Némesis en The Valley

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VENDABAL HORNED FROG

La noche en Fort Worth para los Cougars no pudo comenzar peor cuando Max Hall, presionado ferozmente por el end backup Clarence Leatch, sufría un sack sobre la yarda 41 de BYU en el primer drive de todo el partido, perdiendo la posesión del balón con un fumble recuperado por el end senior Matt Panfil. Inmediatamente, el QB Andy Dalton (12 de 19 para 170 yardas y 2 TDs) ejecutaba un fake con un PA sobre Brown, para conectar en la endzone con el WR sophomore Jimmy Young (4 recepciones para 78 yardas y 1 TDs) en un TD de 25 yardas. En la siguiente posesión, BYU sufría un contundente tres-y-fuera, sin embargo, se aprovechaban de un ilegal-touching en el punt para recuperar la posesión en la 37 de los ‘Frogs, pero ni con este tipo de oportunidades fueron capaces los Cougars de alcanzar la redzone de TCU y los mormones no conseguían superar un 4th down debido a la excepcional jugada del safety Tejay Johnson contendiendo en pulgadas la carrera de Harvey Unga (14 carreras para 53 yardas y 1 TD). Este turnover-on-downs lo aprovechaba TCU con un QB-draw del WR all-around Jeremy Kerley (es utilizado en distintos paquetes alineado como QB puro), quien se aprovechaba de la laguna defensiva de BYU debido a los 5 wide-receivers de TCU sobre el campo y de la caída en cobertura del SLB junior Matt Bauman, anotando un TD de carrera de 16 yardas.

La defensa de los Horned Frogs (la mejor de todo el país) simplemente dominó el partido a su antojo, y una de las grandes estrellas de la noche, el CB junior Nick Sanders (2 INTs), interceptaba a Max Hall (22 de 42 para 274 yardas y 2 INTs) devolviendo de nuevo la posesión a TCU, aunque los Cougars pudieron incluso cambiar el momentum del partido con una potencial intercepción del end junior Jan Jorgensen en su propia yarda 3. Andy Dalton (se perdió los dos anteriores duelos debido a una lesión de rodilla), en un fake de option, ejecutaba un shovel pass sobre el TE senior Shae Reagan, sin embargo, Jorgensen leía las intenciones del QB sophomore e interceptaba momentáneamente el lanzamiento. El booth review, sin embargo, descubría que el football golpearía el suelo y por lo tanto, los Horned Frogs se tenían que conformar con un FG de 21 yardas del PK Ross Evans. El vendaval de la universidad de Texas Christian en la primera parte se cerraría con un fade route en la esquina de la endzone del WR senior Walter Bryant (4 recepciones para 44 yardas y 1 TD), quien situando un pie sobre la endzone y en un sensacional one-handed-catch, recogía el lanzamiento de 12 yardas de Andy Dalton. Hall solamente había sufrido dos sacks en toda la temporada, sin embargo, la expeditiva defensa de TCU, únicamente en la primera parte, ya había conseguido cuatro (6 en toda la noche), además de anular su juego terrestre a 1 yarda negativa (297 en total de ataque), con la consiguiente desigualdad de primeros downs (17-9 a favor de los ‘Frogs y 19-29 al final de la noche).

En la segunda parte, la pesadilla de BYU en Fort Worth continuaría, en el momento que Aaron Brown retornaba 63 yardas el kickoff hasta la 48 de los Cougars, aunque TCU tenía que conformarse de nuevo con un FG de 31 yardas del PK freshman Ross Evans. BYU, en la siguiente posesión, y por primera vez, conseguiría hilvanar un drive consistente y serio, basado en el juego terrestre de un olvidado hasta entonces Harvey Unga, hasta llegar a la yarda 2 de los ‘Frogs, donde Hall con one read n’ go, anotaba en 4th down en un sencillo scramble. La alegría les duraría muy poco a los mormones y. en poco más de 4 minutos, el RB junior Joseph Turner contestaba anotando un TD de carrera de 5 yardas a falta de 16 segundos para finalizar el tercer cuarto. (Resultado: 7-32)

Con esta decepcionante derrota, BYU prácticamente ha dicho adiós al sueño del BCS (y se complica mucho en su propia conferencia, la MT West), en cambio, TCU cortaría la racha de los Cougars de 16 victorias consecutivas (la más larga actualmente en college). Paradójicamente, los Horned Frogs se tomaron la revancha de hace dos años, cuando BYU rompió la racha de 13 partidos de TCU (la más larga del país entonces) en su último partido en Fort Worth de aquel año.

