Hace unos años, en concreto en el año 2004 a cuento de un enfrentamiento entre los Green Bay Packers de Brett Favre y los Indianapolis Colts de Peyton Manning escribí un artículo sobre ambos QB en este mismo espacio. Ambos QB solo se podían enfrentar cada 4 años en la temporada regular salvo que hubiera una Superbowl de por medio. Aquel día ambos jugadores protagonizaron un duelo épico, Brett Favre lanzó para 360 yardas y 4 pases de TD, Peyton Manning se fue hasta las 393 yardas y 5 TD, todos ellos en la primera parte.
Con los Indianapolis Colts 18 puntos arriba Brett Favre quiso añadir aquella tarde otra muesca mas a su legendaria fama de QB con capacidad para remontar partidos. Faltando poco mas de dos minutos estaba en disposición de poder hacerlo, estaba recorriendo el campo del derruido RCA Dome cuando un pase completado al WR Javon Walker le fue arrebato a éste último por el CB Nick Harper, que lo retornó hasta la yarda 36. En la siguiente posesión el RB Edgerrin James anotaba un TD y sellaba la victoria de los Colts, 45 a 31. En el primer cuarto, en el espacio de 11 minutos vimos 5 TD, tres de Peyton y 2 de Favre, entonces aquel partido parecía que podía terminar con un marcador de baloncesto mas que de football, ambos equipos se caracterizaban por lo mismo, ataques potentísimos y defensas muy sospechosas (algo parecido a muchos equipos actuales).
Los 2 QB representaban en aquel momento el presente de la NFL, pero también el pasado y el futuro. Brett Favre para entonces ya tenía sus 3 MVP, 2 presencias en la Superbowl y un anillo, Peyton acababa de ganar la temporada pasada su primer MVP e iba camino del segundo. No se volverían a ver las caras nunca mas en un campo, en el año 2008, cuando los Colts viajaron a Lambeau Field el QB de los Packers era Aaron Rodgers, Brett Favre jugó aquel año en los New York Jets. Casi se vuelven a ver en 2009 en la Superbowl, los Minnesota Vikings de Brett Favre estuvieron a un FG de llegar a la gran final, pero acabarían perdiendo en la prórroga ante los New Orleans Saints. En todo caso no podemos decir con certeza si Brett Favre hubiera podido jugar aquella Superbowl, aquella final de la NFC fue en la que los defensas de los Saints cazaron a Brett Favre, que jugó el partido con el tobillo completamente roto.
Aquel artículo del año 2004 estaba dedicado a Brett Favre. Favre era un QB muy diferente al que era Peyton en aquel entonces. Brett Favre era aquel tipo con el que te podías ir de fiesta y tomarte unas cervezas, siempre tuvo fama de juerguista, un tipo corriente que disfrutaba jugando al football y con mentalidad de pistolero. Peyton era todo lo contrario, metódico, disciplinado, todo siempre bajo control y procesando cada dato, un tipo que parecía que no había bebido una gota de alcohol en su vida y que vivía para el football las 24 horas del día los 7 días de la semana. Recuerdo que calificaba a Brett Favre entonces del Jerry West de la NFL y a Peyton Manning del Terminator, uno era el humano, el cercano, el próximo, el otro era frío, implacable, un auténtico robot.
Han pasado 9 años desde entonces, Brett Favre se retiró en 2010 y actualmente entrena a un equipo de High School con el que acaba de proclamarse campeón. Su aspecto es mas el de un “homeless” que el de un QB que lo ha sido absolutamente todo en la NFL. Fue noticia hace no tanto porque se supo que los St. Loius Rams habían contactado con él para conocer su disponibilidad para regresar a un terreno de juego, pero fuera aparte de eso Brett Favre lleva una vida tranquila y bastante alejada de la NFL. Seguramente la próxima vez que lo veamos con la NFL sea el día que lo elijan para el Hall of Fame, hasta entonces prefiere llevar su retiro con absoluta discreción.
