Ha pasado la primera semana de la Agencia Libre y es un buen momento para hacer conclusiones, podemos prácticamente asegurar que los mejores agentes están casi todos ellos firmados, aunque cuando escribo estas líneas aún estaban disponibles nombres como Jared Allen o Henry Melton, ambos en el Top 25 del ranking de NFL Hispano.
Lo suyo sería que ahora nos hiciésemos una lista diciendo quienes son los ganadores, los perdedores, quién o quienes lo han hecho bien y mal. En resumen, hacer un ranking con las 32 franquicias puntuando de cero a cien su desempeño, o falta del mismo, en esta recién terminada Free Agency. Pero como os adelanté en el artículo previo a la apertura de la Free Agency, los agentes libres no están para confeccionar una plantilla, sino para arreglar una posición no cubierta, o que no has sido capaz de hacerlo a través del draft. Un equipo no debe construirse por la vía de agentes libres por exitosos que pudieran resultar algunos en el pasado.
Por eso no me gusta hablar de ganadores o perdedores, prefiero hablar en otros términos, de grandes movimientos y de buenos movimientos, concepto que por otra parte para nada son sinónimos. Todos estaremos de acuerdo en que por ejemplo el movimiento de la temporada pasada de Mike Wallace fue un gran movimiento, pero no fue un buen movimiento. Por el contrario los movimientos de Cliff Avril o Michael Bennett fueron buenos movimientos, pero entonces nadie los calificó de grandes movimientos, de esos que impactan toda una Agencia Libre.
Grandes movimientos ha habido muchos, como ya dijimos tras el primer día de la Free Agency, donde se firmaron contratos por valor de mas de 1.000 millones de dólares, una concatenación de factores contribuyeron a que este año fuera muy movido. Lo que ahora mismo no podemos decir es si fueron buenos movimientos, aunque muchos sobre el papel parezcan buenos.
Para juzgar todos los movimientos eso vamos a tener que esperar hasta que empiece la nueva temporada, allá por septiembre. Y para sacar las verdaderas conclusiones, que acabe la temporada. Como os he dicho antes, cuando Mike Wallace firmó por los Dolphins, y se unieron otros fichajes sonados como Dan Ellerbie o Dustin Keller, los de Miami parecía que habían protagonizado la Agencia Libre, tenían los grandes movimientos. Basta leer las hemerotecas para ver que Mike Wallace iba a ser esa amenaza profunda que Ryan Tannehill necesitaba en su formación, o que Dustin Keller su válvula de escape.
Al final los aficionados a los Dolphins solo sabemos una cosa, Mike Wallace ha sido mas una fuente de problemas que otra cosa, su actitud dejó mucho que desear a lo largo de la temporada. Sus drops clamorosos, especialmente uno que tuvo ante Carolina que hubiera supuesto para los Dolphins ganar aquel partido y casi asegurarse una plaza de playoffs. Dustin Keller se lesionó en la pretemporada de gravedad, ahora mismo es agente libre y no tiene equipo, muy probablemente no lo encontrará hasta que pueda demostrar estar recuperado. De Dan Ellerbie mejor casi no hablar, Ozzie Newsome lo dejó marcharse de Baltimore sin hacer un mínimo esfuerzo por retenerlo, los Dolphins prescindieron de Karlos Dansby, y acabaron fuera de playoffs porque el equipo fue incapaz de ganar uno de los dos partidos que tenía que ganar para entrar en post temporada.
Por el contrario los Seattle Seahawks, un equipo que hace dos temporada empezó a demostrar que estaban construyendo algo especial, en la Agencia Libre del 2013 hizo lo que luego se han demostrado como buenos movimientos. Con una plantilla confeccionada básicamente a través del draft, reforzaron posiciones en la DL con los fichajes de Michael Bennett y Cliff Avril, dos jugadores que no firmaron grandes contratos, sino lo que podríamos llamar “asequibles”. Los resultados no se hicieron esperar, los Seahawks, con colaboraciones muy importantes de ambos jugadores, ganaron con absoluta autoridad la Super Bowl. Pocos campeones en los últimos tiempos despiertan tanta unanimidad como los de Pete Carroll, un equipo que dominó la temporada regular y fue el mejor en la post temporada, nadie cuestiona su categoría-
En resumen, los Dolphins protagonizaron los grandes movimientos, que no fueron para nada buenos, mientras que los Seahawks protagonizaron los buenos movimientos, y ninguno en aquel momento parecían grandes movimientos. Precisamente por eso, unos son los campeones actuales e incuestionables, mientras que los segundos han protagonizado una de las temporadas mas bochornosas que se recuerda en los últimos tiempos. La agencia libre no tiene culpa alguna de los problemas de la OL, o sí, Ritchie Incognito llegó como agente libre al equipo, pero al final metemos todo en una coctelera el resultado no puede ser mas desastroso.