MORENO Y AJ GREEN MARCARON LA DIFERENCIA

El back súper estrella Knowshon Moreno conseguiría 172 yardas terrestres, sus guarismos más altos de la presente temporada, incluyendo un TD de carrera de 11 yardas que tranquilizaría a los seguidores de los Dawgs, mientras que el WR true freshman AJ Green (7 recepciones para 132 yardas y 1 TD) anotaría un lanzamiento de 17 yardas y Mohamed Massaquoi ampliaría la diferencia a 14 puntos en el segundo cuarto con otra recepción de 9 yardas a lanzamiento del QB junior Matthew Stafford (13 de 23 para 194 yardas, 2 TDs y 2 INTs). No obstante, Vanderbilt tuvo sus oportunidades y pelearía cara a cara con UGA (hasta el FG de 39 yardas del PK Blair Walsh) gracias a las dos recepciones de 18 (tras dos interferencias del equipo más penalizado del país) y de 8 yardas para TD del WR Jamie Graham (4 recepciones para 36 yardas y 2 TDs), sin embargo, en el último cuarto, la defensa de los Bulldogs marcaría la diferencia, destacando un tackle en campo abierto del CB Asher Allen sobre Graham en 4th down y 4 yardas en la 26 de Vandy con 2:08 sobre el reloj. La D de los Dawgs contendría a solamente 245 yardas totales al ataque de los Commodores, quienes aún se encuentra a una victoria de su objetivo, conseguir ser elegible para las bowls por primera vez desde 1982. No obstante, el propio Matthew Stafford reconocería las dificultades de un ataque que carece de la explosividad esperada: “No fue muy bonito, pero fuimos capaces de sacarlo adelante y hacer nuestros deberes”. (Resultado: 14-24)

LOS BUCKEYES DESTRUYEN A MSU

El QB true freshman Terrelle Pryor, posiblemente uno de los recruits más celebres de toda la historia en college football, está consiguiendo desbordar las expectativas en Columbus y con un fake de handoff sobre su runningback, mantenía la posesión para batir al CB Chris Rucker doblando la esquina en un TD terrestre de 18 yardas. A continuación, el CB Donald Washington forzaba un fumble sobre el WR Keshawn Martin, que el mismo recuperaba retornándolo 44 yardas hasta la 17 de MSU, donde Pryor, de nuevo, evitando con sus pies a un tackle, conseguía encontrar abierto en la endzone al WR senior Brian Robiskie en un TD de recepción de 7 yardas. Pryor, a continuación, conectaría en un lanzamiento de 56 yardas con el wide-out Brian Hartline y Chris Wells remataba el big-play con una carrera corta de 1 yarda. En el segundo cuarto, Pryor ejecutaba excelentemente un QB-draw sobre Chris Wells (31 carreras para 140 yardas y 2 TDs), quien con su velocidad (y stiff-arm incluido) anotaba placidamente un TD de carrera de 12 yardas, y los Buckeyes conseguían construir una ventaja de 4 TDs al final de la primera parte. Y es que Pryor ya se lo había avisado al propio Jim Tressel, como el propio coach confesaría al final del partido; “Paró en mi oficina justo antes de que partiésemos el viernes y me dijo ‘Si no muevo el balón en el campo, debería mandarme al banquillo’. Simplemente esa es su forma de ser”.

Antes de dejar el partido sentenciado en la primera parte, Terrelle Pryor (7 de 11 para 116 yardas y 1 TD, además de 12 carreras para 72 yardas y 1 TD) había mostrado gran compostura y un excepcional touch en cada uno de sus lanzamientos, mientras que en el juego terrestre, correría con potencia y velocidad, utilizando incluso su stiff-arm para enterrar a varios defensores sobre el campo. Ohio State forzaría 5 turnovers sobre los Spartans del coach Mark Dantonio, contendrían al RB pretendiente al Heisman Javon Ringer a únicamente 67 yardas de carrera (su marca más baja de la temporada) y conseguirían 3 sacks, en una tarde donde la defensa de los Buckeyes maniataría completamente al ataque de MSU, permitiendo tan sólo un TD de recepción de 3 yardas del TE Charlie Grant en el tercer cuarto. El end Thaddeus Gibson y el Will LB Jermale Hines retornarían fumbles para TD de 69 y 48 yardas respectivamente en el último cuarto, para subir al marcador 45 puntos, la marca más alta de la temporada para Ohio State, batiendo a Michigan State por duodécima vez en los últimos 14 duelos de estas series. (Resultado: 45-7)

