Sin discurso previo y respondiendo a las preguntas de los periodistas durante más de 20 minutos Tom Brady protagonizó una multitudinaria rueda de prensa en el Gillette Stadium para negar cualquier implicación en el caso conocido ya como «deflategate» en el que los New England Patriots son acusados de haber desinflado los balones usados en la final de la Conferencia Americana para aprovecharse de mejores condiciones de manejo de los mismos en la climatología adversa.
«No alteré la pelota de ninguna manera», aseguró Brady de salida. «Todos intentan averiguar qué sucedió. Me sorprendió escuchar la noticia el lunes por la mañana».
«Sigo un proceso antes de cada partido en el que voy y tomo los balones que quiero. Lo que ocurrió el domingo es el mismo proceso que hago siempre.»
«Nunca haría nada para romper las reglas», aseguró. «Creo que siempre las he respetado».
Brady dijo que no notó diferencia entre los balones usados en la primera parte (presuntamente desinflados) y los usados en la segunda parte (reglamentarios). «Pensaba en la defensa, en la jugada, en lo que debo hacer, no en el agarre del balón».
Cuando se le preguntó como no notó la diferencia entre un balón legal (con la presión a 12.5 PSI) y otro dos por debajo de esa presión comento: «no tengo tiempo para prestar atención a eso durante un partido. No aprieto los balones, no forma parte de mi proceso. Lo tomo, siento las cuerdas, la piel, el tacto del balón. Es lo que busco. Nunca estrujo los balones, sólo miro el ‘grip'»
«Después de elegir los balones no vuelvo a prestarles mucha atención», afirmó.
Brady también aseguró que la NFL aún no ha contactado con el para tomarle declaración en el proceso de investigación que sigue en el caso.