Peyton Manning por el contrario sigue en activo, ha ganado desde aquel partido el mismo número de MVP que Brett Favre en toda su carrera. Al igual que él ha jugado 2 Superbowls con el mismo resultado, victoria y derrota. Todo apunta que Peyton Manning se anotará su quinto MVP esta temporada, ha pulverizado todos los records a niveles estadísticos, el único record que le queda es el de mas yardas en una sola temporada que podría perfectamente ser suyo al final de temporada. Como Peyton deberá jugar la última jornada de esta temporada para poder asegurarse el Seed nº 1 de la AFC, un día en la oficina para el QB supondrá también batir ese récord y dejar el de TD mas cerca de los 55 que de los 51 actuales.
Pero aquel Peyton del año 2004 nada tiene que ver con el actual Peyton del 2013. Y ojo, esto es una apreciación personal, no quiero sentar cátedra ni pretendo que nadie me dé la razón, simplemente creo que el Peyton que conocíamos en el año 2004 no tiene absolutamente nada que ver con el Peyton que conocemos en el 2013. El Peyton Manning actual está mucho mas cerca de parecerse al Brett Favre del que hablaba entonces, si no fuera la figura mediática que es incluso se podría decir que es cercano y cálido, nada que ver con aquella figura robótica e implacable que entonces empezaba a ser.
Muchas cosas han cambiado desde entonces, sobre todo a raíz de su operación, que casi lo deja inválido para jugar al football. Antes de someterse a la operación ya tenía serias dudas sobre si volvería a jugar, tenía asumido que muy probablemente debería retirarse, ni un médico le garantizó que podría volver a jugar. Tras la operación fue consciente por primera vez que quizás su carrera había llegado a su fin, era totalmente incapaz de lanzar un solo pase a una distancia de 10 yardas y no sentía en absoluto nada en su brazo. El punto culminante fue durante un campamento que suele organizar la familia Manning, un chico le pidió que le lanzara un pase, Peyton tuvo que decirle que no podía, que ese día su hermano Eli Manning le lanzaría pases. Durante la rehabilitación con su entrenador de sus tiempos en Tennessee David Cutcliffe en mas de una ocasión se planteó el dejarlo, tuvo que empezar de cero y ahora hace algo que no hacía tanto antes, usar los pies para lanzar con mas fuerza, todo eso lo tuvo que aprender de cero.
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Pero también se han ido conociendo muchas cosas del que era hasta entonces un jugador hermético, detalles de su vida fuera de un terreno de juego y como regresó de una lesión que para muchos jugadores, especialmente QB, hubiese supuesto el final de sus carreras. Los primeros que nunca pensaron que serviría para jugar al football de nuevo fueron los propios Indianapolis Colts, equipo al que se ofreció seguir vinculado tras ser cortado y despedido. Peyton no quería ser ese QB que ha jugado toda su carrera en un equipo y que aún cree le queda recorrido en otros equipos, estaba dispuesto a colaborar con el equipo en el desarrollo de Andrew Luck. Pero Jim Irsay había tomado la decisión de prescindir del QB, en la rueda de prensa de despedida en Indianapolis Peyton calificó al propietario de «amigo», aunque es mas que sabido que no era así. De hecho como luego veremos no fue de Jim Irsay de la última persona de quien se despidió cuando abandonó de forma definitiva Indianapolis.
Peyton Manning no solo es un gran QB, sino que se llevará consigo el libro de los récords cuando se retire, aunque esto mismo se dijo sobre Dan Marino cuando él se retiró y en un lustro todas sus marcas quedarán perdidas. Peyton poco después de batir el record, dijo que su marca también se superara el año que viene por Tom Brady, pero que sin embargo la marca de Dan Marino duro 20 años. Peyton siempre ha demostrado un tremendo respeto por aquello que jugaron antes que él.
Pero hoy no quiero hablar solamente de las marcas deportivas de Peyton, no he venido a contar si lanzó 7 TD en tal día o como remontó por enésima vez. Tampoco he venido a contar si juega mejor o peor cuando hace mucho frío o si su brazo no es el mismo que antes de la operación, son todos debates estériles que palidecen ante los números que acumula Peyton Manning esta temporada. Hoy quiero contar cosas de Peyton que lo hacen mucho mas especial de lo que realmente es y que seguramente estén por encima de su figura deportiva.
