempo que el orondo Head Coach no trabajaba con tanto talento a su disposición, y sobre todo sin una prensa tan cainita como la de Philadelphia.

  

• Pese a todos los buenos augurios del ataque y las mejoras en defensa, los Cleveland Browns fueron una vez mas incapaces de ganar en el partido de apertura de su rebautizado estadio, First Energy Stadium. Acumulan un récord de 1-14 desde que hace 15 años regresaran resucitados a la NFL. El partido contra Miami siendo generosos lo podríamos calificar de malo, ambos equipos estuvieron muy erráticos en ataque aunque la palma se la llevó Brandon Weeden, que tras ganarse la titularidad en la pretemporada lanzó 3 intercepciones, 2 de ellas al ex – Brown Dimitri Patterson. Ryan Tannehill terminó con mejores números y lanzó un TD impresionante y precioso a Brian Hartline, que tiene todos los boletos para ser el auténtico protagonista del ataque de los Dolphins esta temporada. Mike Wallace, que durante la semana se dedicó a soltar bravuconadas contra la defensa de los Browns, especialmente contra Joe Haden, tuvo una actuación “discreta”, no se le vio en todo el partido. Lo que sí se hizo es hacerse notar, en declaraciones posteriores despotricó contra el «playcalling» de Joe Philbin al no contar con él, de la victoria, lo realmente importante, no se sabe si habló el lenguaraz WR.
• Desde que Jerry Jones abriera su estadio y/o parque de atracciones se resistió a poner nombre a su juguete. Jones, mas chulo que un ocho, no quería nada de un estadio con nombre de una famosa marca de pantalones vaqueros, de entidad financiera o compañía de seguros, sino directamente Cowboys Stadium. Al final ha sucumbido a la llamada del billete verde y su campo llevará los próximos años el nombre del gigante de las telecomunicaciones AT&T, el mismo que utilizan los dobles campeones de la liga de baseball San Francisco Giants para su estadio, quizás a la vista de los éxitos de aquellos ha decidido aceptarlo llamarlo igual forma. Desde luego los resultados no se han hecho esperar, los NY Giants en sus cuatro visitas al Cowboys Stadium se habían llevado otras tantas victorias, en su primera visita al AT&T Stadium se van con su primera derrota, primer síntoma de posible cambio de acontecimientos. Giants y Cowboys jugaron un partido con tintes de surrealismo, los Giants cometieron hasta 6 turnovers, 3 de ellas intercepciones a Eli Manning, sin embargo nunca le perdieron la cara al partido gracias a la conexión entre el QB y el salsero Victor Cruz, que justificó cada dólar de su nuevo contrato. Tony Romo, que tuvo que abandonar el partido momentáneamente tras un golpe en las costillas, estuvo a muy buen nivel y por primera vez en mucho tiempo gozó de la protección de su OL.
• Mike Wallace decidió abandonar Pittsburgh en busca de la pradera mas verde y vaya si lo notaron los Steelers. Aunque puede que el WR decidiera abandonar la ciudad del acero porque se veía venir lo que se pudo ver el pasado domingo, los Steelers son una franquicia en descomposición, o mas que en ese estado es un una franquicia que debe renovarse para volver a sus orígenes. Los Steelers me recuerdan a esas tiendas de toda la vida que hay en todas las grandes ciudades donde aún te atiende un dependiente con bata y te cobra una cajera con uniforme, tarde o temprano comerciantes mas ágiles y que usan nuevas tecnologías te obligan a cambiar o cerrar el negocio. No estoy diciendo que los Steelers se tengan que convertir ahora en un equipo a la Green Bay o New Orleans, modelos de “pass happy offense”, pero es un equipo envejecido y donde parece que hace siglos no se renuevan las trincheras y que han apostado de manera descarada por su QB, al que nadie le niega su liderazgo y ser ahora el referente del equipo, pero si algo ha hecho famoso a los Steelers es lo que siempre fue su identidad: humildad, trabajo, defensa y juego terrestre. Yo no veo nada de eso en los actuales Steelers y tras el desastroso inicio en forma de lesiones, no me extrañaría nada verlos elegir en el Top 5 en el próximo draft, aunque ya lo veía antes de las lesiones les castigaran como el pasado domingo.
• Seattle lo pasó realmente mal en Carolina, un feudo donde va a ser difícil ganar este año. Los Seahawks estuvieron muy lejos de aquel ataque que promediaba mas de treinta puntos por partido en el tramo final de temporada, pero puede que no lo necesiten si su defensa es la que le saca las castañas del fuego. Los Seahawks dejaron en solamente en 7 puntos a los Panthers de Cam Newton, pero mas importante aún, las estadísticas ofensivas de los de Carolina fueron muy pobres, 253 yardas totales de ataque dejando a Cam Newton con solamente 125 yardas aéreas.
• Durante todo el verano hemos estado leyendo toda clase de artículos y disquisiciones sobre la “Read Option”. Entre ellas supimos que Dom Capers y todos sus coordinadores estuvieron tomando lecciones en un college sobre como pararla tras ser destrozados en el pasado playoff divisional por los San Francisco 49ers cuando les endosaron mas de 300 yardas terrestres con un Colin Kaepernick imparable. Enseguida pudimos ver que sí, que los Packers si habían estudiado como parar la read option, pero fue tal el empeño que pusieron en ello que se olvidaron por completo de defender el juego aéreo, especialmente un Anquan Boldin libre toda la tarde, San Francisco no desaprovechó el regalo. Colin Kaepernick esta vez destrozó a la defensa de Green Bay por el aíre acumulando mas de 400 yardas, algo que en San Francisco no se veía desde que Tim Rathay era el QB en la Bahia. En todo caso lo que resulta mas preocupante es que Mike McCarthy sigue ignorando el juego terrestre pese a la adquisición en el draft de Eddy Lacy, los Packers ya acumulan 44 partidos sin un RB que alcance las 100 yardas terrestres.
• Larry Fitzgerald volverá a ser un hombre feliz con Carson Palmer de QB, y sobre todo los propietarios del jugador en las ligas Fantasy ,Palmer no está para muchos trotes, es una estatua en el pocket, pero el brazo sigue estando allí y con todas sus limitaciones es el mejor QB que ha tenido el pobre de  Fitzgerald desde los tiempos de Kurt Warner. Lo que ya no podemos asegurar es si la mejoría en los números del WR van a verse reflejados en el record del equipo aunque estuvieron cerca de llevarse la victoria en St. Louis. Al final Sam Bradford pudo remontar y este año cuenta con un arma peligrosísima como es Jared Cook, un TE que es todo talento y que regresa con su mentor, Jeff Fisher.

