Unos muertos muy vivos

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En casi todas las TV del mundo se está estrenando estos días la segunda temporada de unos de los fenómenos televisivos de los últimos años, la serie “The Walking Dead”, que en España se llama de igual forma y aparece en las programaciones con el mismo nombre que en su país de origen. La serie no tiene la repercusión mundial que han tenido otras series como “Lost”, “Friends” o la famosa franquicia “CSI”, pero sí goza de un éxito más que respetable tanto de público como de crítica, donde destaca su realización, y sobre todo el excelente maquillaje de los auténticos protagonistas de la serie, los muertos vivientes.

 

La serie parte de un exitoso cómic del que se continúan haciendo entregas y que nadie, ni tan siquiera sus creadores, que son a la vez colaboradores en el guión de la serie, saben exactamente el origen de toda la historia, y su desenlace es todo un misterio. Tanto en la serie, como en el cómic del que nace, se parte de las peripecias de un grupo de humanos que sobreviven a un holocausto de naturaleza desconocida y que ha transformado a la casi toda la humanidad en muertos vivientes, más conocidos en la terminología popular como zombies. En la serie no se menciona ni una sola vez la palabra “zombie”, sino que se habla de caminantes muertos (de allí su nombre de “The Walking Dead”), que es como les denominan los pocos humanos que sabemos que han sobrevivido al holocausto.

 

Lo poco que podemos intuir en la serie es que algún fenómeno extraño empezó a afectar a toda la humanidad transformándoles en unos seres que no están muertos. En el último capítulo de la primera temporada, en la actualidad se está emitiendo la segunda, pudimos saber que los humanos cuando son afectados por el virus sufren una especie de necrosis cerebral que lleva a la muerte del cerebro, o al menos a la mayor parte del mismo, una minúscula parte del mismo continúa con una mínima actividad. Los afectados tras pasar un tiempo en una especie de limbo renacen, pero no son ya humanos, sino que son lo que los supervivientes denominan caminantes, unos muertos vivientes, en definitiva lo que la terminología popular ha denominado siempre como “zombies”, y así se le conoce popularmente a la serie, como la serie de los “zombies”.

 

Nadie sabe el origen de los muertos vivientes, se supone que se debe a alguna clase de pandemia mundial y que afecta a toda la humanidad. Los muertos vivientes van contagiando a los humanos no afectados que poco tiempo después acaban siendo ellos mismos muertos vivientes. En un capítulo podemos ver como la hermana de una de las protagonistas es atacada por unos caminantes, fruto de las heridas fallece para pocos minutos después renacer como muerto viviente, en ese mismo momento cuando se disponía a atacar a su desconsolada hermana ésta le descerraja un disparo en la cabeza acabando definitivamente con el muerto viviente, es la única forma de acabar con ellos.

 

Los zombies de The Walking Dead no son los zombies al uso que hasta ahora habíamos conocido en el cine de terror o de series B, que es en realidad donde siempre se ha movido este subgénero del cine de terror. Eran personajes torpones, sin inteligencia y al que un simple golpe los derribaba. En esta ocasión son humanos afectados por el virus que tienen fuerza, se desplazan con relativa rapidez y con capacidad de organizarse en grupos con una tremenda capacidad de hacer daño, de hecho más de la mitad de los humanos que conocemos de la primera temporada son atacadas por un grupo de caminantes y acaban arrasando con ellos. Acabar con ellos es un trabajo titánico, no basta con derribarlos, son capaces de levantarse del suelo y continuar atacando, son muy tercos en sus pretensiones, les mueve una insaciable hambre de comer carne humana y para matarlos no basta con golpearlos o mutilarlos, hay que rematarlos y destrozar sus cerebros. Sólo cuando se les destroza la cabeza dejan de ser muertos vivientes, entonces pasan a ser muertos definitivos. Cuando algún humano caza a algún caminante debe rematarlo, debe destrozarle la cabeza, tan sólo alguno de los protagonistas demuestra mayor habilidad que el resto en acabar con ellos, uno dispara flechas con una ballesta con enorme precisión en la cabeza de los caminantes, mientras que otros lo hacen a base de disparos de armas de fuego, en todo caso no muy recomendable porque el ruido puede atraer a cientos de caminantes y entonces es cuando estás perdido.