Peyton Manning ha sido recientemente nombrado “Sportsman of the year” por la revista Sports Illustrated, un premio que sé que para muchos es irrelevante (es un premio que va por la edición número 60) y uno mas para el largo palmarés del QB. Sin embargo si uno lleva años leyendo esta revista sabe que ese premio es algo mas que solo un premio a los méritos deportivos, suele ser la oportunidad para conocer otras muchas parcelas de un deportista. A mi personalmente me parece el premio del deporte mas importante, aunque peca de ser bastante chauvinista, se concede a deportistas americanos pese a que la revista tiene carácter internacional y cubre todos los deportes que uno pueda imaginar. Este año sonaron nombres como Rafael Nadal, pero finalmente se lo acabaron concediendo a uno de los suyos.
THE BOOK OF MANNING
Ello me ha servido para conocer detalles de Peyton que desconocía por completo. No hace mucho la ESPN emitió un documental en la magnifica serie 30 for 30 sobre la familia Manning, la familia mas importante en la historia de la NFL. En el documental se conocían muchas cosas sobre los hermanos, pero tras la publicación de la revista se han dado a conocer otros muchos que me hacen descubrirme no solo ante un jugador excepcional y único, sino ante una persona también excepcional. El problema que tenemos muchos sobre los jugadores es precisamente ese, los vemos desde lejos, nos parecen prepotentes, soberbios, que dependiendo de su status están por encima incluso de la franquicia que les paga, y sobre todo por encima de los entrenadores. Esa impresión nos ha dejado Peyton cantidad de veces, que él manda por encima de todo y su equipo hace lo que él decide se debe hacer, que cambia las jugadas y tiene su propio playbook.
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Nada mas lejos de eso, Peyton Manning es un trabajador implacable e incansable, sus entrenadores quedan tan impresionados por su capacidad de trabajo y de absorber el playbook que no les queda otra que cederle el mando de las operaciones. Manning ha visto tanto football, sabe tanto de las reacciones de las defensas rivales, que incluso es capaz de superar a sus propios coordinadores en capacidad de saber qué hacer en cada momento. El primer día que llegó a Indianapolis tras ser fichado por los Colts lo llevaron a entrenar y le dijeron que se pusiera al lado de Kelly Holcomb, entonces QB de los Colts, duró un snap y desde entonces no se ha perdido un solo entrenamiento, aunque ahora en Denver deja que sus suplentes terminen los entrenamientos dirigiendo las sesiones. A las semanas de llegar a Indianapolis transformó la sala de los QB en una sala de video donde ver hasta los entrenamientos, la obsesión de Peyton por estudiar videos le llevó a grabar sus propios entrenamientos para corregir errores.
Tom Moore, el que fue su coordinador ofensivo en Indianapolis, contaba que cuando en los primeros entrenamientos del QB practicaban la no huddle empezó a experimentar con Peyton jugadas. Al principio le cantaba solamente dos jugadas y dejaba que eligiera la que mejor se ajustaba. Mas tarde le empezó a pasar hasta 4 jugadas, poco después Peyton Manning ya no necesitaba siquiera que le cantaran las jugadas, el mismo ya sabía lo que tenía que hacer en cada momento y era su propio coordinador ofensivo. De él dicen que ha visto tanta películas, tantos vídeos, conoce tan bien a sus rivales, que siempre sabe lo que no hará un defensa, saber lo que hará es imposible. Cuando Peyton lee las defensas procesa esa información y en cuestión de unos segundos dicta la jugada.
