En la NFL los «Y SI» no sirven para nada

1698

La semana pasada comenzó la campaña publicitaria del sorteo extraordinario de Navidad de la Lotería Nacional, la del “Gordo” más grande del mundo, los anuncios son unos de los más esperados de todo el año, con toda seguridad el más. La campaña muestra como un hombre, animado por su esposa, se dirige a su bar habitual a tomar un café mientras observa que la lotería ha tocado y él no ha comprado un décimo. El propietario del bar, que lo conoce de siempre, le sirve su café tras una pequeña conversación sobre el premio. Al pedirle la cuenta le dice que son 21 €, un precio desorbitado por un café, ante lo que el propietario del bar le responde, 1 € es por el café, y 20 € son por el contenido de un sobre que le entrega, sobre que contiene un décimo premiado.

El anuncio es una ficción, pero sobre todo es un anuncio de los que gustan cuando se acerca la Navidad, solidario y ternura a partes iguales. En el mundo real aquel hombre se pasaría el resto de su existencia diciendo en voz alta, y seguramente en voz baja también, ¿Y si hubiera comprado el décimo? Pero eso que le ocurría a aquel hombre nos pasa a absolutamente todos en nuestra qué hacer diario, tenemos decenas de ¿Y si hubiera?

Esta reflexión me ha venido a la cabeza porque el QB del que considero mi equipo, Ryan Tannehill de los Miami Dolphins, en la rueda de prensa tras la victoria frente a los Buffalo Bills dijo que su equipo podría estar 8-2 en lugar de 6-4, y aquí está el problema, si hubiera ocurrido esto o aquello. El esto o aquello se refiere al hecho de haber defendido mejor los drives finales de los Green Bay Packers y Detroit Líons, equipos que se tuvieron que recorrer todo el campo para ganar a los de Miami en los segundos finales y remontar los marcadores.

Tras el partido contra los Bills Ryan Tannehill divagó sobre los «Y si hubiera»

¿Tiene razón Ryan Tannehill? Si el equipo hubiera defendido mejor quizás nunca Packers o Lions hubieran anotado, o al menos no habrían llegado hasta la zona de anotación, o si recuperan un fumble de Aaron Rodgers, o si en 4 y 10 no permiten un primer down, o si defienden mejor el fake spike del QB de los Packers, entonces en todos esos “y si” la respuesta entonces es . Pero da la inmensa casualidad que la defensa no hizo su trabajo, o la alineación de estrellas o a saber qué conjuración masónica se puso en marcha, y tanto Green Bay como Detroit anotaron en los segundos finales para ganar el partido. Aquí es cuando se aplica la frase de Bill Parcells “eres lo que tu récord dice que eres”. Miami es un equipo de 6-4 y no un equipo de 8-2, los “y si hubiera” en la NFL no valen para nada, pero como tampoco le valen al que no compró la lotería.

Cuando los equipos afrontan el tramo final de temporada es cuando les llega ese momento en que se preguntan qué hubiera pasado si anoto aquel field goal o no hubiera cometido aquel fumble en aquel momento. Quizás en lugar de estar 7-3 estaría 8-2, pero también puede ocurrir que estés 6-4,  el resultado final de una temporada de un equipo al final puede quedar reducida a como hubieran podido ir un par de detalles. El único equipo que de momento está exento son los Arizona Cardinals, no llevan una temporada perfecta, pero sí lo mas parecida a ella.

