Muchos años después, no frente al pelotón de fusilamiento sino ante la pantalla de mi hachepé, había de recordar aquella tarde remota en que me contaron cómo empezó esta franela del fútbol americano en España.
Novembreaba en casa, aburrido, cabreado, sancionado por esa carencia de filtro congénita, mezcla de inquietud y estupidez, entre lo que pienso y lo que digo. Una simple búsqueda casual en Google, una mirada a unos rostros del pasado que no deberían estar ahí. Y una enajenación en Howard Carter al entrar en el Valle de los Reyes a la cámara mortuoria del Rey Tut.
Este recorte de almanaque propio de una abuela de Toledo, provincia de Ohio, aparecía en un tablón de internet; inocentemente asociada a la Moraleja, para los no mesetarios una zona residencial del norte de Madrid. Bajo la imagen, unos cuantos americanos nostálgicos dejaban mensajes saludando a sus antiguos vecinos y recordando la época, más feliz y sobretodo en la que ellos eran más jóvenes, cuando vivían en la urbanización “The Royal Oaks”, hogaño El Encinar de los Reyes.
La fotografía en blanco y negro, la localización, los cascos, no cuadraban con la cronología de la historia del fútbol americano en España que, en mayor o menor medida todos conocemos. Una tesela de difícil encaje en un mosaico que creía completo. La imagen era claramente anterior a esa primigenia reunión de bar en diciembre del 87, cuando Pere Moliner, Ramón Ventura y Alfonso Genchi fundaron Dracs en Badalona.
Aturdido, con esa sensación de incertidumbre que acompaña cualquier descubrimiento inesperado. Pero decidido a tirar del hilo. Así principió una modesta investigación para aclarar cómo había sido el fútbol americano en España en aquellas décadas. ¿De dónde había salido aquel equipo? ¿Quién lo componía? Y sobre todo, ¿contra quién jugaba?
EL PACTO DE MADRID
En la delirante sátira de Berlanga, los habitantes de Villar del Río quedaban desamparados con el paso a toda velocidad del convoy de los americanos por las calles de Colmenar Viejo. No dejaban tras de sí los anhelados aeroplanos de chorro libre, ni rascacielos, en su camino hacia el Palacio de Santa Cruz, en Madrid.
En palacio les aguardaba el Ministro de Asuntos Exteriores del Régimen Alberto Martín Artajo, para escenificar el primer movimiento aperturista desde el final de la Guerra Civil. El 26 de septiembre de 1953 firmaba junto al embajador de Estados Unidos James Clement Dunn tres convenios que regulaban, entre otros temas que no nos ocupan, la construcción de las bases americanas de Madrid (Torrejón), Sevilla (Morón), Zaragoza y Rota.
Como parte de las dotaciones de estas bases, el Departamento de Defensa de Estados Unidos proveyó a los militares estacionados con colegios e institutos. La especial relevancia del deporte en el sistema educativo estadunidense hizo el resto.
Irónicamente el fútbol americano hacía su entrada asociado a instituciones educativas, tal y como sucedió en la costa este de Estados Unidos casi un siglo antes.
EL PRIMER PARTIDO
Según aparece recogido en los anuarios del Madrid High School (MHS) a los que he tenido acceso, podemos ubicar el primer partido de flag football en España en el año 1956. Durante aquel curso, poco después de la apertura de MHS, el Coach Joseph E. Blackstead hizo realidad su empeño personal de introducir el fútbol americano entre los deportes practicados en el instituto, como ya había hecho en su anterior destino en la base alemana de Nürnberg.
Blackstead organizó una competición interna en MHS, disputada por cuatro equipos formados por los estudiantes. No he sido capaz de encontrar demasiada información gráfica ni testimonios de esta época inicial. Sin embargo, sí conocemos los nombres de los que podemos afirmar que fueron los primeros equipos de flag en España: Sabres, Bloodhounds, Mustangs y Dragons. De esta época ha quedado también recogida la tradición anual de disputar un partido Faculty-Staff, que enfrentaba a los alumnos con los profesores del instituto.
