No, no voy a hablarte de Brett Favre

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Tras un creo que más que merecido periodo vacacional por la capital de Pérfida Albión, futura sede olímpica en el 2012 y también sede las International Series de la NFL el año que viene salvo huelga, y todo ello por cortesía de los cuantiosos cheques que ingresamos por nuestras colaboraciones en NFLhispano -ya quisiera la Esteban cobrar lo que cobramos nosotros y encima sin patear el diccionario-, regreso a mi habitual palestra.

 

Antes de nada, no me he perdido casi ningún detalle de lo ocurrido estas dos semanas. La tremenda ventaja que tiene esta macro sociedad de la información es que uno puede perderse casi en el culo del mundo, que es muy difícil no enterarse de lo que pasa. La era de Internet es lo que tiene, de bueno y de malo, que también hay ocasiones en los que uno desea no enterarse de nada. La última vez que me ocurrió eso fue cuando andaba de tour por los desiertos del Alto Egipto, que al contrario de lo que muchos creen es la parte más al sur. Por allí solo había dos cosas, muchísimo calor y los gigantes de Abu Simbel, visita que debería ser obligatoria.

 

En dos semanas pueden ocurrir muchas cosas en esta loca NFL que tenemos este año, donde la paridad y la igualdad se han instalado, hasta el punto que creo que la mejor opción para poder seguir la liga es, desde hace un tiempo, el Red Zone Channel,. Ya sé que para muchos eso significa no ver un partido, perder detalles y otras muchas cosas, pero con tantas cosas ocurriendo en tantos sitios a la vez es la única manera que uno puede seguir la actualidad, aunque en mi caso roza la locura. En la TV suelo tener un partido, o dos, según se tercie, y en el portátil siempre el Red Zone Channel, o en su defecto el partido de Miami, aunque últimamente ver a Miami jugar es un penitencia. Esto ha llegado a tal punto que para la jornada del domingo que viene, la plataforma británica de TV Sky Sports no va a emitir un partido a las 19.00 horas, sino que ha decidido directamente conectarse al Red Zone Channel y dejar que la propia NFL y su canal estrella se hagan cargo de la transmisión. Muchos ya conocemos esta posibilidad gracias a la opción del NFL Game League Pass, pero a partir de ahora se va a conocer mucho más, no me extrañaría verlo en breve como una opción mas en las cadenas de pago interesadas en la NFL.

 

Y en estas dos semanas han ocurrido el número suficiente de cosas para que aquel que no estuviera al tanto de lo que pasaba hasta entonces se tenga que frotar los ojos para ver lo que sucede ahora. Hace dos semanas Baltimore Ravens y NY Jets comandaban sus divisiones y parecían encaminados a una segura final de conferencia, mientras que Pittsburgh Steelers y New England Patriots luchaban por ser equipos de wildcards. Dos semanas después estos últimos lideran sus divisiones y parecen encaminadas a una final de conferencia, y Ravens y Jets luchan por una plaza de playoffs. No sólo luchan, sino que es posible que alguno se pueda quedar fuera, la patética imagen que llevan ofreciendo los NY Jets en las dos últimas semanas no tiene igual en toda la liga, o mejor sí, pero es que a uno lo comparen con los patéticos Carolina Panthers no puede augurar nada bueno. Hasta el lenguaraz Rex Ryan permanece callado, y hay que hacerlo realmente mal para que el gigante esté con la boca cerrada. Lo más noticiable de la semana de Ryan es que recuperó una tradición que tenía su padre, Buddy Ryan, cuando un partido te había ido mal, enterraba el ball game, aunque si los Jets siguen jugando como el domingo pasado y el anterior no va a haber sitio en todo el estado de Albany para enterrar pelotas.

 

También en estas dos semanas ha ocurrido algo que nunca había visto antes, ver como el techo de un estadio dome se venía abajo. Y no se ha venido abajo por un defecto de construcción o porque los Vikings han decidido rememorar aquellos días en que jugaban en el adorable Metropolitan, sino que las intensas nevadas han provocado que el teflón que cubre el Metrodome de Minneapolis se venga abajo vencido por el peso. Como casi todos saben los domes me producen urticaria, me parecen antinaturales para el football, un deporte que ha nacido para jugarse al aire libre, en el crudo invierno, con frío, agua, lluvia y viento, no a 21º y en un entorno artificial. Y además no hay más que fijarse en un detalle, los equipos mas históricos de la NFL, aquellos que de alguna forma son los padres de la NFL todos ellos mantienen estadios abiertos, y no estadios abiertos de esos donde existe techo retráctil, sino estadios donde si llueve te mojas, si nieva te cubre un manto blanco y si hace viento un kicker tiene que calcular como lanzar. Excepciones siempre las hay, tanto Detroit Lions como Arizona Cardinals juegan en estadios cerrados, pero equipos del peso e historia de Green Bay, Chicago, New York, Philadelphia o Cleveland juegan todos ellos al aire libre. Sólo espero que el nuevo estadio de los Vikings, si se llega a construir, recupere las esencias del antiguo Metropolitan.

