Wroclaw Panthers campeones de la IFAF Champions League

Derrotaron 40-37 a Milán Seamen y logran la primera corona europea para Polonia

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Wroclaw Panthers, nuevos reyes de la IFAF Champions League (Marcin Fijałkowski)

Los Wroclaw Panthers hicieron historia en el fútbol polaco al convertirse en el primer equipo de este país que gana una competición continental. Los Panthers se impusieron a los Milán Seamen por 40-37 y conquistaron la IFAF Champions League.

El conjunto italiano, que fue siempre a remolque en el marcador y llegó a tener 20 puntos de desventaja, nunca bajó los brazos y los asistentes al estadio de Wroclaw pudieron disfrutar de un gran partido de fútbol americano.

El quaterback E.J. white volvió a ser el hombre decisivo y con 6 pases de touchdown terminó siendo elegido MVP del encuentro. Pero los estiletes no tenían pasaporte norteamericano sino polaco. Los WR Tom Dziedzic (2 TD) y Patryk Matkowski (2 TD) fueron una pesadilla para los Seamen. El primero abrió el marcador en un acción de 79 yardas.

Con un pase de 25 yardas de Garrett Safron para Filippo Fiammenghi los italianos devolvieron las tablas al partido pero eso fue lo más cerca que consiguieron estar de su rival.

Tres pases de touchdown de White (uno para Matkowski y uno para cada uno de los hermanos Dziedzic) ampliaron las diferencias hasta el 27-7 y con un field goal de 46 yardas de Stefano Di Tunisi, ambos equipos se retiraron a los vestuarios con 27-10 para los anfitriones.

Tras la reanudación el equipo italiano puso toda la carne en el asador y con anotaciones de David Guthrie, Lorenzo Vezzoli y Fiammenghi -la primera de ellas tras el quinto pase de TD de White- apretaron el partido hasta el 34-31 con el que se entró en el cuarto definitivo.

Por desgracia para ellos, como ya demostraron en semifinales, el equipo polaco no entró en pánico, tomó el control de la situación, y con una recepción de 51 yardas de Markowski asestaba otro golpe a los Seamen.

Los milaneses no se rindieron y a cuatro minutos del final Safron conectaba de nuevo con Fiammenghi para que este anotara en una espectacular recepción de 80 yardas. Ahí se quedaron. Los locales supieron sufrir y conseguir el primer gran título para Polonia y por tanto el doblete para los Panthers que ya habían ganado la competición doméstica.

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