En el anterior artículo vimos de forma muy resumida los sistemas zona, Wing-T y Run & Shoot. Si os parece interesante, hoy seguiremos con alguno más. Los elegidos serán los sistemas smashmouth, option y Air Raid.
Al igual que en el caso anterior, no será éste un artículo estilo menú de sidrería sino que será un menú degustación. Digo pues que no nos hartaremos a chorizo, morcilla, tortilla de bacalao, bacalao con pimientos, txuletón y postre como nos gusta en el Norte. Será más bien un menú degustación, de esos de mucho plato y poca comida. Probaremos un poco de cada cosa para encontrar cuál es nuestro sabor favorito.
SMASHMOUTH
Traducción de sacada del Collins Dictionary: “Estilo de juego, especialmente en el football americano, basado en fuerza y agresividad sobre habilidad y finura”. Pues eso, más claro agua.
Es más un estilo de juego que un conjunto de jugadas por tanto. Carreras directas, duras, con músculo en la OL y atletas en el backfield. Se trata de tomar orgullo en ser el más duro jugando. Golpear más fuerte que el rival, empujar más que él y caer sobre su espalda, nunca sobre la tuya. Un ejemplo claro, los Alabama Crimson Tide. Son muchos los RB de este programa que llegan a la NFL. También los OL que lo hacen, por algo será. Nick Saban ha hecho de conseguir músculo y dureza la piedra angular de su filosofía. Y lleva tiempo yéndole bien, muy bien de hecho. Desde que llegara en el 2007 ha conseguido disputar 14 Bowls y ganar 10. Yo firmaría esos resultados. Los de Alabama no son los únicos en seguir esta filosofía, otros equipos también lo buscan; LSU Tigers, Notre Dame Fighting Irish o Wisconsin Badgers son algunos que también tienen esta filosofía. Pero los de Alabama sí son los mejores en ello, por ello Saban, al igual que Bellichik en la NFL, tienen tantos admiradores como detractores.
En cuanto al juego en sí, tenemos claro que buscamos carreras directas del RB y dobles bloqueos en el POA1 con la OL. Dicho esto, un ejemplo claro de este estilo de juego sería el Gráfico 1 con la clásica Iso con personal 21.
No es una jugada elaborada. Ningún coordinador ofensivo será llamado gurú por lanzarla en el campo. No hace falta sin embargo nada de todo ello para que sea fructífera. Músculo, redaños y una nube de polvo para avanzar unas cuantas yardas.
Sobre el mismo ejemplo, con igual personal 21, podría cambiarse la asignación de bloqueos en el POA dejando al FB sobre el DE y llevando entonces al OT al segundo nivel directamente. Esta sería la Blast2. De nuevo, nada de virguerías, nariz contra nariz y a empujar.
Incluso, jugando con la alineación, podríamos llevar a un OL del backside a bloquear creando así una Power tan usada hoy en día en la NFL.
Acabamos de ver tres de los múltiples modos en que poder atacar de manera directa un gap. Sin artificios. Doble equipo en el POA, un bloqueador al segundo nivel y el RB que bajará los hombros al contacto para luchar por esa yarda extra.
Decía un entrenador bromeando que para correr la zona le bastaba con un RB que supiera leer y el abecedario. Así, pasaría del gap A al B o al C leyendo sus claves para buscar un pasillo por el que correr. Con este sistema no hace falta si quiera eso, basta con que tenga los arrestos de crearse su propio camino si no hay uno abierto.
El juego de pase, hasta hace poco, se basaba en las Play Action desde estas jugadas de fuerza. Hoy en día, los RPO también entran en juego haciendo la vida del defensa cada vez más difícil. Si te pillan sobre tus talones te sientan de culo de un bloqueo. Si atacas, el balón te pasa por encima.
Un estilo de juego muy especial que necesita igualmente de jugadores especiales para poder ser ejecutado con garantías.
OPTION
Decir option y venirnos a la mente las academias militares Army, Navy y Air Force además de Georgia Tech es todo uno. No son los únicos en hacerlo claro está, de hecho, los Carolina Panthers tienen varias de estas jugadas en su playbook, pero no es lo habitual verlo en NFL. Ya vimos lo difícil que es la vida de un QB teniendo que leer defensas y tomar decisiones en segundos antes de ser engullidos por agresivos defensas. Si encima les exigimos correr no les pedimos ya que sean superhombres, pedimos que sean semidioses. Un traje a medida para un personaje como Cam Newton imagino. Vaya Rose Bowl se cascó contra USC por cierto…
Por otro lado, tener un QB capaz de mover el balón por tierra iguala la partida. El football suele ser de 11 defensas contra 10 atacantes + 1 QB. Las cuentas salen favorables para la defensa que cuenta con esa ventaja para hacer blitz o bien para usar ese hombre extra en cobertura contra el pase. Si el QB también es un arma ofensiva, entonces son 11 contra 11. No hablamos de poner un RB a recibir el snap como en una wildcat, eso es una jugada, no un sistema. Hablamos de que el QB sea una amenaza real por tierra y por aire.
