Badalona Dracs siguen reinando en el fútbol americano nacional tras conquistar un nuevo título de la Copa de España, el sexto de su historia y el cuarto consecutivo. En la gran final, disputada en El Masnou (Barcelona), los badaloneses vencieron a LG OLED Las Rozas Black Demons por 15-3. Jordi Brugnani fue elegido como MVP del choque, que se disputó con un gran ambiente en las gradas y que contó con la presencia del alcalde de El Masnou, Jaume Oliveras, y del presidente de la Federación Española de Fútbol Americano (FEFA), Enrique García de Castro.
El sorteo del “kickoff” inicial fue a cargo de Tony Molinos, ex jugador de fútbol americano e impulsor del #ProyectoPol, asociación sin ánimo de lucro que lucha contra la Hiperglicinemia no cetósica, una enfermedad minoritaria con menos de una decena de casos en toda España y que padece su hijo Pol.
Dracs y Black Demons disputaban su tercera final de copa consecutiva y una vez más los badaloneses se llevaron el gato al agua, aunque no lo tuvieron nada fácil ante un conjunto madrileño que presentó batalla en todo momento. En ataque se notó que los dos equipos todavía están en pleno rodaje en estos primeros compases de la temporada (la liga empezará el próximo 11 de enero) y eso facilitó el trabajo de las defensivas, que dominaron en muchas fases del partido.
Dracs se adelantaron en el marcador en el primer cuarto con el único “touchdown” de todo el encuentro, anotado por Guillem García a pase del “quarterback” Sergi Gonzalo (7-0). Black Demons buscaron hacer daño con su juego terrestre, a través de las carreras del “runningback” Javier Carrasco, pero la defensa del conjunto de Badalona se mostró siempre muy expeditiva. Antes del descanso, además, Dracs ampliaron su ventaja con un gran “field-goal” de más de 40 yardas transformado por Jordi Brugnani (10-0).
En la reanudación Black Demons consiguieron hilvanar algunos “drives” largos, pero sin traducir esa mayor posesión del balón en puntos. El tercer cuarto se cerró sin novedades en el marcador, pero con los madrileños cerca de la zona de anotación catalana. Una aproximación que terminó, ya en los primeros compases del último periodo, con un “field-goal” transformado por Álvaro Peñas que ponía emoción a la final (10-3).
Dracs, sin embargo, no se dejaron sorprender. Jordi Brugnani, de nuevo muy certero, puso tres puntos más en el casillero badalonés (13-3) y en el “kickoff” posterior al “field-goal” los equipos especiales del conjunto que dirige Óscar Calatayud sentenciaron definitivamente la final.
Placando al retornador de Black Demons en su propia “end zone”, Dracs sumaron 2 puntos más con un “safety” (15-3) y además recuperaron la posesión del oval, lo que les permitió ir consumiendo el reloj con el juego de carrera. A dos minutos de la conclusión el balón volvió a manos de Black Demons, pero dar la vuelta al partido ya era misión imposible.