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El partido de las estrellas de la NFL no volverá a Hawaii y recalará en Orlando (Florida) ya en su próxima edición de 2017.
En una rueda de prensa junto a Disney y ESPN la NFL anunció este acuerdo y que el encuentro recuperará el formato de AFC vs. NFC que no se aplicaba desde 2012.
En los últimos años la liga optó por una formato de «draft» en el que dos leyendas de la NFL iban eligiendo a los jugadores que formarían parte de sus equipos. En la última edición el «Team Irvin» se impuso con autoridad al Team Rice por 49-27.
«Estamos entusiasmados de re-imaginar la experiencia de la Pro Bowl tanto para fans como jugadores y celebrar el football a todos los niveles,» declaraba el comisionado Roger Goodell. «Colaborar con Disney y ESPN nos acerca a los mejores en entretenimiento para jovenes orientado a la familia. Tenemos muchas ganas de trabajar con la ciudad de Orlando y Florida Citrus Sports para crear una semana de celebración para los fans.»
Los jugadores que sean seleccionados para la Pro Bowl tendrán la oportunidad de llevar al evento a sus antiguos entrenadores de high school o Pop Warner y los que formen parte del equipo ganador ganaron una beca de la NFL Foundation para ayudar en el desarrollo de sus programas de high school.
En 2015, el partido se disputó en Arizona la semana previa a la Super Bowl, en la que fue la primera ocasión en décadas en que no se efectuó en el Aloha Stadium de Hawaii, sede habitual desde 1979.
Florida no había albergado la Pro Bowl desde el 2009, cuando se jugó en el Sun Life Stadium en Miami Gardens, donde Matt Schaub lideró a la AFC para ganar el partido 41-34.