La imaginaria máquina del tiempo creada por H.G. Wells

El pasado no se puede cambiar, no tenemos una máquina del tiempo como H.G. Wells que nos permite ir atrás en el tiempo y cambiar lo qué pasó, además no es tan siquiera eso, cambiar los hechos, sino un detalle muy puntual que hicimos de una forma y que lo hubiéramos hecho de otra totalmente diferente. No se trata de regresar en el tiempo y no alinear a Andy Dalton el día que de su desastroso partido ante los Cleveland Browns, o mas cercano en la memoria, Eli Manning , sino que tal o cual jugada se hubiera ido en un sentido u en otro. Así de pronto, además de las mencionadas en el caso de los Dolphins, por ejemplo, DeMarco Murray cometió un fumble cuando estaban en zona de anotación ante los Washington Redskins, lo que eran ya 3 puntos del mas que seguro FG de Dan Bailey, pudieron haber sido 7 puntos si en esa zona del campos los Dallas Cowboys anotan. Además Tony Romo estaba jugando en aquellos momentos, y quien sabe si nunca se hubiera lesionado con otro marcador muy diferente, lo que inmediatamente nos lleva al partido de Arizona, donde los Cowboys no tuvieron una sola oportunidad de ganar sin su QB de referencia.

Pero ese “y si no cometo fumble” se puede trasladar a otras muchas partes  y escenarios totalmente diferentes. Vayamos a otro caso diferente, uno que no controlan los jugadores, una decisión arbitral que tanto daño están haciendo a la NFL este año. Steve Smith Sr. anotaba en los segundos finales un TD ante los Cincinnati Bengals, sin embargo de forma totalmente inexplicable los árbitros pitaron interferencia ofensiva en lo que fue un “flopping” en toda regla del defensor de los Bengals. Si los árbitros no pitan nada, los Ravens se llevan el partido, y en lugar de estar con un record de 6-4, están con una marca de 7-3, líderes solitarios de la AFC North, mientras que los Cincinnati Bengals estarían 5-4-1, colistas, y no al revés como pasa ahora. Es un caso claro de “Y si hubiera”, con el agravante de que no es un error propio, sino un error de terceros..

El «flopping» de George Iloka fue interpretado como Pass Interference negando un TD a Steve Smith Sr.

Otro caso podría ser el de los Atlanta Falcons, líderes de la penosa NFC South con una marca de 4-6. De haber ganado en Londres ante los Detroit Lions estarían 5-5, no es que la marca sea para tirar cohetes, pero liderar una división con esa marca a falta de seis semanas es siempre mas digno que hacerlo con una marca de 4-6. La colección de acontecimientos de aquel partido es innumerable, empezando por una falta que permitió a los Lions parar el reloj, por no hablar de lo que pasó en el FG, donde una falta cometida por el ataque invalidó la jugada, que fue un FG fallado, en el siguiente Matt Prater anotaría. Pero lo mismo les sucede a los Lions, podrían decir que si Alex Henery anota un FG ante los Buffalo Bills ellos estarían con una marca de 8-2. Y seguramente mas de un aficionado dirá que incluso 9-1 si los árbitros no se equivocan en Arizona.

Ahora mismo estoy seguro que si los 32 equipos de la liga repasan sus temporadas puntualmente, jugada por jugada, cambio de jugador por cambio de jugador, estaríamos hablando de otra temporada totalmente diferente. No estoy diciendo que los Oakland Raiders liderarían la AFC West, eso parece muy poco probable, pero que desde luego su record no sería de 0-10 no me cabe ni la menor duda.

Y sí, los Lions podrían decir que ellos estarían 9-1 en lugar de 7-3, o los Dolphins 8-2 en vez de 6-4. El problema son dos, primero, solo nos acordamos de aquello que nos podría beneficiar a nosotros, normalmente olvidamos aquella jugada que nos perjudica y nos colocaría con una derrota . Y segundo, como he dicho antes y voy a ser reiterativo, eres lo que tu récord dice que eres, los Lions, Dolphins, Falcons y Ravens son equipos de 7-3, 6-4. 4-6 y 6-4. Nadie puede cambiar eso, como nadie puede cambiar que perdiste aquel tren, que abandonaste aquel trabajo, que rechazaste una oportunidad de inversión o que no te quisiste casar con la que era tu novia o novio entonces.