En esta Agencia Libre queda por localizar cuales responderán a uno u otra calificación. Determinar los que son grandes movimientos no hay que escarbar mucho, si hubiera que decir grandes movimientos me vienen a la cabeza dos nombres muy por encima del resto, hablamos de los Denver Broncos y New England Patriots. Ambos equipos, que dominaron con soltura sus divisiones y la AFC, han salido en principio muy reforzados de la Agencia Libros
Los Broncos se han hecho con Aqib Talib, aunque creo que se han equivocado en no retener a Dominique Rodgers Cromartie, tuvo una mejor temporada, ha sabido mantenerse relativamente sano y no tiene los problemas de carácter de aquel. El otro gran agente libre fichado es el safety T.J. Ward, al que inexplicablemente los Cleveland Browns dejaron irse para reemplazarlo por Donte Whitner. Ambos fichajes, junto a un recuperado Chris Harris, hacen que una secundaria sospechosa pase a ser una fortaleza, incluso no se descarta a precio muy bajo de Champ Bailey. Finalmente los de Denver se han hecho con los servicios de DeMarcus Ware, descartado por los Dallas Cowboys, un jugador en la cuesta abajo de su carrera pero al que quizás le queden unas últimas gotas de gasolina en el tanque. El OL/DE se une a Peyton Manning para intentar un asalto al anillo, algo que en Dallas era imposible.
Los New England Patriots perdieron a Aqib Talib, pero lo han reemplazado no con un jugador, sino con dos, por una parte Darrelle Revis, cortado por los Tampa Bay Buccaneers, y poco después se unía Brandon Browner, el CB suspendido y ex de Seattle, uno de los miembros de “The Legion of Boom”. Por último los Patriots consiguieron renovar a Julian Edelman, el mejor objetivo de la temporada pasada de Tom Brady, y se han hecho con otro WR, Brandon LaFell, que viene a aportar su altura y cuerpo en la endzone, donde los Patriots notaron muchísimo la ausencia de Rob Gronkowski. La incógnita en New England ahora es qué sucederá con Vince Wilfork, el propio jugador ha pedido ser cortado tras los intentos de renegociar su contrato a la baja.
Si son buenos movimientos todos estos fichajes habrá que esperar hasta febrero del 2015, y sí, lo he dicho bien, ambos equipos han fichado a estos jugadores con un solo objetivo, ganar el Vince Lombardi. En el caso de Denver me he atrevido a acuñar una frase “The last ticket to Lombardi”, el último billete para Lombardi. La temporada de Denver se medirá solamente por eso, si ganan o no la Super Bowl, eso de que hemos llegado y protagonizado una buena temporada no va a ser suficiente este año.
Lo mismo podemos decir de New England, un equipo que es consciente de una cosa, la ventana de oportunidades se le está cerrando con cada muesca que Tom Brady añade a su calendario. Nadie ficha a un talento como Darrelle Revis solamente para engordar su enorme ego de mejor CB de la liga, sino para que cierra a la terna de WR con los que se encontrarán los Patriots esta temporada: Calvin Johnson, Brandon Marshall, DeMaryius Thomas, Keenan Allen, Mike Wallace (si rehace su carrera), A.J. Green, Dave Bowe, quien quiera que salga de Green Bay, etc… Pero donde Darrelle Revis demora demostrar la diferencia es en la post temporada, que es donde Aqib Talib desaparecía por lesión.