Analicemos un poco la clásica Triple Option. El nombre viene de que hay tres jugadores que pueden llevar el balón; QB, FB o RB. Desde aquí el inicio de la jugada… Bien, bien avezado lector, me gusta que hayas fruncido el ceño. Pueden ser esos tres, o no. ¿Por qué no puede ser un slot en motion quien haga el pitch? ¿Y un wing? Correcto, pueden darse ambas opciones. Y más claro. Así pues comparto contigo que la Triple Option es aquella jugada en la que hay realmente tres opciones; give, keep o pitch. A qué jugadores sea cada una será cosa tuya como entrenador.
Desarrollaré ahora la Midline Option como ejemplo de sistema. Como siempre diré que hay tantas options como entrenadores. Igual en tu equipo no se hace así pero es también consistente. Como el gato, no importa que sea blanco o pardo, lo que importa es que cace ratones. En este caso, lo importante es conseguir mover las cadenas.
La primera elección, el give, será la entrega al FB. El QB entregará el balón al FB si el número interior de la camiseta del jugador que sea su clave no ataca al corredor. Por lo general, será el DT en técnica 2 o 3. Si ve que el número interior de dicho DL cierra el gap, entonces el QB se quedará el balón. Esta segunda opción, que el QB mantenga la posesión del balón, se llama keep. Hay auténticos tratados que enseñan cómo debe colocar el QB sus pies, dónde debe colocar sus ojos, cómo debe correr tenga o no el balón, cómo debe realizar el give or pull con el FB o cuál es la altura óptima para el mesh. Pero eso es otra historia, y será contada en otro momento.
Sigamos con el desarrollo de esta jugada. Supongamos que el DT ataca al FB placándolo en la LOS pero el QB ha leído correctamente el movimiento y sigue con el balón entre sus manos. Ahora toca el turno de la segunda lectura. Si hay una una segunda lectura, sabemos por tanto que habrá un segundo jugador sin bloquear en el playside. Dependiendo de muchas variables como por ejemplo agresividad o capacidad atlética de los distintos jugadores defensivos, el coordinador ofensivo indicará el defensivo que se convertirá en la clave de lectura. La segunda lectura podrá ser pues un DE (Gráfico 4), un LB (Gráfico 5) o incluso un safety y, dependiendo de lo que haga este jugador, será keep del QB o pitch.
Como se ve, dejar dos jugadores defensivos sin bloquear implica que tendremos más manos disponibles para bloquear al resto. La tendencia natural defensiva por tanto será acercar más jugadores al box y ser más agresivos. Además, el backfield ofensivo no está anclado en una formación. El FB puede estar decantado a un lado o a otro, el pitch puede hacerse a un RB o a un Wing en motion o incluso al slot. Cada defensivo por tanto está centrado en atacar sus claves ofensivas para evitar crear espacios que sean usados por el ataque para correr. Leerá y cerrará lo más rápido posible el espacio con su asignación.
Será entonces cuando un brillo especial asome a la mirada del coordinador ofensivo. Ese será el momento escogido para lanzar el balón. Una vez que los jugadores defensivos están concentrados en parar la carrera, golpeados en cada jugada por una OL agresiva y a la que gusta cortar, cuando a los LB les han llegado bloqueos de la OL, del backfield e incluso ocasionales crack de los WR, será entonces cuando el balón volará sobre sus cabezas. ¿Sabíais que las academias militares son de los equipos que más yardas consiguen tras una recepción? Ahora sabemos la razón.
Todo esto está muy bien pero, ¿y la speed option? ¿Y qué hay de la read option? Pues que todo eso, amigo mío, es otra historia y merecerá ser contada en otro momento.
AIR RAID
Esta filosofía es en parte culpable de los resultados más propios de baloncesto que de football que pueden verse últimamente. Se trata resumiéndolo mucho de poner a una partida de atletas olímpicos a correr rutas y que un QB con un cañón por brazo les pase protegido por unas moles con patas.
Simplificando al máximo el playbook con apenas un puñado de patrones de rutas, el coordinador ofensivo trata de sacar ventaja de las debilidades propias de cada defensa. Todos los coordinadores de este sistema se jactan de poder instalar el paquete de juego aéreo en, literalmente, dos días. El resto serán repeticiones ad infinitum.
Tomemos uno de sus patrones más típicos en Red Zone3, el Shallow, y analicemos lo que hacen (Gráfico 6). En esa situación de campo, esperamos una defensa agresiva con blitz y por tanto coberturas al hombre. Tanto X como Y se cruzarán en sus rutas ocupándose Y de dar la profundidad al corte y X procurará pegarse a él lo máximo posible. Insisto en que se busca un corte de rutas, no estamos hablando de una de esas pick routes4 tan de moda donde un receptor busca el contacto con un defensivo. Esperando como decimos coberturas personales, X o Y o ambos conseguirán un par de yardas de ventaja sobre sus defensores en medio del tráfico. Esas yardas les convertirán en objetivo claro para el QB.