Los «Y si hubiera» pueden cambiar radicalmente una clasificación final

Eres lo que eres por las decisiones que tomaste y no vale para nada lamentarse con los “y si hubiera”. En esta vida, como en todo, se trata de acertar mas veces de las que te equivocas, y que en alguna ocasión la diosa Fortuna te eche un cable.  Aquel señor nunca le tocó la lotería porque decidió no comprar un décimo, y si le toca es simplemente porque es una ficción en un anuncio publicitario. En nuestras decisiones las cosas nunca pasan como en aquella película de Gwyneth Palthrow y John Hannah, «La vida en un suspiro», donde se simultanean lo que podía haber sucedido si la protagonista pierde o coge el tren a su casa. Los «y si hubiera» no valen para la vida, y mucho menos valen para la NFL. Los equipos lo mejor que pueden hacer es centrarse en lo que tienen por delante, aprender de los errores y no darle vueltas a lo que podía haber sido.

Entiendo el caso particular de la lotería, es muy difícil, pero mirad, yo aquí aplico mi doctrina particular. Todos los años juego una cantidad indecente a la lotería de Navidad, puedo llevar tranquilamente mas de 40 números que intercambio o compro, y nunca me ha tocado mas allá de una pedrea. Cuando te encuentras con alguien que dice «no me ha tocado nada», mi pregunta es ¿Pero has jugado?. Si te dicen que no, no hay caso como el del anuncio, y si es un caso particular como el mío, tampoco, unos por defecto, otros por exceso, al menos no tendremos que lamentar el resto de nuestra existencia «Y si hubiera» con la lotería.