 

Nuestra querida NFL tampoco escapa al fenómeno de los muertos vivientes, todas las temporadas tenemos nuestra buena ración de equipos zombies, de muertos vivientes que no hay quien pueda con ellos, que no terminan de morir, y que al final acaban afectando a alguien que también se sumerge en el mismo pozo. El virus se ve que ha afectado a multitud de ellos, y cuidado con encontrarte con uno de ellos en el camino, puedes acabar siendo el siguiente y engrosar la nómina de equipos zombies. Al igual que en la serie donde los que antes eran vecinos, amigos o familiares son ahora muertos vivientes, el que ahora es tu equipo lo es ya, o puede verse amenazado por ello, o al menos atacado por uno de ellos, y por lo visto en la serie cuando uno de estos muertos vivientes te ataca con resultados acabas sufriendo su misma enfermedad, sólo es cuestión de tiempo.

 

Tan sólo uno equipo ahora mismo se puede decir que está realmente muerto, los Indianapolis Colts. Estos en cuanto vieron el origen de su particular holocausto decidieron quitarse de en medio. Al igual que hacen algunos personajes de los que hemos oído hablar y visto en la serie tomaron la determinación de suicidarse, no quieren ser parte de nuevo mundo. Los Irsay y los Polian en cuanto vieron que Peyton Manning, su cerebro, no sería parte del equipo esta temporada tomaron la decisión de suicidarse y esperar a que pueda llegar un antídoto, ya sea en forma de curación milagrosa de su QB, bien en forma de llegada de un potencial antídoto de desconocidos efectos, Andrew Luck. Los Colts están muertos y no se espera que resuciten, el papel de un muerto viviente en esta liga es contagiar a otro equipo o complicarle la vida, hacer de “spoiler”. Los Colts están tan muertos cerebralmente que lo que les queda de temporada es tan sólo eso, esperar a que termine. Sólo queda darles una sepultura que ni merecen, son tan penosos y putrefactos que el destino no les guarda ni tan siquiera el papel de poder contagiar a nadie o estropear la temporada a otro equipo, ellos decidieron quitarse de en medio antes que nadie mediante la mas cobarde de las vías, el suicidio.

 

Las TV no los quieren, la NBC ya ejercitó su derecho a cambiar uno de los partidos del Sunday Night, el tradicional New England contra Indianapolis, y NFL Network se ha encontrado que tiene un partido en su programación que es una invitación a que nadie lo vea, el Houston vs. Indianapolis. Pero otros muertos vivientes aún siguen por la liga, y al menos dos de ellos están muy vivo, es el caso de los Miami Dolphins y Denver Broncos. Hace un mes ambos equipos jugaban en la misma liga que los Colts, parecían muertos definitivamente, hay miembros del equipo que sí lo están, pero aún hay partes del cuerpo que siguen vivas de alguna forma y allí por donde atacan dejan a otro muerto que toma su mismo camino, unos tardan más o menos, pero acaban todos ellos hundidos en el mismo pozo de mediocridad.

 

Los Dolphins estaban hace 3 semanas con un record de 0-7 y eran el hazmerreír de la liga, una derrota más que bochornosa ante los Denver Broncos de Tim Tebow y otra muy dolorosa ante los NY Giants los había dejado al borde de la muerte total, pero de alguna forma ese cerebro que en los muertos vivientes renace pasado un tiempo renació en los Miami Dolphins y están contagiando a otros equipos de su mal, o al menos aquellos a los que atacan se acaban contagiando de su misma enfermedad. La primera víctima de este muerto viviente que son los Dolphins fueron los Kansas City Chiefs, parecían más vivos que nunca tras ganar 4 partidos seguidos tras haber empezado 0-3 la temporada, pero no pudieron sobrevivir al ataque del muerto viviente de Miami y encadenan 3 derrotas consecutivas. Han perdido a su QB titular para lo que resta de temporada y anotan muy poquito, ante Miami anotaron un solo FG, el mismo saldo que ante New England, de no haber sido por las 4 victorias que enlazaron en octubre estarían haciendo la competencia a los Colts por hacerse con los servicios de Andrew Luck.

