Los Berlin Adler se convirtieron en la tarde de ayer en el primer finalistas de la Eurobowl 2014 tras derrotar a domicilio a los Swarco Tirol Raiders por 18-10 en un disputado partido que no se resolvió hasta el último minuto y en el que los equipos especiales en sus versiones de pateo fueron determinantes.
Los 6.000 espectadores que se dieron cita en el Tivoli Stadion presenciaron una batalla dominada por las defensas sobre todo cuando las ofensivas se acercaban a la «redzone» del rival. Los locales fueron los primeros en mover el marcador pero su desacierto en esas últimas yardas finales les limitó a un field goal en el primer cuarto. Lo mismo ocurrió poco después con la ofensiva germana y con 3-3 no sólo terminó el primer cuarto sino que, tras sendos field goals errados, ambos equipos se retiraron a los vestuarios.
Tras la reanudación llegaron los mejores momentos del QB John Van den Raadt (15/32, 157 yardas) quien tenía en Kyle Callahan (7 recepciones, 112 yardas) a su mejor aliado y quien por medio de sus piernas anotaba el primer TD del partido (10-3). Como ya sucediera en el primer cuarto la respuesta de los Adler fue inmediata. El QB Darius Outlaw conectaba con Glenn MacKay en la endzone para lograr el touchdown sin embargo el extrapoint no era bueno y los locales mantenían un punto de ventaja. Los Raiders arrancaban un drive en las profundidades de su campo y después de ser frenados por el muro germano un error en el snap de una patada de despeje dentro de su propia endonze supuso un safety y la primera ventaja en el partido para los berlineses (10-11) con la que se llegó al cuarto definitivo.
La tensión aumentaba por momentos, los Adler buscaban una jugada de engaño pero el pase del WR Talib Wise era interceptado por la defensa local, la ofensiva Raider tampoco tenía continuidad. Finalmente, y a poco más de dos minutos para el final del partido, Wise rompía al fin la resistencia local y con una gran carrera de 31 yardas helaba el corazón de sus ex-compañeros y llevaba el silencio a las gradas.
Los de Innsburck aún tenían dos minutos en el reloj para enjugar los 8 puntos de desventaja y forzar la prórroga. Van den Raadt se echo al equipo a sus espaldas y por medio de sus carreras (al final 146 yardas terrestres en su haber) llevó a los suyos al campo alemán sin embargo, en otro intento de escapada, perdía la posesión del balón y el fumble era recuperado por la defensa Adler poniendo punto final al partido y mandando a los germanos a la próxima Eurobowl.