Pero a pesar de lo anterior Peyton Manning siempre ha tenido un respeto tremendo por sus entrenadores, algo que le enseño su padre siendo un niño, como otras muchas cosas de la figura de Peyton, solo son posibles entenderlas si uno se remonta a su pasado y la educación que ha recibido. Siendo un niño estaba jugando en el equipo de baloncesto de su colegio, el entrenador tenía una costumbre, dejar que todos los niños pudieran jugar a pesar de que eso le suponía perder partidos. El entrenador les dijo al final de un partido que habían perdido porque no estaban preparados. Peyton dijo que no, que habían perdido porque no había puesto a los mejores a jugar. Cuando Archie Manning se enteró de aquello lo primero que hizo es abroncarlo y le obligó a ir donde el entrenador y entre sollozos Peyton le pidió disculpas a su Head Coach. Nunca mas Peyton se ha vuelto en toda su carrera contra un entrenador.
Otra cosa que le enseño su padre es que un equipo había que tratar especialmente bien además de a los entrenadores a los encargados de equipamiento. Peyton esto lo ha llevado a extremos que dudo que nadie mas haya podido hacer. En su primera visita a los Indianapolis Colts, antes de ser siquiera elegido, cuando abandonaba el recinto se dirigió al encargado de equipamiento y le dijo que estaba encantado de haberlo conocido. Poco después, siendo Peyton ya el QB del equipo, empezó una amistad con los encargados que aún perdura. Cuentan que Peyton les ha lanzado mas pases a ellos que al propio Marvin Harrison o Reggie Wayne.
El día que Peyton Manning abandona Indianapolis, tras la famosa rueda de prensa donde llorando anunció su salida de los Colts, lo último que hizo aquel día fue reunirse con los encargados de equipamiento y pedirles que le llevaran al aeropuerto. Nada de limusinas, nada de coches de lujo, con el coche particular, un Toyota Sequoia, de uno de los encargados de mantenimiento con Peyton sentado en el asiento de detrás se fueron los cuatro hacia el aeropuerto de Inadianapolis. Fue de las últimas personas de las que se despidió tras 14 años en Indianapolis, no de Jim Irsay, su propietario, ni de su ex GM Bill Polian o su hijo, ni tan siquiera de los que fueron sus compañeros, las últimas personas de las que se despidió Peyton fue de los encargados de equipamiento. ¿Eso lo hace alguien soberbio y distante? Imposible, y Peyton mantiene contacto con ellos de forma habitual, al menos cada cierto tiempo les llama por teléfono y mantiene con ellos charlas.
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En Denver, al poco de llegar pidió a dos periodistas de la prensa local y que cubren la actualidad de los Broncos que iba a necesitar de su ayuda. Ellos son los encargados de filtrar todo el correo que recibe Peyton Manning, mas de 300 cartas semanales, que luego Peyton estudia y decide a quien debe responder o no. Se lleva el trabajo a casa y todas las noches, con la compañía de su esposa, redacta de su puño y letra cartas que dirige personalmente. Porque esa es otra costumbre que tiene Peyton desde hace años, mantener correspondencia de forma habitual con todas las personas que se han cruzado en su vida, jugadores que han estado con él y en general con cientos de personas. No hay una sola persona que se haya cruzado en toda su vida que hable mal del QB, todos alaban su capacidad de trabajo y todos dicen lo que han mejorado gracias a él.
Muchos de los jugadores que han trabajado con él siempre dicen que Peyton es tan exigente consigo mismo que tarde o temprano tienes que serlo contigo mismo para poder jugar con él. Me he cansado de leer que si tal QB hace mejores a los jugadores que lo rodean o como la carrera de Peyton tiene los números que tiene porque a su alrededor ha tenido jugadores como Marvin Harrison o Reggie Wayne. En Denver cuando llegó estaba Eric Decker, un WR que tampoco hasta entonces había tenido una carrera brillante, y DeMaryius Thomas, un WR con un talento enorme pero que lo mostraba con cuenta gotas. Tras la llegada de Peyton Manning ambos WR están entre los mejores en su posición. Eric Decker está protagonizando la temporada de su vida y su renovación promete ser uno de los culebrones de la temporada. DeMaryius Thomas ha explotado, pero juntó a él hemos descubierto a Julius Thomas, un TE del que sabíamos muy poco. Sobra decir que Wes Welker, tras años brillando con Tom Brady, también brilla con Peyton Manning. Todos ellos no dudan en reconocer que son mucho mejores jugadores gracias a Peyton, un tipo que les ha obligado a ser mejores para poder ponerse a su misma altura y nivel de exigencia.