 

Los siguientes en la lista de los Dolphins fueron otro equipo que había empezado relativamente sano, por un momento parecían que iban a escapar al ataque de los Dolphins, pero no, su cerebro ya estaba afectado y los Dolphins tan sólo los remataron. Rex Grossman es el detonante de la enfermedad y ahora luchan con ellos por intentar ser un poco mejores que ellos, los Skins casi ganan a los Cowboys, fallaron un FG transformable, pero es un equipo ya muerto en esta liga. La última víctima de este muerto viviente son los Buffalo Bills, otro equipo que tenía una salud de hierro en los primeros compases, pero poco a poco han ido perdiendo fuerza y cuando les ha tocado enfrentarse a Miami ya habían agotado todos sus recursos, los Dolphins también han contagiado a los Bills, que aún albergan alguna esperanza, pero visto lo visto tienen todos los síntomas de acabar en el mismo sitio que todos los años, fuera de la post temporada.

 

Ahora es el turno de los Dallas Cowboys, los Boys tienen las armas y el talento para con un disparo certero acabar con este muerte viviente, pero también los protagonistas de nuestra serie tienen armas, no todas las que quisieran, pero no siempre les sirven, para acabar con el muerto viviente hay que acabar con su cerebro, con la cabeza, o al menos con la poca cabeza que pueda quedar. Los Cowboys tendrán que atizar fuerte y sobre todo rematar al muerto si no quieren verse afectados por los efectos de un ataque de muerte viviente, juegan con el factor de que lo harán en casa y que es noviembre y su mejor tirador, Tony Romo, es el mejor QB de la historia de la NFL en el mes de noviembre, solo ha perdido 2 partidos de los 20 que ha disputado ese mes.

 

Otro de los muertes vivientes que pululan por la liga son los Denver Broncos. Decir que están muertos suena un poco fuerte, la realidad es que están a tan sólo una victoria de los Oakland Raiders que lideran la AFC West, pero los Broncos se están caracterizando por ser eso, un muerto viviente con efectos devastadores. Los Broncos tienen una gran ventaja sobre Miami, su sistema inmunológico es más fuerte, tienen aún una parte del cuerpo muy viva, Tim Tebow, que se resiste a dar su brazo a torcer y tiene a todo su cuerpo aún luchando por sanar. Y quien sabe si Tebow puede ser al menos la solución para no terminar la temporada muerto, en todo caso Tebow parece mas un parche que el milagro de la cura, habrá que ver cuanto tiempo duran, pero Tebow se ha cargado además de a los propios Dolphins, a los Chiefs y NY Jets en dos partidos tan surrealistas como el mundo que se pinta en la serie de TV.

 

El problema que tienen los equipos que se enfrentan a Tebow es que nadie en esta liga estaba preparado para parar un ataque que se remonta a los orígenes de la liga, la option y la peculiaridad de un QB como Tebow les hace de momento imprevisibles. Los unicos que acabaron con él hasta el momento fueron los Detroit Lions, pusieron tierra de por medio y no le dieron una sola opción a los Broncos a siquiera intentar la remontada, pero otros no lo han hecho y allí están los resultados, un equipo que estaba muerto hace un mes es otro equipo como Miami, muy peligroso y que sigue vivo.

 

La principal característica que tienen todos los muertos vivientes, igual que los de la serie, es que todos aparentan estar sumidos en un letargo mortal, están aparentemente muertos, inmóviles, pero sin embargo basta un ruido, algo que les perturbe para que se despierte y el instinto que llevan se despierta. Hemos mencionado de momento a los dos muertos vivientes mas activos de la liga, dos equipos que se suponía desahuciados pero que de repente demuestran tener aún actividad, al menos hasta que alguien los descerraje con un disparo en la cabeza, pero otros equipos también en momentos puntuales se levantan de ese letargo y muerden. Allí están los casos de los Arizona Cardinals, un equipo muerto pero que ya pudo dar un susto a los Baltimore Ravens, que escaparon vivos de milagros, y que por el contrario se calzaron a unos Philadelphia Eagles, un equipo que lucha con todo lo que tiene paro no caer aún en ese horrible mundo de los muertos vivientes, tienen pendientes duelos con Miami y Denver. También los Seattle Seahawks y Jacksonville Jaguars han tenido su ración de muertos vivientes, ambos le dieron un disgusto de muerte a los Baltimore Ravens, que demasiadas veces ya han escapado a los ataques, y los primeros también le metieron el miedo a unos NY Giants, que siguen vivos, pero que ahora se enfrentan a la peor fase de la enfermedad, ver como puede extenderse si no le pone remedio.