  

• El año pasado hasta 5 QB rookies se estrenaban en la primera semana de la NFL, este año, en un draft que solo vio salir elegido en primera ronda a un QB salir se estrenaban solamente dos, el mencionado E.J. Manuel en Buffalo y Geno Smith en los Jets. No era ningún secreto que desde la nueva gerencia se quería ver en acción cuanto antes a Smith y muy probablemente la decisión de Rex Ryan de sacar a Mark Sánchez en el 4º cuarto de un partido de pretemporada que acabó con el QB lesionado no haga otra cosa que precipitar los acontecimientos, Smith ha comenzado como titular y tras su primer partido nada indica que vaya a perder el puesto salvo por lesión. Esto puede significar el fin de la era de Sánchez en la Gran Manzana, de hecho si sigue en el equipo es porque al equipo le cuesta lo mismo echarlo que tenerlo en plantilla, aunque esperar un trade por el QB se antoja imposible con el absurdo contrato que la antigua gerencia le firmó.
• Atlanta Falcons y New Orleans ofrecieron un partido muy intenso y con alternativas en el marcador. Los Saints han recuperado a Sean Payton y su presencia se dejó notar en el primer partido, se pudo ver a unos Saints mas organizados y muy lejos del equipo totalmente anárquico que pudimos ver el año pasado. Pero donde sobre todo se vieron mejoras notables fue en defensa, empeorar era imposible, los Saints fueron la temporada pasada la peor defensa de la casi centenaria historia de la liga. La unidad de Rob Ryan se mostró tremendamente agresiva, sobre todo en el último cuarto donde le hicieron la vida muy difícil a Matt Ryan, que una vez mas tuvo el partido en sus manos pero no pudo al final conectar con ese seguro de vida que es Tony Gonzalez. Kenny Vaccaro, el safety elegido en el draft en primera ronda, tuvo una fea primera acción cuando fue penalizado con 15 yardas, pero en el snap final puso la mano y desvió lo suficiente un pase que iba a las segurísimas manos del TE.
• Los Oakland Raiders pese a la limpieza salarial y de jugadores que Reggie Mackenzie ha llevado a cabo para eliminar todo vestigio de la era Al Davis, aun mantienen algún jugador que no sea Darren McFadden o Sebastian Janikowski en el roster, Terelle Pryor, elegido en un draft suplementario por el fallecido propietario. Pryor, llamado a ser suplente de Matt Flynn, le acabó arrebantando la titularidad y el pasado domingo demostró los motivos, el jugador fue lo mejor y con diferencia de los Raiders, corrió para mas de 100 yardas y paso para mas de 200. Su costosa intercepción seguramente les costó el partido, pero Oakland dejo la sensación de que pese a ser el equipo mas barato de la liga, es el que menos espacio salarial tiene, es un equipo que no se va a rendir ni dejar ganar fácilmente.
• En esta primera semana sería difícil nombrar el mejor jugador ofensivo tras las exhibiciones de Colin Kaepernick, Anquan Boldin, LeSean McCoy o Peyton Manning. Sin embargo Reggie Bush puede que haya sido el mejor de todos ellos, la diferencia en el backfield de Detroit se notó desde el primer momento y ahora sabemos una cosa, Matthew Stafford ya no solo depende de Megatron, ahora tiene una segunda amenaza para las defensas rivales. Lo que no cambia en Detroit es Ndamukong Suh que protagonizó una lamentable acción que le costara 100.000 $, y estamos en la primera semana.
• New England puede sentirse afortunada de haber salido con una victoria en Buffalo. Al final se tuvo que conformar con una pírrica victoria gracias a un FG en los segundos finales tras desperdiciar Buffalo un drive para haberse podido llevar el partido si Stevie Johnson respaldara sus palabras con sus acciones.