‘BAMA CASI SE METE EN UN LIO

El end súper estrella Greg Hardy conseguiría un sack sobre John Parker Wilson en 3th down forzando el tres-y-fuera en el primer drive de Alabama de todo el partido y más tarde, los Crimson Tide serían incapaces de aprovechar un espectacular big-play de 40 yardas del WR true-freshman Julio Jones. Este desconcierto de los Tide durante los primeros compases, lo aprovechaba el highly-touted recruit Enrique Davis (rechazó a Auburn tras salir este año de la academia militar de Hargrave) para escaparse con un big-play de carrera de 62 yardas hasta la 8 de UA (la acción más larga permitida por la D de ‘Bama hasta la fecha), sin embargo, Jevan Snead (16 de 31 para 192 yardas, 1 TD y 1 INT), presionando ferozmente por el frente defensivo de ‘Bama, era incapaz de superar una situación de goal-line en 17 yardas y Ole Miss se veía forzada a transformar un FG de 25 yardas del PK Joshua Shene. No obstante, con estos tres puntos de ventaja, los Rebels tienen el privilegio de ser el primer equipo en ponerse por delante de Alabama en toda la temporada. La alegría les duraría demasiado poco; el espacio suficiente (apenas pulgadas) sobre su hombro derecho que necesitaría Julio Jones para encontrarse abierto y recibir un lanzamiento de 25 yardas de Wilson, quien más tarde conectaría con un lanzamiento perfecto in-stride en la endzone con el WR freshman Marquis Maze, en un TD de recepción de 26 yardas. El LB walk-on Eryk Anders provocaba un fumble sobre Snead deteniendo el avance de los Rebels y Wilson conseguía encontrar en tercer down, junto a la banda izquierda, (por primera vez en toda la temporada) al TE true freshman Brad Smelley (hermano del QB de los Gamecocks, Chris Smelley), mientras que ‘Bama, dentro de la redzone de Ole Miss, situaba todas las libras y el poder posible para que Coffee e Ingram acercasen el drive terrestremente hasta la 5 de los Rebels. En 2nd down y goal, Saban sacaba incluso a Montaña Cody (quien se lesionaría en la rodilla en el tercer cuarto y estará fuera 2 semanas) como FB puro en el mismo lado del LT Andre Smith, y el resultado fue evidente, con Cody, como lead-blocker, moviendo contundentemente la pila para adelante varias yardas y permitiendo que el RB true freshman Mark Ingram (17 carreras para 73 yardas y 1 TD) anotase con sencillez un TD de carrera de 2 yardas.

Jevan Snead sería interceptado por el safety Justin Woodall y ‘Bama aprovechaba el turnover con un FG de 41 yardas del PK Leigh Tiffin y más tarde, el WR all-around Dexter McCluster, como QB en shotgun bajo la clásica WildRebel del coach Nutt, se veía interceptado por el otro safety, Rashad Johnson, en un call pobre de Ole Miss, ya que la secundaria de los Tide se encontraba en alerta clara de pase. Los Crimson Tide, de nuevo, volvían a aprovechar el turnover en el momento que John Parker Wilson (16 de 25 para 219 yardas, 2 TDs y 1 INT) ejecutaba un flea-flicker con Coffee para encontrar en la endzone, con un touch sensacional por encima de los defensive-backs, al WR junior Mike McCoy, en un TD de recepción de 30 yardas.

Pero en la segunda parte, una semana más, ‘Bama descendería peligrosamente su intensidad y Ole Miss dominaría completamente el partido. En el primer drive de toda la segunda mitad, Ole Miss “parecía” conformarse con un FG sobre la yarda 9 de UA, sin embargo, el holder de los Rebels realizaba un fake sobre el kickoff con un toss-play sobre el FB Jason Cook, quien pillaba sorprendentemente despistada a la defensa de los Tide, aunque lo más curioso fue comprobar en la repetición aérea que la defensa realmente se encontraba alineada en alerta de fake. En los instantes finales del tercer cuarto, Jevan Snead y el RB true freshman Enrique Davis (11 carreras para 70 yardas) lideraban un drive de 9 jugadas y 60 yardas hasta la 24 de Alabama, sin embargo, en 4th down y 1 yarda, el LB true freshman Don’ta Hightower con un feroz placaje detenía en pulgadas la carrera straight-ahead de Davis, y Nick Saban estallaba de alegría en la banda en un instante que parecía definitivo en las posibilidades de Ole Miss, sin embargo, los Rebels aún tendrían más oportunidades.