AUDIBLES

  • No me gusta empezar esta sección hablando de los arbitrajes, pero es que nos lo ponen a huevo. Cada semana los árbitros se las componen para superar lo hecho la semana anterior, el archiconocido tópico de la Ley de Murphy, todo es susceptible de empeorar, en materia de arbitraje se está cumpliendo a rajatabla. Hablar de este o aquel error carece de sentido ya, es tal la colección de errores que enumerarlos es imposible. La NFL tiene un problema muy grave, se está cociendo una tragedia y mientras toda la respuesta que recibimos semana sí y semana también es un patético Dean Blandíno diciendo que los arbitrajes son correctos. Él sabe que eso no es así y lo único que cabe esperar a estas alturas es que un error garrafal no cueste una plaza de playoffs, una eliminación o quién sabe si la propia Super Bowl. Yo soy de la opinión que la NFL lo merece, que un error garrafal se cargue la Super Bowl, no un error de un jugador para que quede de chivo expiatorio, sino un error garrafal de esos que todos vemos al menos media docena por jornada.
Cabrear a Tom Brady y Bill Belichick se está demostrando como una fórmula muy mala
  • No aprendemos de nuestros errores. En 2007 toda la prensa se lanzó a la yugular de los New England Patriots cuando fueron acusados de espiar a sus rivales (el “Spygate”) , Roger Goodell quiso pasar página, destruyó las pruebas y sancionó al equipo con una ronda de draft y monetariamente. La reacción de los Patriots, de Bill Belichick y de Tom Brady no se hizo esperar, no solo ganaron a todo lo que se les puso por el camino, sino que fueron endosando paliza tras paliza a todos sus rivales, en algunos casos particulares humillando, lo que costó al equipo ganarse enemigos por considerar que inflaban los marcadores. Siete años después la historia se repite, aunque esta vez sin acusaciones de espionaje, sino apuntando con el dedo a Tom Brady, del que se dijo que estaba acabado, y de paso el tiempo de Bill Belichick. De nuevo los New England Patriots han reaccionado igual, lo que empezó siendo veremos qué pasa en Cincinnati se ha convertido en un ejercicio de dominio y superioridad de todo cuanto se les pone por delante a los de Bellichick, que ya no necesita siquiera que Tom Brady esté a su mejor nivel, sino que el resto del equipo responda. Este probablemente sea el mejor equipo que tiene Bill Belichick desde el año 2004, su última Super Bowl, una escuadra que no necesitaba que Tom Brady rayara la excelencia.
  • Andrew Luck va a ser un excelente QB en esta liga, no tengo ninguna duda que sus números en los próximos 10 años van a pulverizar marcas, y mas en una liga tan orientada al pase que protege a los QB y hace muy fácil el juego de pase. Pero, o al QB lo rodean mejor o se puede convertir en el siguiente Dan Fouts o Dan Marino, tener los números pero no los títulos, al menos Peyton Manning puede presumir de tener un anillo. La frustración de Andrew Luck debería crecer viendo a los New England Patriots, no les hizo falta que Tom Brady estuviera a buen nivel, sino que el juego terrestre, la OL y la defensa sacaran el partido adelante, precisamente es todo lo que les falta a los Colts, un RB, una OL y una defensa. Desde hace un tiempo existe el mantra de que sin un QB Top no tienes opciones al anillo, y los Colts han debido pensar que solo con Andrew Luck ellos van a ganar el Vince Lombardi, algo que temporada tras temporada no se está demostrando así, hace falta que al QB le acompañe algo. Si Tom Brady o Aaron Rodgers tienen serias posibilidades de un anillo es porque están mejor rodeados que nunca, y Andrew Luck está solo, muy solo.
Knile Davis y Jamal Charles, la pareja imparable del backfield de los Kansas City Chiefs
  • No es ninguna casualidad que los equipos que mejores opciones tienen de cara a la post temporada estén usando cada vez mas el juego terrestre. A pesar de que desde diferentes tribunas se aboga por la pérdida de importancia del juego terrestre, cuando llega el frío, los campos pesados y el cansancio, aquel equipo que tiene un juego terrestre poderoso tiene muchas más opciones que aquellos que todo lo fían al juego de pase. Los Dallas Cowboys fueron los primeros en ponerlo en práctica, y muchos otros equipos les están siguiendo el camino. Los Kansas City Chiefs son un claro ejemplo, seguramente si alguien quiere saber quienes son los WR del equipo deberá bucear en la plantilla, pero su pareja de RB, Jamal Charles y Knile Davis, son una de las sensaciones de la temporada. El ejemplo lo están empezando a aplicar otros equipos y que nadie descarte que otros equipos se vayan incorporando a esta dinámica, la mejor forma de llegar profundo a la post temporada es corriendo y defendiendo.