 

Lo fácil ahora sería hablar de Brett Favre, pero no, no lo haré, y no lo pienso hacer hasta que termine la temporada. Cuando la temporada regular eche la persiana será el momento de hablar de Brett Favre, seguramente por última vez, al menos hasta que ingrese en el Hall of Fame, aunque los que a esto nos dedicamos solemos mencionar a jugadores retirados por un motivo u otro. Tenía algo pensado para cuando Brett Favre llegara a su partido 300, y no es que no pueda llegar, que es probable que lo haga, sino que no lo hará de forma consecutiva, así que de momento enterramos las 297 titularidades consecutivas y lo dejamos para otra ocasión.

 

También hay cosas que no han cambiado, una de ellas no podía ser otra cosa que la NFC Worst, donde esta semana han batido records, han ganado dos equipos. Lo más indicativo del paupérrimo nivel que exhibe la NFC West es que los Cardinals aún tienen posibilidades de entrar en los playoffs con un record de 4 victorias y 9 derrotas, los San Francisco 49ers con 5 victorias y 8 derrotas aún siguen vivos y colideran los Rams y Seahawks con 6-7- Resumiendo, a falta de tan sóo 3 jornadas, nadie está por encima del .500, y no contentos con eso, la semana que viene podría empeorar, tal y como se están poniendo las cosas en la NFC. El camino mas fácil para llegar a los playoffs divisionales, aparte de quedar con los dos mejores records de la conferencia, es pasar por el campo de quien quiera salir campeón de la NFC West.

 

 

  • Desde que Zigi Wulf tomó el control de los Vikings una de sus reclamaciones históricas fue un nuevo estadio, algo que si han conseguido tanto los Minnesota Twins con su Target Field como los Gophers de la Universidad de Minnesota con el TCF Bank Stadium, los otros antiguos usuarios del Metrodome. Si la amenaza del fin del contrato de arrendamiento de la instalación no era ya suficiente aliciente para marcharse de la ciudad ahora hay que unirle el hecho del hundimiento del tejado del Metrodome por el efecto de las intensas nevadas que han afectado al estado de los mil lagos. Nunca han estado los Vikings en tanto peligro de abandonar una ciudad que los vio nacer y donde han estado durante los 50 años de su existencia.

  • En Chicago, gracias a que ellos sí juegan en un estadio abierto, se pudo ver un partido en la nieve, y decimos que se pudo ver, porque otra cosa es lo que realmente se terminó de ver, un paseo militar de los New England Patriots que mediada el segundo tiempo dejaron el partido visto para sentencia. Si hay un equipo que sabe mejor que nadie jugar en medio de la nieve ese no es otro que los New England Patriots, el año pasado arrollaron literalmente a los Tennessee Titans. Miami ya ha pagado en más de una ocasión jugar con la nieve en Foxboro y la leyenda de los actuales Patriots se comenzó a forjar en un partido de divisionales que se jugó en medio de un vendaval de nieve, el famoso partido de la Tuck Rule y que permitió a los Patriots avanzar en los playoffs, el resto es conocido por todos. Estoy casi convencido que si se pudiera los Patriots utilizarían máquinas de nieve para su campo cara a los playoffs viendo que son el equipo que mejor se maneja en ese ambiente, desde que Bill Belichick entrena al equipo su record es de 11-0 cuando nieva.

  • Ben Roethlisberger tiene la fortuna de que este año su temporada ha durado para él 4 partidos menos, no me puedo imaginar en que condiciones estaría si llevara jugada la temporada completa. Las palizas y golpes que recibe en cada partido no están al alcance de cualquiera, ni tan siquiera Brett Favre, el hombre de acero de la NFL. Big Ben siempre ha tenido la tendencia a sujetar demasiado tiempo la pelota para ganar tiempo y buscar al receptor abierto, y por ello recibe más golpes de lo habitual y lo recomendable, pero el domingo a pesar de que los Steelers se acabaron imponiendo con comodidad a los Cincinnati Bengals, la zurra de golpes que se llevó no pueden ser buenas a corto plazo y sobre todo de cara a los playoffs. El problema de los Steelers es que no pueden dejar descansar al gigante mientras los Ravens les sigan acosando pero el cuerpo de Big Ben puede acabar diciendo basta como tenga que jugar muchos mas partidos como los del pasado domingo.