Tras intercambiarse fumbles en el comienzo del último cuarto, Snead encontraba en un lanzamiento de 17 yardas en la endzone junto al pylon al WR junior Shay Hodge. En los instantes finales, Alabama sería incapaz de superar la yarda 50, y se veía obligada a alejar la posesión a falta de 3:30 con Ole Miss dentro de su propia yarda 24. Snead conseguiría yardas positivas en las primeras jugadas ofensivas a pesar de la terrible presión del front-seven de Alabama, incluyendo un lanzamiento bloqueado sobre la línea de scrimmage por el end senior Bobby Greenwood que caería mansamente sobre las manos del QB natural de Texas, sin embargo, el end del lado contrario, Brandon Deaderick conseguía finalmente el sack antes de que Snead, ante la feroz presión, sería incapaz de conectar con McCluster en 4th down. Con esta victoria, Saban consigue su primer 7-0 como head coach en toda su carrera. (Resultado: 20-24)

BRADFORD Y SUS SOONERS DESTROZAN RECORDS

En un encuentro con 1.165 yardas de ataque en total, el QB sophomore Sam Bradford establecería un record en Oklahoma con 468 yardas aéreas, borrando el nombre de Josh Heupel del libro de los records (además de 3 pases para TD), y a pesar de perder en el primer cuarto al estelar WR senior Manuel Johnson (quien sufrió una lesión en su brazo). El RB DeMarco Murray volvería a sentirse productivo con 2 TDs y 83 yardas de carrera, donde su último de 7 yardas sería definitivo para la victoria Boomer Sooner, mientras que el WR senior Juaquin Iglesias se apuntaría 12 recepciones para 191 yardas, ambos también records de la universidad. El WR de Kansas, Dezmon Briscoe, cogería 12 pases para 269 yardas, anotando en lanzamientos de 69 y 17 yardas, pero no fue suficiente para que el ataque de los Jayhawks fuese capaz de mantener el alto ritmo ofensivo de los Sooners. El partido estuvo disputado, con incluso un ajustado 24-31 en los últimos instantes del último cuarto, sin embargo, OU anotaría 14 puntos consecutivos para ahuyentar cualquier tipo de duda. Oklahoma convirtió 7 de 16 intentos de tercer down mientras que KU solamente superaría 2 de 12 oportunidades, y es que el QB Todd Reesing sufriría constantemente la presión del front-four de Oklahoma liderada por el DT Gerarld McCoy y el end Auston English, siendo al final una de las balanzas que decantaría el partido (los Sooners forzaron tres sacks en los siguientes cuatro drives de KU tras el 24-31 forzando 4 punts) y el DC Brent Venables recolocaría con éxito (en términos de liderazgo) al safety Nic Harris en el puesto de MLB del lesionado Ryan Reynolds. La otra clave fue el propio Sam Bradford; sólo hay que ver las declaraciones post-partido del coach Mark Mangino, entrenador del año de la BigXII la pasada temporada: “Estoy realmente impresionado con Sam Bradford. Es todo lo que dijeron que sería y algo más”. Con esta victoria, Oklahoma se apunta su vigésimo segunda victoria consecutiva en Norman (superando la segunda marca en toda la historia del programa, establecida por el legendario Barry Switzer). (Resultado: 31-45)

VENGANZA EN THE VALLEY

Ya el duelo no comenzaría nada bien para los Nittany Lions cuando en la primera jugada desde la línea de scrimmage de todo el partido, un snap demasiado alto del C AQ Shipley forzaba a Daryll Clark a retroceder 16 yardas para recuperar el fumble sobre la yarda 19 de PSU, obligando a los pupilos de JoePa, quien volvió de nuevo a guiar a los Lions desde los press boxes de Beaver Stadium, a alejar la posesión del balón. Una posesión que sería aprovechada por los Blues, gracias a un fantástico drive terrestre de 14 jugadas y 83 yardas donde la línea ofensiva de UM castigaría sorprendentemente al front-seven de Penn State. La defensa de PSU no encontró respuesta a la Spread-Option Offense del coach Rich Rodriguez y el QB freshman Steven Threet (9 de 13 para 84 yardas, además de 14 carreras para 50 yardas) y el RB Brandon Minor, quien con una poderosa carrera de 5 yardas para TD, conseguían enmudecer las más de 110.000 gargantas de The White House. En la siguiente posesión, ahora es Daryll Clark (18 de 31 para 171 yardas y 1 TD, además de 9 carreras para 45 yardas y 2 TDs), quien en una carrera straight-ahead no es capaz de proteger suficientemente el balón, a pesar de hacer el gesto de abrazar el football, provocando un fumble en su propia yarda 46 recuperado por Brandon Harrison y que finalmente sería aprovechado por Michigan con un FG de 27 yardas del PK senior KC Lopata.