  • La temporada está siendo una auténtica montaña rusa, salvo los Arizona Cardinals, que se han mantenido en lo más alto desde el primer día, es un constante ver subir y bajar equipos, por ejemplo los Broncos se han caído de muchísimas apuestas tras dos derrotas consecutivas. Este efecto “montaña rusa” no sólo afecta a equipos, sino a jugadores, especialmente si eres QB. Ser QB es lo que tiene, una semana eres un dios, la siguiente eres un demonio. La semana pasada Andy Dalton fue crucificado sin perdón y sin juicio, los Cincinnati Bengals poco menos qué se tenían que deshacer de él, esta semana nadie pide que lo echen al río Ohio. Sin embargo al que puede que echen a las frías aguas del río Hudson es a Eli Manning, cinco intercepciones y una actuación que recordó a las peores del año 2013, y aun así pudieron ganar a los San Francisco 49ers. Tampoco se le antoja semana fácil a Peyton Manning, hace dos sonaba como MVP, dos malas actuaciones y ya no suena mas. Por cierto, curioso que un QB que ha jugado gran parte de su carrera en un dome esté 1-3 desde que regresó de su lesión.
Mark Sánchez, tras un buen inicio, sacó a la luz todas sus carencias como QB
  • Las dos divisiones mas locas del Football tienen que ser la AFC North y NFC South, pero ambas por motivos muy diferentes, aunque sí tienen una cosa en común, el líder de división cambia cada semana. Mientras que en la AFC Norte todos los equipos tienen récord positivo y el liderazgo cambia en funcion de quien gana o pierde el domingo, la NFC South es una comedia grotesca. Los Panthers fueron líderes durante un tiempo, cuando los New Orleans Saints les ganaron parecía que no la soltarían con un calendario que les reservaba tres partidos seguidos en su estadio, pero dos semanas después, los Atlanta Falcons son los nuevos líderes, y no solo eso, parecen de largo el mejor conjunto. Mike Smith, tras la inexplicable derrota de Londres, parecía que no llegaría a comer el pavo de Acción de Gracias como Head Coach, ahora es líder y lo más importante, están en el asiento del conductor. En la AFC North los Cincinnati Bengals son quienes se sientan en el puesto del conductor tras el pinchazo de los Cleveland Browns, que sin embargo podrían recuperar el puesto en cuestión de una semana.
  • En una liga donde no hay apenas 32 QB de calidad para ser titulares pedir que haya 32 QB suplentes con un mínimo de solvencia es pedir peras al olmo. Muchos suplentes son QB rebotados de otros equipos que aún mantienen algo de status y siguen buscando hueco en los rosters, otros son QB que llegaron vía draft que tienen contratos asumibles, por eso siguen ocupando plaza en un roster. La mayoría de los QB suplentes, entendemos aquellos que llevan tiempo en la liga y no el novato que está aprendiendo, les sucede algo parecido, el día que tienen que salir al campo no lo hacen mal, incluso algunos consiguen parecer hasta solventes, pero tarde o temprano tiene que salir lo que se esconde debajo de sus nuevos uniformes, los QB suplentes que son, y tras uno o dos partidos medio decentes asoman sus enormes limitaciones. Esta misma semana hemos visto varios casos, empezó Kyle Orton, tras unas actuaciones decentes le llegó la insolvencia cuando enfrente se encuentra una defensa que se prepara el partido. Le siguieron el domingo Mark Sánchez y Drew Stanton, QB que en partidos anteriores parecía que podían sacar las castañas del fuego, pero que quedaron expuestos cuando tuvieron que forzar un poco.
  • Solo era cuestión de tiempo, pero el ataque que Chip Kelly ha instalado en Philadelphia tenía una virtud poco conocida, disimulaba todos los males de lo que tiene pinta de ser una defensa lamentable. Un Head Coach es el responsable tanto del ataque como de la defensa, si solo se centra en una parte descuidando la otra, de nada sirve montar un ataque digno de la Guerra de las Galaxias. Chip Kelly se está centrando demasiado en el ataque, al igual que Mark Trestman en Chicago, dejando totalmente de lado la parcela defensiva. En Chicago el Head Coach es cuestionado tras encajar mas de 100 puntos en dos semanas, y en Philadelphia si Kelly no es capaz de mejorar las prestaciones defensivas de su equipo, de poco o nada servirá montar un ataque que divierte, pero que no sirve para ganar partidos. Si los Cowboys se acaban llevando una división que nadie esperaba siquiera que fueran contendientes, a Chip Kelly nadie le cuestionara como coordinador ofensivo, otra cosa es lo que pueda pasar con su faceta como Head Coach.