Bravo, magnífico, la explicación ha quedado digna de video tutorial en Youtube. Receptor abierto, pase completo y alegría. Explicando la jugada sobre lo verde, tu QB se visualiza lanzando el balón y tus receptores haciendo la ruta.
Ahora viene cuando tu jugador preguntón, ese que hay en todos los equipos y al que bautizaremos como Madden, levanta la mano.
“Pero, ¿y si en lugar de ser cobertura personal es zonal?” Siempre hay uno que busca las cosquillas al entrenador, en todos los equipos lo hay. Bueno, esa pregunta si tienes un poco de imaginación queda resuelta. Si la cobertura no es personal sino zonal, a un 80% de posibilidades el FB estará libre al flat del lado fuerte. Pase de 3 yardas y luego lo que le den las piernas.
“Ya bueno… ¿pero y si hay single deep?” Por supuesto no puede estar callado, siempre quiere la última palabra. Pues para eso tenemos el post del X que leerá al FS. Si éste cae al cruce de rutas frente a él, pase a su espalda. Si se queda en zona, un skinny post y pase al hombro externo de X.
“¿Y si el SS lee la jugada y apoya al corte de X del lado contrario en una robber?” Como digo, el sabelotodo no puede callarse. Pues en ese caso mi querido padawan, cambiamos no el patrón sino las responsabilidades y tenemos un TD. Un pequeño motion de Z que dará lectura al QB del tipo de cobertura zonal o personal, y, dependiendo de si es una u otra, una ruta corner para Y a la espalda del SS que terminará en TD (Gráfico 7).
“¿Y si sacan el paquete Nickel y alinean un jugador rápido al lado fuerte y así se protegen de la salida del FB?” No sé vosotros, pero yo ya he empezado a cogerle ojeriza al incontinente verbal este. Pues en ese caso movemos nosotros al RB al slot, mandamos una Wheel y vemos sudar al LB que le tenga que cubrir (Gráfico 8).
A estas alturas nuestro Madden se habrá dado por satisfecho con su minuto de gloria. Lo malo es que ahora el QB y los receptores tendrán un lío mental semejante a un nudo Gordiano.
Todo lo visto es únicamente sobre el patrón Shallow. Nos quedarían los Curl, Corner, Smash… pero eso es otra historia, y será contada en otro momento.
Como dijimos sobre la Run&Shoot, es tanto el tiempo que debe emplearse en conseguir tener a QB, backfield y receptores en sintonía que no queda mucho tiempo para la carrera. Este sistema usará un par de jugadas para mover el balón por tierra, una draw para que el QB corra cuando no haya defensivos en el box y con eso será suficiente.
Con estos dos artículos mi objetivo era dar unas pinceladas sobre algunos de los diversos sistemas ofensivos existentes. Enfatizo esa palabra, sistemas. Miedo me dan aquellos que, animados al ver una jugada en Youtube o por tener un playbook de un equipo NCAA que le ha pasado su primo que vive en USA, calcan la jugada para ellos mismos convirtiendo su playbook en un compendio de jugadas sueltas sin nexo común.
Un entrenador, no me canso de repetirlo, ajustará el playbook a su personal. Aquí no hay propiedad conmutativa y el orden de los factores es importante. 1º Personal, 2º Playbook. Y todo ataque necesita un sistema para ser coherente.
Así, preparados, se podrá afrontar cualquier enemigo que se nos ponga delante y poder decir, al igual que el maestre don Francisco Sarmiento cuando se vio con sus 3.500 soldados rodeado por 40.000 turcos aquello de “Que vengan cuando quieran” (Cuña publicitaria, si queréis más información al respecto, os recomiendo este libro)
¡Ánimo coaches!
NOTAS:
- POA recordemos que era Point Of Attack, o dónde cruzará el balón la línea de scrimmeage.
- Llamo blast al intercambio FB-DE y OT-LB, quizás otros entrenadores lo llamen de otro modo. Ya vimos que en zona por ejemplo se le llama wham al H bloqueando al lado contrario a la zona.
- Red Zone son las 20 últimas yardas del campo hasta la endzone rival.
- Las pick routes son usadas por las ofensivas sacando ventaja de la reglamentación. Un WR buscará un aclarado para su compañero no ya con su ruta, si no llegando a bloquear al defensivo. ¿Cómo consigue que no sea falta de ataque? Pues buscando que el defensor sea el que primero contacta con él, una vez hay contacto defensivo, puede haber ofensivo. Chiefs y Patriots son maestros en estas lides.