A pesar del sorprendente arranque de los pupilos de Rodriguez, quienes llegaban a Happy Valley como auténticos underdogs (23 puntos y medio), su joven squad cometería el primer gran error del partido debido al paupérrimo tackling sobre la línea de scrimmage en una carrera interior del RB sophomore Evan Royster (18 carreras para 174 yardas y 1 TD), quien eludiría una pila de jugadores para batir al safety Stevie Brown en un TD de carrera de 44 yardas. No obstante, Michigan contestaría al vertiginoso TD de PSU con un nuevo drive espectacular comando por Threet y Brandon Minor (23 carreras para 117 yardas y 2 TDs), quien anotaba con una carrera de 1 yarda. Desde entonces, la defensa de los Wolverines impondría su poderío, conteniendo a la prolífera Spread-HD de los Lions, sin embargo, una estúpida y completamente innecesaria falta personal en el punt de 45 yardas del punter Zoltan Mesko situaba a Penn State en su propia yarda 41 a falta de dos minutos. Clark conectaba 17 yardas con Deon Butler (8 recepciones para 105 yardas), uno de sus objetivos favoritos durante la tarde, y Evan Royster por tierra, acercaban a PSU a la yarda 3 de UM, donde Clark conectaba en la endzone sobre un hook del WR senior Jordan Norwood. Tras una primera parte complicada para los pupilos de Paterno, donde por momento Michigan pareció la powerhorse Michigan, los Lions conseguían minimizar daños antes del descanso en unos primeros 30 minutos realmente mediocres.

En la segunda parte, inmediatamente el PK senior Kevin Kelly conseguía igualar el partido con un fieldgoal de 42 yardas en el primer drive de los Nittany Lions tras el descanso, pero la jugada clave del partido y que cambiaría el momentum del mismo se produjo justo en el instante (minutos finales del tercer cuarto) de la sustitución de Steven Threet (debido a un dolor en el codo) por el QB backup Nick Sheridan, quien tras tomar el snap en la yarda 5 de UM y bajo la feroz presión del DE Maurice Evans, recibiría el sack del DT junior Jared Odrick en su propia endzone, provocando un safety que supondría el punto de inflexión definitivo del partido. Con la posesión en mitad del campo, Daryll Clark conectaba 25 yardas con Butler para en la siguiente jugada ejecutar el hand-off en shotgun sobre Royster, quien con una carrera de 22 yardas acercaba el balón a la yarda 1 de Michigan, donde Clark, personalmente, se encargaba de rematar el drive con un QB-sneak de 1 yarda, y junto al FG de 32 yardas del PK Kevin Kelly (tras un punt bloqueado por los special-teams de PSU) en el siguiente drive, Penn State subía al marcador una ventaja de 12 puntos insalvable a comienzos del último cuarto. Más tarde, Clark de nuevo con un QB-sneak de 1 yarda (tras el sack y fumble sobre la yarda 20 de UM del end Aaron Maybin) y un screen-pass del QB backup Pat Devlin sobre Stephfon Green en una jugada de 80 yardas, conseguía hurgar aún más en la herida y consumar la venganza de Penn State ante Michigan, tras 9 derrotas consecutivas frente a los Wolverines (desde 1999), además, los 29 puntos de ventaja en el resultado final es el margen más grande en la historia del programa ante Michigan (12 puntos la anterior marca). (Resultado: 17-46)

CRANE SUCUMBE PERO BC VENCE A LOS HOKIES

El QB senior Chris Crane (16 de 32 para 218 yardas, 1 TD y 3 INTs) lanzaría una intercepción en su primer lanzamiento de la noche, mientras Matt Ryan seguía desde los sky-boxes a su alma máter, y el ILB Brett Warren, como acostumbra la Beamer Ball, la retornaba 36 yardas a la endzone de los Eagles, colocando a Virginia Tech 7-0 por delante, mientras que el CB súper estrella Victor “Macho” Harris retornaba otra 55 yardas para TD sobre el propio Crane al final de la primera parte. Sin embargo, Crane sería aún capaz de encontrar abierto a algunos de sus wide-outs, conectando 10 yardas para TD con Ifeanyi Momah, y la defensa y los especial teams de BC harían el resto, destacando un sensacional retorno de 65 yardas de punt del WR junior Rich Gunnell, copiando el estilo propio de los Hokies, quienes únicamente conseguirían 240 yardas totales de ataque. (Resultado: 23-28)