Si ponemos la mirada en la NFC un equipo ha monopolizado prácticamente los grandes movimientos, los Tampa Bay Buccanneers. Es cierto que se deshicieron de Darrelle Revis sin ningún coste salarial pero a cambio de no recibir nada, pero a cambio se han hecho con un CB que seguramente encaje mucho mejor en los esquemas de Lovie Smith como es Alterraun Verner. Su otra gran adquisición es sin duda Michael Johnson, uno de los mejores DE de la liga, excepcional contra la carrera, pero que deberá a ser el mismo del 2012 para justificar su contrato. Además de los anteriores, grandes movimientos, han añadido a su nómina al DE Clinton McDonald y los OL Anthony Collins y Evan Dietrich Smith.
El otro gran movimiento de la NFC, y esta vez me atrevo a decir que estamos solo ante un movimiento, es el aterrizaje del que era considerado mejor agente libre hasta que apareció Darrelle Revis. Hablamos de la incorporación de Jairus Byrd a la disciplina de los New Orleans Saints. No hay ninguna duda que estamos ante lo que llamo “gran movimiento” ¿Pero estamos ante un buen movimiento? Los de Big Easy eran un equipo con muchos problemas de espacio salarial, han tenido que cortar muchos jugadores para poder encajar a Jimmy Graham, que además no ha firmado aún y nadie sabe si es TE o WR a efectos salariales. No parecían tener una sola posibilidad para hacerse con el safety, pero para sorpresa de todos se han hecho con un jugador que formará con Kenny Vaccaro la mejor pareja de safeties con el permiso de Cam Chancellor y Earl Thomas de Seattle. Pero a partir de allí vienen los interrogantes, mientras que Seattle tiene a Richard Sherman y Byron Maxwell, los Saints no tienen a nadie de peso en las posiciones de CB, por no hablar de todo lo que han soltado del resto de la plantilla para poder llegar a estar debajo del Salary Cap.
Podríamos seguir enumerando “Grandes movimientos”, los Miami Dolphins se han propuesto por ejemplo resolver a golpe de talonario sus problemas de la OL y se han hecho con los servicios de Branden Albert, el secreto peor guardado de esta agencia libre. Eugene Monroe y Jared Veldheer han acabado en Baltimore y Arizona respectivamente, el primero renueva, el segundo viene a cubrir un enorme agujero en Arizona. Otros grandes podrían ser el aterrizaje de Julius Peppers en Green Bay, deja Chicago donde ha estado los últimos años para unirse a su rival del norte, pero es un fichaje que me despierta enorme dudas, lo de si es “bueno” lo vamos a tener que esperar. Otros movimientos dignos de mención podrían ser Karlos Dansby en Cleveland y Lamarr Houston en Chicago, están ambos por ver si serán “buenos”.
Tras los “Grandes Movimientos” suelen estar aquellos que no recibiendo el calificativo de grandes sí tienen todos los boletos para ser muy buenos movimientos. De momento son buenos y habrá que esperar su resultado el campo para confirmarlo, y en este bloque quiero meter a tres equipos, dos en la AFC como Indianapolis Colts y Jacksonville Jaguars, y uno en la NFC, como son los Philadelphia Eagles.
El gran tapado de la AFC deberían ser los Indianapolis Colts, un equipo que se ha reforzado discretamente, pero que puede ser mas que suficiente para ser el dominador de la AFC. Los Colts renovaron al CB Vontae Davis y RB Ahmad Bradshaw, y en el mercado se hicieron con 3 jugadores que pueden aportar muchísimo al equipo, por un lado el LB D´Qwell Jackson, un veterano que aportará sus instintos y liderazgo, el DE Arthur Jones, un viejo conocido de Chuck Pagano, y por último han añadido al WR Hakeem Nicks, un jugador con muchísimo talento y que se unirá a Reggie Wayne y T.J. Hilton, para formar uno de los ataques aéreos mas potentes de toda la liga, un auténtico arsenal para Andrew Luck. Los Colts se deberían beneficiar de tener un calendario mucho mas asequible que Broncos y Patriots, en su división, la AFC South, el único equipo que ha mejorado son los Jacksonville Jaguars, ni Tennessee Titans ni Houston Texans, deberían ser una amenaza seria para unos Colts mas que muy reforzados, si reforzados allí donde mas falta les hacía.
