El wide receiver de los San Diego Chargers, Keenan Allen, se perderá el resto de la temporada tras romperse el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha el domingo en el partido de su equipo ante los Kansas City Chiefs.
Allen, de 24 años, pasa a ser incluidos en la lista de lesionados y el lugar que deja libre en la plantilla será usado para activar al defensive end Joey Bosa.
Además de romperse el ligamento, el jugador también sufrió un daño menor en el cartílago de su rodilla.
El receptor, que sumaba seis recepciones para 63 yardas antes de tener que salir en camilla, ya se perdió los últimos ocho partidos del año pasado por una lesión en un riñón tras una mala caída al hacer una atrapada.
El pasado mes de junio había firmado una extensión de contrato por cuatro años y más de 44 millones de dólares.