LA MAQUINA ‘HORN ENTIERRA A MIZZOU

En una primera parte aplastante, los Longhorns atacarían con éxito los amplios gaps que ofrece la OL de los Tigers en su clásico blocking-schema para proteger a Daniel, y el frente defensivo liderado por el DE senior Brian Orapko y el SLB híbrido Sergio Kindle en nickel-packages, sacaría literalmente del partido al ataque de Missouri durante toda la primera parte. Esa inoperancia ofensiva la aprovecharía Colt McCoy (29 de 39 para 337 yardas y 2 TDs, además de 11 carreras para 23 yardas y 2 TDs) y sus vástagos, y el QB natural de New Mexico conduciría a su equipo a territorio Tiger, donde el RB sophomore Vondrell McGee con una fantástica carrera de 20 yardas, dilapidaba inmediatamente esa noción de que Texas carece de juego terrestre en su unidad de runningbacks. El drive lo cerraba McCoy con un fake de hand-off sobre el propio McGee para anotar personalmente una carrera de 6 yardas. En la siguiente posesión de los Longhorns, McCoy se aprovechaba del blitz de la defensa de Missouri (en otra constante toda la noche) y conectaba underneath sobre el hot-route del WR sophomore Brandon Collins, quien se escapaba 38 yardas hasta la 40 de los Tigers, donde, una de las sensaciones de la temporada, el reconvertido RB senior Chris Ogbonnaya (13 carreras para 65 yardas y 1 TD, además de 6 recepciones para 68 yardas), anotaba una carrera terrestre de 9 yardas tras leer fantásticamente varios bloqueos en el segundo nivel de la OL de los ‘Horns. Arrancado el segundo cuarto, el DT Evander Hood conseguía un sack sobre Colt McCoy en una jugada que pudo ser el bálsamo que buscaba la D de los Tigers, sin embargo, en 2nd down y 20 yardas, el QB junior de UT, con mucho tiempo y alto en el pocket, encontraba en el post-route al WR freshman Malcolm Williams, quien conseguía atrapar el lanzamiento de 32 yardas sobre la endzone ante la defensa en cobertura de los safeties Justin Garret y William Moore, quien estuvo cerca de interceptar el lanzamiento. El punter de Mizzou Jeff Wolfert ya había tenido éxito en los primeros compases de este showdown con su estilo a lo soccer, sin embargo, en esta ocasión cometía técnicamente un error grave y su despeje únicamente avanzaba 17 yardas hasta su propia 41. Texas aprovechaba este nuevo regalo y de nuevo Ogbonnaya con un par de carreras de 26 y 10 yardas, esta última para TD, ampliaba a 28 puntos la distancia en el marcador.

En la siguiente posesión, Missouri, ante el éxito de la defensa del DC Will Muschamp, reajustaba la distancia entre gaps de su línea de ataque, y Chase Daniel (31 de 41 para 318 yardas, 2 TDs y 1 INT) conseguía comandar el primer drive serio de toda la noche para los Tigers, aliándose por aire con Chase Coffman (12 recepciones para 140 yardas y 1 TD), Danario Alexander y un demasiado frío Jeremy Maclin (8 recepciones para 66 yardas), sin embargo, alcanzada la yarda 8 de UT, Daniel, en situación de 3rd down, enviaba demasiado desajustado un touch-pass a la endzone con el TE Chase Coffman completamente abierto y en 4th down, en un fade-route sobre Danario Alexander, el wide-out junior, por pulgadas, no era capaz de mantener un pie dentro de la endzone. Con el turnover-on-downs a falta de 4 minutos del tiempo reglamentario, McCoy volvía a comandar un nuevo drive, pero con presión sobre el pocket, el líder de los ‘Horns escurría el football sobre el suelo, sin embargo, el bote le beneficiaba y con la inercia, ejecutaba un roll-out sobre el lado derecho para completar un pase de 23 yardas sobre el WR Quan Cosby (7 recepciones para 74 yardas), y en un screen-play, el héroe del Red River Shootout, Jordan Shipley (8 recepciones para 89 yardas y 1 TD), anotaba a placer un TD de 13 yardas. Texas había conseguido traducir en touchdown cada una de sus posesiones de la primera parte, mientras que Missouri tenía que consolarse únicamente con un FG de 33 yardas del PK Jeff Wolfert en el último segundo de la primera parte.

La parroquia de Austin, durante más de 20 minutos, obsequió a sus invitados con el ya clásico overrated chant y la defensa de Missouri no forzaría el primer punt del partido hasta el tercer cuarto, donde aprovecharían este novedoso cambio de posesión con un TD de carrera de 2 yardas de Derrick Washington, sin embargo, el partido ya era una utopía para Mizzou, y si hubiese alguna duda, Colt Mccoy con una carrera corta de 2 yardas para TD contestaba inmediatamente en la siguiente posesión. Esta victoria es la número 14 de Texas en los 15 últimos duelos de estas series y Colt McCoy superaría a toda una leyenda de los Longhorns como Vince Young en TD totales (por aire y tierra) en toda una carrera con 86. (Resultado: 31-56)

