Ya tenemos final en Italia. Los Milano Seamen perdieron la opción de luchar por mantener su corona tras caer ante los Rhinos en un precioso partido cargado de emoción. Los Bolzano Giants, tras una primera parte sensacional, siguen con su progresión y acceden a la final dejando en la cuneta a los Parma Panthers.
RHINOS 35 – SEAMEN 34
El derbi de Milán no defraudo a las expectativas. Cuatro touchdowns del italo-americano Nick Ricciarduilli, la sensacional actuación de Gabriele Arioli y defensa en el momento decisivo del partido salvó a los Rhinos (10-0) del acoso de unos campeones (5-5) que lucharon como gato panza arriba.
Tras un touchdown inicial de los locales y la respuesta inmediata de los visitantes, el partido entró en un toma y daca en el que ninguna de las ofensivas conseguía materializar sus acciones y en el que las defensas parecían tomar el control de la situación. Sólo a pocos minutos para el descanso conseguían de nuevo los Rhinos mover las cadenas y anotar un nuevo TD por medio de una corta carrera de Ricchiarduili en zona de gol por lo que ambos equipos se retiraron a los vestuarios con 14-7 en el marcador.
Tras el descanso todo cambió. El tercer cuarto fue una auténtica locura en la que unos y otros intercambiaron touchdowns. Pero la dinámica favorecía a los visitantes y al término de este periodo los Seamen habían conseguido devolver las tablas al partido dejando en el electrónico el 28-28 con el que se entró en el periodo decisivo.
Un espectacular «catch» de Arioli, unido a una falta personal de la defensa azul, dejaba el cuero en la yarda 25 de los Seamen. T.J. Pryor volvía a conectar con Arioli y el WR anotaba el touchdown que, tras la conversión del punto extra, ponía siete puntos arriba a los de naranja y negro. Ese punto extra sería devisivo porque en el consiguiente retorno de kickoff Danilo Bonaparte firmaba una espectacular carrera que terminaba en TD pero el snap del extrapoint no era bueno y los Seamen se quedaban a un punto de su rival.
No fue la única oportunidad que dejaron ir los de Paolo Mutti. En el siguiente drive de los Rhinos, Pryor forzaba un mal pase y el CB Emanuele Piloni dejaba caer una clamorosa intercepción que ya se cantaba en la grada y, poco después, tras forzar y recuperar un fumble con 1:40 en el reloj y plantarse ya en campo rival, era el QB Garret Safron el que perdía la pelota para dar por acabado el partido.
GIANTS 30 – PANTHERS 20
Los Bolzano Giants (5-5) cimentaron su triunfo en una gran primera parte en la que establecieron un 23-0 que ya puso las cosas muy cuesta arriba a los visitantes. Los anfitriones se adelantaron con un touchdown de Marco Podavitte y un field goal de Emil Guariento y luego fueron poco a poco aumentando las diferencias que llegaron a ser de 30-0 tras tres intercepciones retornadas para touchdown. Fue en ese momento cuando los Panthers (6-4) despertaron y consiguieron maquillar el marcador gracias a anotaciones Tommaso Finadri, Tommaso Monardi y Demetrius Wilson. A 2 minutos del final los parmesanos volvieron a recuperar la pelota pero otra intercepción sellaba definitivamente el pasaporte a la Italian Bowl para los Giants.