Ni las bajas temperaturas ni la nieve frenaron a cientos de miles de fans de los New England Patriots que salieron a las calles de Boston para presenciar el desfile triunfal de su equipo como vencedores de la Super Bowl.
Los Patriots, encabezados por su quarterback Tom Brady, pasearon el trofeo Vince Lombardi en un autobús sin techo y en los famosos «duck boat» de Boston, vehículos anfibios característicos de la ciudad.
Los Patriots derrotaron el pasado domingo a los Atlanta Falcons en la edición número LI de la Super Bowl tras protagonizar una remontada histórica, la mayor en la final de la NFL y la tercera mayor de todos los tiempos.
Los De New England iban perdiendo por 28-3 en el tercer cuarto pero consiguieron empatar el encuentro, forzar la prórroga y ganarlo en el tiempo extra.
Sin duda uno de los grandes protagonistas del desfile fue el tight end Rob Gronkowski. «Gronk» que no pudo disputar el partido por culpa de una lesión, no tuvo ningún reparo en quitarle la camiseta, beber cerveza y protagonizar algunos de los momentos más hilarantes de la fría mañana de Boston.
«Os dije que íbamos a traer esto (el Lombardi Trophy) a casa y lo tragimos a casa», comentaba Brady a la hora de tomar la palabra frente a los fans. «Este ha sido un gran equipo y vamos a disfrutar de esto. Dieron todo lo que tenían, ha sido duro, ha sido muy duro pero lo recordaremos durante toda la vida» exclamaba el líder de los Patriots.
FOTOS: Washington Post