No sé de cuanto tiempo mas vamos a poder disfrutar de Peyton Manning, creo que si gana esta temporada la Superbowl anunciará su retirada, qué mejor manera de irse que habiendo pulverizado todos los records y quitarse el sambenito de que no funciona en los playoffs. Lo que sí tengo claro es que no voy a renunciar a seguir viendo cada partido de un jugador excepcional, un jugador que quizás nunca mas tengamos oportunidad de ver, uno de esos jugadores que solo salen cada 20 años. El día que Peyton diga, hasta aquí hemos llegado, ese día todos los que tanto le criticaron en su día, todos los que han hablado de sus limitaciones físicas, de su record en los playoffs, se darán cuenta que han visto jugar a un jugador excepcional, diferente, una leyenda, y empezaron a echarlo de menos. Y mas cuando uno ve a las nuevas generaciones de QB que salen de college, tardaremos años en poder ver alguien siquiera similar a Peyton Manning, Andrew Luck siendo un gran jugador está a años luz de donde estaba Peyton en su segundo año de carrera y nunca va a estar al mismo nivel que Peyton.
Cuando al padre del juego de pase, Sid Gillman, le preguntaron con que QB te quedarías entre Peyton Manning y Ryan Leaf no lo dudó ni medio segundo, Peyton Manning. Cuando Peyton Manning asistió al simposio para novatos en su primer año en la Universidad de Tennessee les pidieron a todos que tomaran notas de lo que allí se decía. Cuando el encargado de aquello, Carmen Tegano, recogió el cuaderno de Peyton Manning vio que había tomado 30 hojas de apuntes. Esa misma noche le dijo a su esposa, “Si Dios quiere y vivo lo suficiente, quiero trabajar para ese crío o votarle”.
Y termino, muchos son los que creen que el día que Peyton se retire se dedicará a entrenar o ser analista para la cadena ESPN u otras. Yo creo que no hará ninguna de las dos cosas, como entrenador no le veo futuro por una sencilla razón, ya lo ha sido en toda su carrera y no tiene ninguna necesidad de serlo una vez que termine. Como analista tampoco, Peyton ha visto tanto football, el mismo dice que ha visto football suficiente para haber hecho dos carreras, que el día que lo deje le veo mas disfrutando de todas esas cosas que he explicado y de su familia.
AUDIBLES
- A falta de una sola jornada para cerrar la temporada regular en la AFC están clasificados 5 equipos para la postemporada, los 4 campeones de división: New England, Indianapolis, Cincinnati y Denver, además de los Kansas City Chiefs como equipo de Wildcard. Pero queda por determinar que lugar ocupará como cabezas de serie, los Broncos tienen asegurado al menos ser segundos de la AFC, pero deberán ganar el domingo en Oakland para poder jugar todos los playoffs en Denver. Quien puede ser el segundo equipo que acompaña a Denver es toda una lotería, New England parte como favorito, pero los Bengals aún guardan opciones y si quieren asegurarse el puesto número 3, lo que significa no tener que viajar hasta Denver hasta una hipotética final deberán ganar el domingo. También ser el número 3 significa recibir al equipo que acabe con la segunda y última plaza de Wildcard de la AFC, y dado el nivel de los equipos que optan a ella es siempre una mejor opción que ser 4º y recibir a los Kansas City Chiefs.
- En la AFC hay cuatro equipos que optan a esa última plaza para la post temporada y ninguno depende de si mismo, no recuerdo nunca que se diera una situación igual. Baltimore, Miami, San Diego y Pittsburgh tienen todos opciones y aunque todos hicieran lo correcto, ganar su partido, las combinaciones son tantas que puedes quedar eliminado. Los que mas opciones tienen en principio son Baltimore y Miami, si los primeros ganan y los de Florida pierden, se clasifican los Ravens; y al revés ocurre exactamente igual, si ganan los Dolphins y pierden los Ravens, los de Miami regresarían a la post temporada. Si ambos equipos ganan los Ravens serían los clasificados, salvo que gane San Diego, entonces se produciría un triple empate entre Baltimore, Miami y San Diego que abre las puertas de la post temporada a los Dolphins. Los de San Diego necesitan que pierdan tanto Miami como Baltimore para tener alguna posibilidad. Y por último, si Baltimore, Miami y San Diego perdieran todos ellos y los Steelers ganaran serían ellos los que pasarían a la post temporada, una auténtica carambola, pero en la AFC todo es posible tratándose de estos cuatro equipos.