  • A esto de los “Bye” se necesita darle una vuelta de tuerca, aunque con el partido de Londres de por medio es algo que ahora mismo parece imposible. No me parece ni medio normal que haya equipos que tenga su semana de descanso en la Semana 4 y qué estemos en la Semana 12 y hay equipos que van a tener el suyo ahora, es decir, unos lo tienen con 3 partidos a cuesta y otros con 11. Luego cada equipo es un mundo y un caso, a lo mejor por tema de lesiones te conviene ese descanso en la cuarta o quinta semana, pero una competición que presume de buscar el mayor balance posible no debería tener equipos descansando con tanta diferencia de meses, no hablamos de 3 ó 4 semanas, que sería lo lógico, sino de hasta meses, y encima dentro de una misma división.
Lee Roy Selmon perdió 26 partidos consecutivos en Tampa Bay, un récord en la NFL
  • Estos días he leído en la prensa que hay jugadores de los Oakland Raiders que enlazan de forma consecutiva 24 derrota al ser parte el año pasado de los Houston Texans, perdieron 14 encuentros de manera seguida, y parte de los Oakland Raiders, que llevan 10 derrotas seguidas esta temporada y son el primer equipo eliminado. Me parece injusto, muy injusto, de la misma forma que se atribuyen victorias a los conjuntos, las derrotas también lo son en conjunto. Los dos jugadores que se encuentran en tal circunstancia, Matt Schaub (que no ha jugado) y Antonio Smith han tenido la mala fortuna de formar parte de equipos con rachas muy negativas, incluso Matt Schaub no tiene culpa alguna de haber sido traspasado. En todo caso conviene recordar que los jugadores de Tampa que formaron parte de la plantilla de 1976 y 1977 encadenaron 26 derrotas, y entre ellos figura un tal Lee Roy Selmon, un gran DE que entró en el Hall of Fame.
  • La mala racha de los Oakland Raiders da que pensar, uno ya no sabe si lo hacen para tener la primera elección del draft y poder elegir a un buen jugador o hacer un trade por ella, o buscan hartar a sus aficionados de forma que estos acaben deseando que el equipo abandone la ciudad y se vaya a Los Ángeles, San Antonio o Londres. Hasta ahora eso que denominan “tanking” se hacía para hacerse con un jugador, allí está el caso de los Indianapolis Colts, pero los Raiders son originales en todo, están haciendo “tanking” con los escasos aficionados que aún deben apoyar al equipo.
  • Muchas veces alabamos al público americano por su actitud en el campo, muy alejado del modelo energúmeno recalcitrante que tanto puebla por estos lares, pero en ocasiones tienen sus energúmenos propios. El pasado domingo Jermaine Gresham tras anotar un TD quiso entregar la pelota a una aficionada, pero se puso de por medio un aficionado local de los New Orleans Saints que le quitó la pelota, algo que fue captado por todas las cámaras, y con el eco de la ESPN y otras cadenas, se hizo noticia nacional. A este señor no lo pasará nada mas que quedar como el tonto del año, pero se merecería un tratamiento similar al que tuvo Steve Bartman en un partido de playoffs de baseball hace unos cuantos años.
  • No ha sido una buena semana para los RB, además de la habitual ración de golpes que se llevan cada jornada, Ahmad Bradshaw se lesionó y se perderá lo que resta de temporada, y Trent Richardson dejó patente que no es un RB capaz ni capacitado, 7 acarreos para 0 yardas. Pero otros vieron como se quedaban sin empleo, al menos de forma temporal, Ben Tate, fichaje estrella de los Cleveland Browns en la post temporada, fue cortado. Pocas horas después le acompañaba Legarrette Blount, cortado sin miramientos por los Pittsburgh Steelers tras un acto de indisciplina en la banda. Ambos en todo caso van a encontrar empleo a no mucho tardar, hay demasiados equipos con carencias en la parcela del juego terrestre.
La guerra entre Roger Goodell y Adrian Peterson acaba de empezar
  • Y por último hablando de RB, cuando cerraba esta columna saltó la noticia de la sanción de Adrian Peterson. No puedo decir otra cosa que la NFL se vuelve a equivocar y muy gravemente en este asunto, si al principio se les acusó de pasoti, ahora se han ido al otro extremo y se permiten la licencia de dar lecciones de moralidad. De verdad, no puedo entender qué hace Roger Goodell metiéndose en cuestiones que pertenecen a la mas estricta intimidad de una familia ¿Quién es el comisionado de la NFL para decir a un ciudadano como educar a su hijo? ¿Os podéis imaginar que el jefe de la patronal para la que trabajas te mande una carta pública diciendo como has de educar a tu hijo? Y eso por no hablar de arrogarse facultades que pertenecen a la justicia ordinaria. Este asunto acaba de empezar, sigo pensando que detrás de todo este asunto solo hay “postureo” y fachada, y es una forma muy tosca de tapar los errores que se cometieron con el asunto que hizo saltar por los aires todo, el caso Ray Rice.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.