EL POWER-RANKING

En una semana donde finalmente aterrizaría el BCS Standing, oficiando el comienzo de la carrera por el BCS National Championship Game en Miami, los rankings sufrirían grandes cambios en la parte inferior de sus Top15 aproximadamente (algo un tanto inusual) y donde comienza a abrirse una brecha cualitativa respecto a los principales candidatos. Y es que varios equipos experimentaron caídas y ascensos meteóricos (como TCU y Georgia Tech, entre los que mejoran su stock, en el caso de mi P-R personal). El BCS, de momento, proporciona una ratio bastante poderoso para Texas (0.9979) y Alabama (0.9487), quien se beneficia del poder y reputación de la conferencia SEC, sin embargo, Penn State se encuentra algo más alejada (0.8666) y podría verse incluso superada por Oklahoma (0.8319), independientemente de si PSU (#7 por los ordenadores) conseguiría mantenerse imbatida al final del año. Utah (#11 con un ratio de 0.6345) es el equipo fuera de las “Big-Six” más alto ranqueado actualmente, con Boise State (#12), a continuación, pero un poco más alejado (0.5870). El resto son TCU (#14 y 0.4197), Tulsa (#19 y 0.2368), Ball State (#20 y 0.2342) y BYU (#21 y 0.2171). Con la fórmula BCS sólo un equipo fuera de las “Big-Six” tendría asegurado un puesto sí reúne los criterios, mientras que el resto de candidaturas serían como at-large. Entre varios datos de interés sobre este primer BCS Standing de la temporada; 4 equipos de la conferencia BigXII se encuentran en el Top8, USC es el único equipo de la Pac-10 en el Top25 y tres equipos de la SEC se encuentran entre el Top10.

1- Texas [ BCS: #1 | Record: 7-0 ]
Tras la espectacular demostración de poder ante Missouri, nuevo showdown aéreo en la BigXII entre dos ataques ranqueados en el Top5 del país.
Próximo encuentro: Sábado contra Oklahoma State

2- Alabama [ BCS: #2 | Record: 7-0 ]
Cody se lesionaría su MCL y llegará justo para el duelo ante LSU, aunque antes tienen el rivalry game en Neyland, donde no ganan desde el 2002.
Próximo encuentro: Sábado en Tennessee

3- Penn State [ BCS: #3 | Record: 8-0 ]
La Big10 y la temporada imbatida pasan por The Horseshoe, donde no ganan desde 1978 y deberán enfrentarse ante unos Buckeyes en plena alza.
Próximo encuentro: Sábado en Ohio State

4- Oklahoma [ BCS: #4 | Record: 6-1 ]
Bradford y Co. fulminaron a UK con 674 yardas totales, algo realmente muy positivo ya que la defensa es cada vez más sospechosa (491 yardas).
Próximo encuentro: Sábado en Kansas State

5- USC [ BCS: #5 | Record: 5-1 ]
Desde el upset ante Oregon State, han sobreanotado a sus rivales 141-10 y se enfrentarán a Arizona, a quien han ganado los últimos seis.
Próximo encuentro: Sábado en Arizona

6- Florida [ BCS: #10 | Record: 5-1 ]
Parece ser que un ajuste en la OL es la clave del resurgir de los Gators, quienes se enfrentarán a UK, a quien han ganado 21 consecutivos.
Próximo encuentro: Sábado contra Kentucky

7- Oklahoma State [ BCS: #6 | Record: 7-0 ]
A la sombra, están consiguiendo cimentar una de las mejores D de la BigXII y esta semana redujeron a Baylor a 6 puntos y 204 yardas totales.
Próximo encuentro: Sábado en Texas

8- Ohio State [ BCS: #9 | Record: 7-1 ]
Pryor está tomando el mando con muchísima personalidad: “La gente no sabe lo que puedo hacer. Dicen que estoy sobrevalorado ¡Espera y verás!”
Próximo encuentro: Sábado contra Penn State

9- Texas Tech [ BCS: #8 | Record: 7-0 ]
3 turnovers causaron 10 puntos de Texas A&M, pero ahora empieza el momento de la verdad, y es que aún no se han enfrentado a nadie ranqueado.
Próximo encuentro: Sábado en Kansas

10- Georgia [ BCS: #7 | Record: 6-1 ]
Visitan Death Valley por primera vez desde el 03 y necesitarán que Stafford se aleje de las intercepciones, ya que una derrota podría ser definitiva.
Próximo encuentro: Sábado en LSU

11- Utah [ BCS: #11 | Record: 8-0 ]
Mostraron pinceladas de aquella versión imbatida del 2004 ante Colorado State y Brian Johnson repartiría el balón sobre múltiples objetivos.
Próximo encuentro: Sábado en New Mexico (bye)

12- LSU [ BCS: #12 | Record: 5-1 ]
La D conseguiría 6 sacks sobre Garcia, forzarían un fumble y una INT en los últimos minutos, permitiendo sólo 42 yardas en la segunda parte.
Próximo encuentro: Sábado contra Georgia