En este capítulo de la AFC South no me quiero dejar a los Jacksonville Jaguars. Sobre la franquicia del norte de Florida he leído muchas cosas, buenas y malas, en mi opinión han hecho un gran trabajo. ¿Y por qué? Gus Bradley, y su GM David Caldwell, tienen un plan y siempre que un equipo se ciñe a un plan se puede decir que hacen bien su trabajo. La temporada pasada Gus Bradley sacó petróleo de una plantilla con muchos agujeros y muy joven, este temporada con unos refuerzos de no mucho nombre, pero si jugadores que van a aportar y viejos conocidos de su Head Coach, el equipo solo tiene margen de mejora. Además es un equipo que aún saldrá mas reforzado del draft, donde podría tener varias opciones en función de las elecciones que hagan los que van delante suyo. Que nadie se extrañe si este equipo con su calendario y un roster muy mejorado, con un año mas bajo el sistema de Gus Bradley, esté mas cerca de un record de 8-8 que negativo. En mi opinión son un equipo que sin los nombres de los Texans o Titans, es un conjunto mucho mas equilibrado, y sobre todo, con un proyecto claro bajo el brazo.
Los Philadelphia Eagles antes de empezar la Agencia Libre hicieron los deberes, no solo no perdieron ni un solo agente libre que no querían perder, sino que fueron capaces de renegociar varios contratos de sus jugadores mejor valorados y retenerlos varios años mas, lo que garantiza que sus playmakers seguirán varios años mas en la franquicia. Aunque asegurar esto en la NFL es siempre muy aventurado, ya sabemos que un día eres imprescindible, y la temporada siguiente te cortan o te traspasan.
Los de Chip Kelly sonaron como el destino mas probable de Jayrus Byrd, pero al final el jugador nunca estuvo en la órbita de los Eagles. Quizás las pretensiones económicas del safety estuvieran totalmente fuera de lugar, o simplemente el Front Office del equipo decidió que era mejor apostar por un jugador mas barato como Malcolm Jenkins, que te permite a la vez ir a por otros jugadores para llenar de talento una plantilla que ya estaba llena de calidad.
Otro fichaje, de perfil mas bien bajo, fue la contratación del ex CB de los Dolphins Nolan Carroll, un jugador con experiencia en esta liga, lejos de ser una estrella, pero útil, lo que en esta liga ya es toda una garantía. Sin embargo el gran fichaje no llegó por la Agencia Libre, sino por un traspaso, los Eagles incluían otra pieza mas a su dinámico ataque al incluir al polivalente RB Darren Sproles, un auténtico dinamo humano y que va a permitir añadir infinitas variables al potente ataque de los Eagles, y que se une a Sean McCoy en el backfield.
Por otra parte los Philadelphia Eagles, al igual que en el caso de los Indianapolis Colts, se van a beneficiar de varias cosas. La primera y mas importante, un año mas en el sistema de Chip Kelly, que tras sus devaneos y dudas iniciales optó por instalar un ataque pro style utilizando el innegable talento de muchos de sus jugadores. La segunda el estado de la NFC East, ni Washington ni Dallas son mejores conjuntos que el año pasado, más bien lo contrario, y el único que parece que se ha reforzado con algo de criterio son los NY Giants. La última y más importante, su calendario infinitamente más asequible que sus rivales de la NFC West y NFC North, con cruces divisionales muy peligrosos. No sería por eso nada raro que los de Chip Kelly pudieran, al igual que los Colts terminar con el mejor seed de la conferencia.
Y cerrado los capítulos de Grandes y Buenos (pendientes de revisión) movimientos podemos hablar o decir algo del resto. Antes de nada me gustaría empezar con dos equipos que hicieron de la excelencia y la grandeza sus señas de identidad en el pasado, hablo de los Oakland Raiders y Dallas Cowboys respectivamente.