- En la NFC hay tres clasificados para los playoffs, Seattle, San Francisco y Carolina, pero todo el resto está por decidir, incluso ser cabeza de serie. Seattle y Carolina dependen de si mismos, si ganan sus partidos acabarán con los Seed nº 1 y 2 y pasarían a la ronda de divisionales. Tras ellos luchan por llegar New Orleans, Dallas, Philadelphia, Chicago, Green Bay y Arizona, este último el único que no depende de si mismo. El resto con ganar su partido están en post temporada y como premio anticipado tendremos dos partidos de playoffs, en la NFC East Dallas y Philadelphia se juegan la división y pasar como campeón. Lo mismo ocurre en la NFC North, Chicago y Green Bay se juegan a un solo partido entrar en la post temporada. En todo caso ambos partidos van a estar marcados por los QB, o mas que por ellos por su presencia o ausencia. Ahora mismo no sabemos si Tony Romo podrá jugar tras sufrir una lesión en la espalda que le obligará a pasar por quirófano, se rumorea que podría ser incluso infiltrado para el partido. En parecida situación están en Green Bay, hasta el jueves no se sabrá si podrán contar con Aaron Rodgers.
- Un QB que va a tener que dar muchas explicaciones esta post temporada es Matthew Stafford tras un final de temporada lamentable. Nadie duda de las cualidades físicas del QB, tiene uno de los brazos mas potentes de toda la liga aunque ejecute en demasiadas ocasiones lanzamientos muy poco ortodoxos, pero mentalmente está hace tiempo muy cuestionado. Tras protagonizar el drive de la remontada ante los Dallas Cowboys parecía que Matthew Stafford había por fin madurado, parecía ese QB que los Lions eligieron hace 5 años para ser el pilar de la franquicia. Los últimos 6 partidos han sido siendo muy generosos lamentables, con un porcentaje de conversión que duras penas supera el 50%. Es cierto que sus receptores han protagonizado algunos drops clamorosos, pero eso no justifica las malas decisiones y lanzamientos incomprensibles, lo que da la razón a todos aquellos que dicen que la única jugadas que sabe hacer es lanzar pases a Calvin Johnson. Pero con todo eso no es lo mas preocupante, sino demostrar un pasotismo total, como si no le importara nada de lo que sucediera tras firmar en verano una renovación de contrato que ahora mismo nadie puede justificar.
- Otro QB que también está muy cuestionado es Joe Flacco. Si los Ravens no terminan por pasar a la post temporada, sería la primera vez desde que el QB y John Harbaugh están en la franquicia, puede que Joe Flacco tenga que dar también muchas explicaciones. La temporada del ex de Delaware es la peor desde que aterrizó en la liga, ni en su primera temporada como rookie ha tenido un año tan malo, año que además coincidió con la renovación de su contrato. El contrato de Flacco no es mas que un producto de la burbuja salarial de los contratos de los QB, un problema que ya empieza a ponerse de manifiesto en la liga y que ya en el pasado hablamos de ello (Joe Flacco hubiera sacado un contrato igual o similar de los Cleveland Browns). Tampoco le ha ayudado mucho al QB el nefasto playcalling que esta temporada ha instalado Jim Caldwell con el consentimiento de su Head Coach John Harbaugh, qué al final es el máximo responsable. Aun en el caso de que los Ravens pasaran a la post temporada, si juegan muchos partidos como el que jugaron contra los Patriots el pasado domingo, su aventura en la post temporada no parece que pueda tener mucho recorrido.