  • Quien tiene otros problemas, pero de muy diferente calado, es Carson Palmer. Que Palmer nunca más ha vuelto a ser exactamente el mismo que antes de su grave lesión en la rodilla era algo sabido y comprobado, pero seguía siendo uno de los 10 mejores QB de la liga, cuando tenía el día y el juego terrestre le acompañaba era capaz de diseccionar cualquier secundaria con absoluta maestría. Pero el Carson Palmer que estamos viendo este año es un Carson Palmer completamente desdibujado, fuera de sitio y que aparentemente no está nada motivado. La realidad es que transmite una sensación de hartazgo y por momentos parecer querer buscar su salida de Queen City. Los rumores ya han empezado y es que los Bengals parecen encaminados hacia una reconstrucción cuando es notorio el fallido del experimento de Marvin Lewis, el gran valedor de Carson Palmer. Supongo que los Bengals intentarán traspasarlo y obtener alguna elección de draft por Palmer antes que tener que cortarlo, y no le van a faltar equipos a un jugador que tiene aún mucho potencial, que está en la mejor edad para un QB pero que seguramente necesite cambiar de ciudad o de aires, a saber cual vendrá antes.

  • No solo los Cincinnati Bengals pueden ser uno de los destinos de los futuros QB que decidan entrar en el draft venidero, pero hay otros muchos equipos que están pidiendo a gritos un reemplazo en el puesto mas importante de un equipo. Chad Henne tiene todos los visos de ser otro experimento fallido, el enésimo que falla en Miami, pero no le van a la zaga San Francisco, Arizona y Carolina, por no hablar de aquellos equipos que tienen QB veteranos cuya continuidad es toda una incógnita como Seattle, Minnesota y Washington. A todos esos equipos se pueden unir otros equipos donde la situación del QB es todo menos estable como Oakland, Buffalo, Cleveland y Tennessee. Menos en el caso de Miami no es ninguna casualidad que ninguno de esos equipos estén fuera de la contienda de los playoffs, y en el caso de Miami lo es por las matemáticas, pero todos los equipos que están fuera de toda contienda de la post temporada, con la excepción de Dallas y Detroit, tienen serios problemas en el puesto del QB. El caso de Cincinnati es seguramente el único diferente por los motivos que hemos dicho antes.

  • De todos los equipos que aún luchan por entrar en la postemporada, dejamos fuera aquellos que aunque las matemáticas digan que sí, la realidad va a terminar diciendo que no. Las mayores sorpresas son sin duda los Kansas City Chiefs y Jacksonville Jaguars, y el problema que tienen ambos equipos el mismo, sus perseguidores. Tanto San Diego como Indianapolis son equipos veteranos y de vuelta de todo, acostumbrados a luchar panza arriba y con 2 QB que les pueden llevar a la post temporada. Los dos están al acecho y no se pueden descuidar un solo momento, saben que en cuanto lo hagan saltarán a lo más alto y de allí nadie les sacará, es lo que tienen esos equipos dirigidos por sendos QB con galones en la liga. Los Jaguars son los que mas difícil lo tienen en principio al jugar directamente contra su rival y en su campo, y yo apostaría sin dudarlo casi porque los Colts se imponen y ganan la división, pero con otro Peyton Manning, no el de este año. Los Jags sí han demostrado algo que no tenían otros años, es un equipo al que jugarle es muy difícil, no hacen nada especialmente bien, pero tampoco nada lo hacen especialmente mal, tienen a un jugador desequilibrante en Maurice Jones-Drew y la defensa de los Colts no es precisamente brillante contra la carrera, pero lo que sí saben hacer los de Jack del Rio es sufrir, algo que no hemos visto precisamente de lo que andan sobrados los Kansas City Chiefs, un buen equipo, pero al que quizás le hagan falta un par de hervores aún.