13- Boise State [ BCS: #12 | Record: 6-0 ]
El QB freshman Kellen Moore continua creciendo a pasos agigantados, finalizando con 25 de 33 para 256 yardas y 3 TDs, y ninguna intercepción.
Próximo encuentro: Viernes en San Jose State

14- TCU [ BCS: #14 | Record: 7-1 ]
Espectacular despliegue defensivo de velocidad y agresividad para atacar la O de los imbatidos Cougars, de ahí que sean la mejor D del país.
Próximo encuentro: Sábado contra Wyoming

15- Georgia Tech [ BCS: #18 | Record: 6-1 ]
Por primera vez en mucho tiempo, el QB Josh Nesbitt realizaría varios big-plays aéreos, incluyendo un pase de 24 yardas sobre Thomas a 5:22.
Próximo encuentro: Sábado contra Virginia

Completan el Power-Ranking: 16- South Florida, 17- Boston College, 18- Pittsburgh, 19- Tulsa, 20- Missouri, 21- Florida State, 22- Ball State, 23- Kansas, 24- Virginia Tech y 25- BYU

Mención especial: Minnesota, Northwestern, Kentucky, Maryland y Arizona

EL “HEISMANÓMETRO”

1- Colt McCoy (QB Texas): Por méritos, el QB titular de los Longhorns se ha convertido en el gran favorito en la carrera final por el Heisman Trophy. Tras arrollar a la defensa de los Sooners, su actuación esta semana ha sido incluso mejor con únicamente tres lanzamientos incompletos (dos fueron desviados sobre la línea de scrimmage y uno se le caería involuntariamente al intentar un lanzamiento rápido sobre un objetivo). Además, McCoy puede establecer un nuevo record en la NCAA en porcentaje de completaciones sí continúa en esta línea, ya que ahora mismo promedia la increíble cifra de 81,2% de pases completados (tras el 90,625% ante Missouri) y el récord lo posee Daunte Culpepper en UCF con 73.6%. Las próximas dos semanas tiene la gran oportunidad de continuar cimentando su candidatura cuando reciban en Austin a Oklahoma State y viajen a Lubbock para enfrentarse a Texas Tech. Sus números esta semana ante Missouri: 29 de 32 lanzamientos para 337 yardas y 2 TDs, además de 11 carreras para 23 yardas y 2 TDs.

2- Sam Bradford (QB Oklahoma): La sombra de McCoy y su gran rival es Sam Bradford, quien está viviendo una temporada histórica rescribiendo continuamente los libros de los records de los Sooners. Esta semana batiría la marca de yardas aéreas del programa de Oklahoma para un partido (468), mientras que en 7 partidos ha completado un 71,4% de sus pases con 26 TDs y tan sólo 5 INTs. A diferencia de McCoy, Bradford no aporta actuaciones terrestres sobre su candidatura y, como todos sabemos, Texas batiría a Oklahoma la semana pasada en el Red River Shootout, por lo que, de momento, Bradford deberá esperar a que Texas tropiece en las próximas semanas y continuar con sus impresionantes actuaciones aéreas. Sus números esta semana ante Kansas: 36 de 53 lanzamientos para 468 yardas y 3 TDs, además de 4 carreras para 14 yardas terrestres.

3- Daryll Clark (QB Penn State): Posiblemente uno de los candidatos que más dudas pueda ocasionar sobre los votantes, sin embargo, Clark se ha mostrado realmente muy consistente durante toda la temporada y su nivel de liderazgo ha revitalizado totalmente al ataque de los Nittany Lions, el cual por momentos está recordando a la versión de 2005 con Michael Robinson como signal-caller. Darryll Clark, de algún modo, es la reencarnación del actual jugador de los San Francisco 49ers de la NFL, y su inteligencia es el engranaje sobre el que funciona el ataque de PSU. Necesita un sello “oficioso” para su candidatura al Heisman, y esa oportunidad pasa esta semana por Columbus, donde Penn State se juega toda la temporada, tanto el título de su conferencia como su candidatura al campeonato nacional. Sus números esta semana ante Michigan: 18 de 31 para 171 yardas y 1 TD, además de 9 carreras para 45 yardas y 2 TDs.

Bajo lupa: Graham Harrell (QB Texas Tech) y Knowshon Moreno (RB Georgia)

 

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Israel Llata
Israel Llata es natural de Maliaño, una localidad de Santander (Cantabria). Ingeniero informático de profesión y aficionado al fútbol americano desde mediados de los años 90, asombrado por la habilidad atlética del quarterback Steve Young y aquellos exitosos 49ers. En los últimos tiempos centraría su mirada sobre un desconocido pero excitante college football, destapando su corazón como entusiasta aficionado de Alabama, una institución a la que rinde culto. Analiza en su columna semanal la jornada universitaria desde 2007. @israel_lata

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