- Los Dolphins y el mal tiempo no suelen ser una buena combinación, un equipo que acostumbra a entrenar y jugar a temperaturas superiores a los 25º suele sufrir cuando le toca viajar al norte, sobre todo en dos de sus teatros de los horrores mas habituales, Buffalo y New England. Tras el partido de Pittsburgh este equipo que ha montado Joe Philbin sí parecía que podía ganar con el termómetro rozando los 0º, pero tras la “exhibición” de Buffalo nuevamente hay que cuestionarse la capacidad de este equipo para jugar en el mes de diciembre en el norte, un mal que afecta a esta franquicia desde los tiempos de Dan Marino. El huevo que plantaron los Dolphins en Buffalo no tiene ninguna explicación, o sí, no habían preparado el partido. Buffalo tuvo que tirar de nuevo de su QB suplente Tadd Lewis, un jugador que si se retirara hoy mismo tendría un record perfecto contra los Miami Dolphins. La DL de Buffalo le tiene tomada la medida a la OL de Miami, seis sacks se tuvo que comer el bueno de Ryan Tannehill, el único que demostró algo el pasado domingo, otros QB tras retirarse momentáneamente por lesión no hubieran regresado al terreno, él sin embargo sí lo hizo. El otro destacado fue el punter Brandon Fields, pero ya sabemos aquello de que algo no funciona en un equipo cuando tu mejor jugador es tu punter.
- Aunque a efectos estadísticos puede que esta temporada 2013 no acabe siendo la peor de todas a efectos de jugadores en la IR, nada puede esconder lo que es una realidad que no hay forma de tapar, la cantidad de estrellas de la liga que han acabado la temporada en la IR, especialmente grave es lo que está pasando con las niñas de la NFL, los QB. Con semejante avalancha de lesiones no es extraño que Roger Goodell guarde un prudente silencio sobre la posibilidad de ampliar la temporada regular, aunque ya llegara la post temporada para volver con la cantinela. Espero que los jugadores se nieguen en redondo a ver ampliada la temporada aunque los propietarios les ofrezcan mas dinero, con 18 partidos el mejor equipo no sería el que mejor football practique, sino aquel al que las lesiones mas respeten.
- Los que siguen erre que erre son los árbitros, quitando a un par de equipos arbitrales yo no creo que hay mucha diferencia entre aquellos que se llamaban de reemplazo con los que actualmente saltan cada domingo. No hay semana donde no se vean la habitual colección de errores arbitrales, no solo en aplicación del reglamento o revisión de jugadas, sino que la falta total de criterio es preocupante, en un mismo partido se pueden ver ya interpretaciones de jugadas parecidas totalmente diferentes, sobre todo en lo referente a las interferencias en el pase, una jugada que necesita este verano ser revisado con profundidad. Empieza a dar la sensación que hay equipos, y especialmente jugadores, que tienen manga ancha para hacer aquello que les parezca, y por otra parte otros parece que basta con que toquen a su defensor para que les piten falta. En playoffs es sabido que los árbitros suelen ser mas permisivos con el contacto, pero lo que debería preocupar en Madison Avenue es la calidad de muchos árbitros, cosas como las que se han visto esta última jornada serían inaceptables en un partido de playoffs.
- El MVP no admite ninguna discusión, y mucho me temo que también Peyton se acabe llevando también el de Offensive Player of the year, no se me ocurre ni otro candidato a hacerle sombra, los números del QB no admiten una sola comparación y nadie mas en ataque se acerca siquiera. Donde sí parece mas abierta la pelea es para ser el Defensive Player of the year, personalmente creo que la cosa está entre 3 jugadores, Robert Quinn, al que probablemente le hará daño que su Rams no pasen a post temporada, Luke Kuechly, que casi iguala el record de placajes en un solo partido, y finalmente Richard Sherman, que con 8 intercepciones iguala su marca del año pasado, una marca mas que considerable si tenemos en cuenta que son muy pocos los QB que lanzan pases en dirección a la zona de campo que cubre el CB. “Sherminator” sin embargo no se cansa de decir que quien debería llevarse el premio es su compañero Earl Thomas.