  • Los Green Bay Packers plantaron un auténtico huevo en el Ford Field el pasado domingo. Los Lions no ganaban a un rival divisional desde hace 3 años, 19 partidos consecutivos, siendo derrotados por todos los equipos de la NFC North. Pero no siendo eso lo peor los Lions en ataque no asustan a nadie, sin Matthew Stafford, Calvin Johnson es la única referencia ofensiva del equipo, pero con un QB como Drew Stanton tampoco cabe esperar demasiado. El juego terrestre hace tiempo que no está ni se le espera. Los Packers parecían claros favoritos si mantenían bajo control la defensa de los Lions, pero el domingo salió la cara B de los Packers, negados en la carrera y confiándolo todo a que Aaron Rodgers conectara con alguno de sus WR, pero Rodgers que no solo pasa sino que suele ser el mejor corredor del equipo, recibió un duro golpe con la cabeza contra el suelo y tuvo que abandonar el partido, lo que dejó el ataque en manos de Matt Flynn, que de repente se encontró que tenía que hacer algo y lo cierto es que el pobre chaval estuvo poco lucido, en el único drive decente que hizo acabó en una intercepción absurda, los Lions no se sabe como anotaron de alguna manera y el partido se terminó, lo que complica y mucho el futuro de los Packers.

  • Sobre las excelencias de Sam Bradford se lleva hablando todo el año, el QB de los Rams es seguramente lo mejor que les haya podido pasar al equipo de St. Louis, es un claro proyecto de futuro y aún debe alternar buenos partidos con muy malos partidos como el que tuvo anoche, pero es que la defensa de los New Orleans Saints, oportunista como pocas y que está recobrando el bueno tono es una buena piedra de toque para cualquier QB, y más para uno inexperto como Bradford. Pero Sam Bradford dio una lección de pundonor y orgullo deportivo que seguramente no le sirva para nada, pero que da idea de la clase de deportista y jugador que puede ser el ex Sooner, rara vez se ve a QB correr tras un defensa cuando sale disparado hacia la end zone contraria, y menos cuando es un CB el que sale corriendo, pero Sam Bradford no se rindió y tras perder el fumble salió corriendo a por Roman Harper que al final ante el acoso del QB salió por la banda. Bradford no tenía mucho que ganar en la jugada, pero lo que se ganó fue la admiración de todo su vestuario, si mi QB es capaz de eso, yo tengo que hacer lo que sea, y es lo que hacen los jugadores que son líderes, con Bradford es posible que estemos viendo a un nuevo gran jugador en el puesto.

  • Otro QB que acabó dando la nota el domingo fue Michael Vick, los Eagles tenían toda la pinta de que podían salir derrotados del Cowboys Stadium donde los Boys, sin nada que hacer en la liga, juegan al papel de spoilers, y qué mejor que fastidiar a un rival de división al que tienen tantas ganas. Pero Michael Vick cuenta con ese auténtico velocista que es DeSean Jackson, la conexión entre ambos jugadores es de las mas letales de la liga, ambos jugadores combinan velocidad, explosividad y son capaces de romper un partido en cualquier momento. Hablando de Michael Vick, fue curioso ver como Tashard Choice, el RB de los Cowboys, le pedía un autógrafo ante un más que sorprendido Vick. Tashard Choice dijo que era para su sobrino y no para su propio provecho, lo cierto es que de momento no está en venta por Internet.

  • Que Daniel Snyder es aficionado a pagar demasiado por jugadores que no lo valen es algo mas que de sobra conocido en esta liga. Desde que Snyder compró los Redskins siempre ha intentado a golpe de talonario atraer a veteranos con resultados mas bien pobres, los casos de Bruce Smith y Deion Sanders parecían haber tocado techo, dos jugadores que ya tenían poco que ofrecer acabaron llevándose un buen pellizco de los anchos bolsillos de Snyder. Pero con quien Daniel Snyder puede haber batido todos los records es con Albert Haynesworth, su fichaje ya fue complicado y polémico, pero los Titans que ya conocían de sobra al bueno de Haynesworth no quisieron meterse en un jardín del que luego podría resultar muy caro salir, cosa que parece que le puede ocurrir a los capitalinos. Nadie puede negar la clase y cualidades de Haynesworth, pero es un jugador que no juega nunca una temporada completa y Snyder se ha encargado de asegurarle casi todo su contrato. No contento con eso Snyder se trae a Donovan McNabb, lo renueva y el QB parece desde entonces acabado, aunque su contrato es todo un misterio y puede ser cortado en cualquier momento. Pero para rematar la faena Snyder ficha a Mike Shanahan, deseado por media liga, o mas bien por sus rivales de Dallas, lo que hace que Snyder pague de nuevo de mas por un entrenador que parece que ha perdido su toque, ya lo perdió en su etapa final en Denver, pero parece ser que lo ha retomado donde lo dejó.

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