La selección de Francia debutaba ayer en el Europeo y ciertamente su presentación no pudo ser más contundente. Los chicos de Larry Legault pasaron por encima de Dinamarca con un 65-0 que no deja lugar a la duda.
El corredor Stephen Yepmo se erigió en el gran protagonista anotando cuatro de los touchdowns galos. Guillaume Rioux añadió un retorno de punt espectacular hasta la misma endzone y el Nicloas Khandar Shahabad somó otro TD y el kicker Boris Bede anotó 5 de los 6 puntos extras que intentó hasta el 41-0 con el que ambos equipos se retiraron a los vestuarios.
Ya en la segunda mitad los «bleu» dieron cancha a sus jugadores suplentes con la idea de llegar con el mayor descanso posible al decisivo partido del miércoles ante Austria en el que se decidirá el pase a la gran final.
Aún así Khandar Shahabad, Anthony Dable y Mahoungou Anthony con un touchdown por cabeza y Boris Bede con un field goal redondearon el marcador.
Dinamarca llegó a estar en field goal range pero no pudieron irse con puntos en su casillero.
La única mala noticia para Francia llegó en el primer cuarto cuando el línea defensivo Giovani Nanguy resultó lesionado en un brazo teniendo que abandonar el campo rumbo al hospital.
Legault se mostró muy contento con sus discípulos. «El primer partido en un torneo siempre es difícil. Estoy feliz soy con la victoria ante Dinamarca. Ellos estaban visiblemente cansados por el juego muy físico contra Austria. Ahora el desafío será que nosotros podamos hacer dos buenos encuentros en 48 horas.»
Por su parte Lars Carlsen, head coach danés, sólo pudo resignarse. «Francia fue muy fuerte y veloz. Su línea defensiva es muy fuerte. En la segunda mitad ya comenzamos a reservar jugadores para el partido por evitar perder la categoría en el grupo A».