ARRANCA LA COMPETICIÓN: LA DÉCADA DE 1960
Encontramos los primeros documentos gráficos que prueban la existencia de una liga de fútbol americano tackle en España en 1962. Para entonces, los equipos que competían representando al MHS en otros deportes ya eran conocidos como los Knights. Esta página del anuario de 1958 recoge una competición de baloncesto entre el instituto y nada menos que los chicos del Ramiro de Maeztu, así como el colegio Maravillas y el Buen Consejo.
Como atestigua este documento, los institutos americanos nunca tuvieron objeción alguna para enfrentarse a colegios españoles en otros deportes. La competición en nuestro deporte se estructuró entre las cuatro bases de España, pero fue simplemente la ausencia de competencia local lo que impulsó a los institutos de las bases a competir entre ellas, quedando al margen del desarrollo del deporte fuera de estas instituciones.
Es razonable afirmar que este factor ha sido el principal diferenciador del desarrollo de dos deportes en nuestro país en una situación actual tan distinta como el baloncesto y el fútbol americano. Y también que la costumbre establecida durante años de competir entre bases, les mantuvo al margen de los equipos que surgieron a finales de los ochenta en otros puntos de España.
Los equipos participantes desde 1962 eran los MHS Knights, Sevilla Toros, Zaragoza Zebras y Rota Admirals. La temporada regular constaba de 6 partidos, a ida y vuelta, tras los que el ganador accedía a un sistema de play-off que les enfrentaba con los equipos de otros colegios asociados a bases de Europa.
La década de los 60 estuvo dominada con autoridad los los Knights. Los equipos de Madrid disfrutaron de un éxito continuado, ganando 6 títulos (62, 63, 64, 65, 66 ex aequo con Rota y 67) antes de la separación en dos equipos.
EL FOOTBALL EN ESPAÑA EN LOS 70
La estructura de la competición no varió hasta 1971, cuando la reconversión de la base de Sevilla (Morón) conllevó el cierre del Sevilla High School. Muchas de las familias de la base fueron reubicadas a Zaragoza y Madrid. De hecho, esta reubicación también conllevó un cambio de nombre en el equipo de Zaragoza, que adoptaron al toro procedente de Sevilla como mascota propia. En 1972, con el incremento de estudiantes, MHS se vio obligado a formar dos equipos, los Base Knights y los Royal Oaks Knights, dividiendo a los jugadores según residiesen en la propia base de Torrejón o en la urbanización de Royal Oaks.
La historia de la competición en esta época quedó bien recogida en los anuarios de los respectivos institutos, lo que nos da una imagen bastante clara de los equipos que campeonaron, sus jugadores más destacados, además de muchas fotografías que hasta ahora parecía imposible que se hubiese realizado en España en esos años.
Así, los Royal Oaks Knights se hicieron con los títulos nacionales en 72, 75, 76 y 79 hasta la reunificación de los equipos en 1980, que perduraría hasta el 89. Rota campeonó en el 73, y la base hizo lo propio en el 74, en una época difícil para los de Torrejón que quedó plasmada en la serie de novelas “The World”, de Paul May, que la vivió en primera persona como estudiante.
LA DÉCADA DE LOS 80 Y EL REPLIEGUE
La reducción de personal en la base de Torrejón en Madrid conllevó la reunificación de los dos equipos de la capital. De esta manera, la liga quedó reducida en casi todas sus ediciones de la década a 3 equipos que disputaban una temporada regular de tan sólo 4 partidos.
Como apuntamos anteriormente, a pesar de la aparición en el último tramo de la década de nuevos equipos de fútbol americano como Osos o Panteras en Madrid, no hemos encontrado ningún documento que recoja ninguna actividad conjunta entre ellos y el MHS, que para entonces ya llevaba casi 30 años jugando al fútbol americano de manera continuada.
En el caso de Zaragoza sin embargo, sí parece que la Base Aérea estuvo implicada en la aparición de Lions en 1989. En cualquier caso, el tiempo de coexistencia de los equipos fue demasiado breve como para que se produjese cualquier intercambio significativo.