Los de Mike Davis viven un auténtico drama, pese a contar con mas espacio salarial que nadie no han sido capaces primero de retener a sus propios agentes libres, han volado en cuanto han podido. Pero tampoco son capaces de atraer a nadie si no es con dinero. Como proyecto deportivo y con aspiraciones Oakland es un cementerio, donde además se une que tienen el peor estadio de la liga, único equipo que comparte campo con un equipo de la MLB, y que nadie sabe con certeza donde pueden estar en un par de años. La Agencia Libre no pudo empezar peor, perdieron en cuestión de horas a Lamarr Houston y Jareed Veldheer, les siguió el desastre de fichaje de Roger Saffold, un jugador por el que pagaron un dineral injustificable, pero que no pudo pasar el reconocimiento médico. Al final están siendo un destino para jubilarse, atraen a jugadores descartados por terceros que se unen porque ofrecen buenos salarios, su único fichaje de renombre es el WR James Jones.
Los Cowboys han debido tomar notar del desastre de Oakland, el aprendiz de Lord Sith que se había convertido Jerry Jones llevaba por el mismo camino a los Cowboys, una plantilla envejecida con jugadores con grandes contratos, continuamente renovados y que tarde o temprano terminan por explotar. Los Cowboys ya llegaron justo al Salary Cap y abierta la agencia libre se desprendieron de DeMarcus Ware, santo y seña de la defensa los últimos 9 años. Tampoco siguen en el equipo Anthony Spencer, designado el año pasado Franchise Tag, como tampoco sigue Jason Hatcher, un veterano que explotó el año pasado.
Los Cowboys parecen que quieren seguir apegados a su plan de mantener el actual ataque, que gira alrededor de Tony Romo, Dez Bryant, Jason Witten y Terrance Williams, y mientras tanto ir renovando y metiendo savia nueva a una defensa. los únicos jugadores con peso ahora son Brandon Carr y Sean Lee. Los Cowboys parece que han tomado buena nota de Oakland y antes de bajar a los infiernos han optado por ir renovando la defensa, que recordemos que pese a los nombres mencionados fue la peor de la toda la NFL, y lo que es peor aún, de toda la historia de la franquicia. Optar por deshacer la actual defensa y renovarla era la apuesta mas lógica, quizás por una vez el GM Jerry Jones acierte.
Un último equipo que merece mi tiempo son los Carolina Panthers. No puedo entender que esta pasando en esta franquicia, tenía todas las trazas y hechuras para ser una versión renovada de los Seattle Seahawks en el 2014. Renovaron contratos para mantener como sea a su mejor jugador defensivo, Greg Hardy, que así evitó entrar en la Agencia Libre, donde hubiera sido de largo el mejor jugador disponible. Pero desde entonces todo ha ido a peor hasta el punto de que ahora mismo no cuentan con un solo WR en la plantilla, Steve Smith, Brandon LaFell y Ted Ginn están todos fuera. El equipo no se ha movido, el único nombre que ha sonado fue James Jones, y aunque los WR han sido en líneas generales los grandes perdedores junto con los RB, ahora mismo Cam Newton va a tener que pasarse a si mismo, o sacar del retiro a los siempre dispuestos Terrell Owens o Chad Johnson. Carolina ya puede acertar en el draft con los WR, hacerse con descartes en la pretemporada o hacerse con alguno de los que aun quedan libres con algo de nombre como Sydney Rice.
Y para terminar, como he dicho, no pretendo valorar ni hacer un resumen de todo lo que ha pasado. Solamente he querido incluir aquí aquello que me ha parecido llamativo, sé que me dejo a muchos equipo, como los NY Giants, que de alguna forma al final se han hecho con Dominique Rodgers Cromatie y Walter Thurmond, pero es que el resto personalmente creo que no han hecho nada, Jared Allen y Henry Melton podría cambiar algún equipo contendiente, pero pocos movimientos más merecen mi atención. Algunos porque no quieren, otros porque no pueden, otros porque no han sido capaces de vender un proyecto interesante.
Pero volviendo a donde empezamos, nadie gana ni pierde la Super Bowl en la Agencia Libre, que al final se puede resumir en lo que hemos dicho, grandes y buenos movimientos, algunos incalificables, pero que sabremos su efecto hasta empezar la temporada. ¿Quién no nos dice que los Oakland Raiders tienen el mejor draft que se recuerda en la historia y protagonizan la Super Bowl con unos Dallas Cowboys que consiguen una defensa del nivel de su potentísimo ataque? Parece imposible, pero en esta NFL actual tantas cosas parecían imposible que ya nada debe descartarse.