Saltó la sorpresa en la gran final de la Liga Italiana de fútbol americano (IFL). Los Milan Seamen dieron la campanada y derrotaron a sus vecinos, los Milan Rhinos, por 37-29 para alzarse con el trofeo de campeones de la XXXVII Italian Bowl. Tercer título en las últimas cuatro temporadas para los Marineros.
El QB Luke Zahradka fue el MVP del partido tras despachar una gran actuación en la que dirigió magníficamente a los suyos.
El encuentro empezó con un safety para los Rhinos tras un mal snap y el WR norteamericano Reece Horn amplió las diferencias para los de Tony Addona con una atrapada de 44 yardas sin embargo, antes del final del primer cuarto, Nick Ricciardulli recortaba las diferencias (9-7).
Fue en el segundo periodo cuando los Seamen abrieron ya una ventaja importante, primero con la segunda anotación de Horn, esta vez en recepción de 33 yardas, y después en una acción de Danilo Bonaparte (carrera de 10 yardas). El siempre espectacular Gabriele Arioli, con un «catch» marca de la casa, mantuvo a los Rhinos en el partido y con 23-14 para los azules ambos equipos se retiraron a los vestuarios.
Pero tras la reanudación el control del partido siguió estando en manos de los Seamen y tras un magnífico drive Zahradka, en una acción de QB sneak, ratificaba ese dominio en electrónico de Vicenza.
Al inicio del último cuarto, en una de las pocas acciones en las que Ricciardulli consiguió romper una carrera en campo abierto, los de Chris Ault le pusieron emoción al partido pero nunca llegaron realmente a inquietar a su rival. Un intercambio de anotaciones, con un segundo sneak de Zahradka y otra recepción de Arioli dejó el marcador en el definitivo 37-29 con el que los Seamen se proclamaron campeones de Italia terminando en el proceso con la imbatibilidad liguera de los Rhinos.