EL EQUIPO MÁS ANTIGUO DE ESPAÑA
El acceso a la información sobre el fútbol americano en España mucho antes de que estuviese datada su existencia ayuda sin duda a completar la historia de nuestro deporte. Sin embargo, las implicaciones de este hallazgo, y de la posterior modesta investigación, no se interrumpen en 1992.
A la vista de todo lo aportado, podemos afirmar con casi completa seguridad que el equipo más antiguo de España es andaluz, y no es otro que los Admirals del instituto David G. Farragut en la base naval de Rota, que lleva jugando al fútbol americano de forma ininterrumpida la friolera de 63 años.
En la actualidad, con la reestructuración del formato la liga en grupos transnacionales, los Admirals están encuadrados en la Division III de DODEA – Europe, jugando en el formato de 9 jugadores contra Bamberg, Menwith hill, Alconbury, Sigonella y Bruselas.
CAMPEONATOS NACIONALES: UNA HISTORIA INCOMPLETA
A pesar de ser una lista incompleta, hemos intentado recopilar una lista de los equipos que se alzaron con el título de campeones de España, desde 1961, año en el que tenemos constancia de que arrancó la competición, hasta que el progresivo repliegue de las bases de Torrejón y Zaragoza en 1992 hizo necesaria la reubicación de Rota en otra conferencia.
Cada cierto tiempo, alguno de los graduados de estos institutos sube desde los lugares más diversos una copia de su anuario escaneado. Esta será, en cuanto no se consiga acceder a un registro centralizado de DODEA (Department of Defense Education Activity), la única manera de conseguir completar el listado.
Año | Campeón | Año | Campeón |
1961 | – | 1976 | Royal Oaks Knights |
1962 | Madrid Knights | 1977 | – |
1963 | Madrid Knights | 1978 | Rota Admirals? |
1964 | Madrid Knights | 1979 | Royal Oaks Knights |
1965 | Madrid Knights | 1980 | Madrid Knights (merged) |
1966 | Madrid Knights / Rota Admirals | 1981 | – |
1967 | Madrid Knights | 1982 | – |
1968 | – | 1983 | – |
1969 | – | 1984 | Zaragoza Toros |
1970 | – | 1985 | – |
1971 | – | 1986 | – |
1972 | Royal Oaks Knights | 1987 | – |
1973 | Rota Admirals | 1988 | – |
1974 | Torrejon Base Knights | 1989 | White Knights (Torrejon Base) |
1975 | Royal Oaks Knights | 1990 | Zaragoza Toros |
UN LEGADO INTRANSITIVO
Hallar de manera inesperada tres décadas más de historia del fútbol americano en España es sin duda algo de lo que todo el deporte debiera sentirse orgulloso en su conjunto. Ya lo señalaba Bernardo de Chartres; vemos más lejos no por la agudeza de nuestra vista ni por la altura de nuestro cuerpo, sino porque estamos subidos a hombros de gigantes.
Pero, ¿qué sucede cuando no es así? Si este tramo de la historia de nuestro deporte nos resultaba completamente desconocido hasta la actualidad, se debe en primer término a un hecho incontestable: no tuvo ningún impacto en el desarrollo del fútbol americano en España. En lugar de asistir a un fenómeno de implantación y difusión del deporte con las bases americanas y su población asociada como red, tres décadas de práctica deportiva transcurrieron, concluyeron y fueron olvidadas con la misma alarmante indiferencia.
Hemos oído repetir hasta la saciedad que si España no estaba al nivel, en términos generales, de Alemania o Italia, se debía a que allí las bases militares americanas habían establecido el deporte mucho antes de que en Moliner, Ventura y Genchi se fuesen de cañas.
Ante estos nuevos datos, que descartan la teoría de nuestro poco bagaje histórico, cabe preguntarse ¿Cuál es el hecho diferencial que lastra al deporte en España? Y francamente, no sé qué cabe responderse.