 

Y así es la NFL, una competición donde conviven unos pocos equipos sanos que luchan a muerte para no verse atacados por uno de los muertos vivientes que aún siguen por la liga, ahora mismo nadie quiere encontrarse a los Dolphins en su camino, hace un mes la cosa pintaba de otra forma, y lo mismo puede decirse de Denver o Seattle, equipos que se resisten a caer y aún luchan y que pueden dar más de uno o dos disgustos. Al único equipo al que todos quieren ver ahora mismo es a los Indianapolis Colts, tras tantos años sufriendo humillaciones y derrotas dolorosas por el mago que dirigía el destino de la franquicia nadie quiere tener un ápice de compasión con el cadáver, es mas, muchos están incluso dispuestos a ensañarse con él.

 

Los equipos sanos en todo caso saben como acabar con estos muertos, no hay que dudar en darles fuerte y no dejarles ni el mas mínimo atisbo a la reacción, a que te muerdan, si cualquiera de los equipos que aspiran a todos se dejan morder tanto por Miami como por Denver pueden darse casi por acabados, su destino es terminar la temporada en el mismo bando que los muertos vivientes que los atacaron.

 

 

  • En Indianapolis están de enhorabuena, por fin un domingo de este otoño donde su equipo no pierde un partido, pero que no se hagan demasiadas ilusiones, no es porque hayan ganado, sino simplemente porque no jugaron, o como dice ese humorista que a mi personalmente me parece lo mejor que tiene la televisión ahora mismo, Jose Mota, no es que no lo sintiera, es que carecía de sentidos. Los Colts no perdieron, es que no jugaron, por eso es una semana de celebración en Indianapolis. La semana siguiente será otra historia, los Panthers llegan a la ciudad y aunque su QB es un rookie no parece que eso sea un impedimento muy grande para que los de Carolina puedan ganar su partido, si Blaine Gabbert, que sí parece un rookie de verdad, pudo con ellos es mas que probable que Cam Newton se puede recrear con un equipo al que no le queda un solo atisbo de profesionalidad, bueno sí, estoy más que seguro que ningún miembro de la plantilla se le olvida pasar el lunes por las oficinas a recoger su cheque.

 

  • Mientras que los Colts está por ver si darán la titularidad a Dan Orlovsky, un QB que puede acabar con el honor de ser el único QB que ha sido titular en los dos únicos equipos en terminar 0-16 la temporada regular, aunque esto está por verse aún, los Miami Dolphins parece que han encontrado una solución en Matt Moore. Fuera aparte de Aaron Rodgers, que juega en su propia liga, Moore es el mejor QB de las últimas tres semanas y a falta de su partido en Dallas este próximo jueves podría acabar siendo el jugador mes de la AFC. Tim Tebow aunque gane todo nunca lo podría ser con unas estadísticas tan lamentables. Moore lleva 6 TD y una sola intercepción, un porcentaje de conversión cercano al 70% y conecta a la perfección con sus WR y TE. De repente en Miami han descubierto para que sirven los TE y Brandon Marshall está jugando al nivel que se le esperaba. Pero que nadie se engañe, Moore está jugando a un excelente nivel cuando está por delante en el marcador y con la corriente y el viento a su favor, pero nadie sabe como responderá si tiene que remontar o si los elementos se le ponen en contra, con todo a favor todos los QB parecen reencarnaciones de Joe Montana, pero cuando se les ponen en contra es cuando se ven de que madera están realmente hecho. Las tres próximas semanas serán vitales para Matt Moore y los Dolphins, jugarán contra Dallas, Oakland y Philadelphia, equipos que saben atacar y defender todos ellos y no contra equipos en la cuesta abajo como los que de momento ha batido. En todo caso en Miami todo indica que aunque Matt Moore termine la temporada a un buen nivel la primera elección en el draft continuará siendo ese QB franquicia que los de Florida buscan desde que Dan Marino se retiró, Moore hasta la fecha lo que ha demostrado es ser un excelente suplente.

 

  • En una semana sin partidos a priori muy interesantes, la NFL nos dejó uno de esos partidos locos a los que se han abonado últimamente donde las defensas deciden tomarse el día libre y dejar que los ataques se lleven la palma. Aunque entre Detroit y Carolina se las arreglaron para de alguna forma lograr 6 intercepciones entre ambas defensas que nadie se deje engañar por las estadísticas, las defensas de Detroit y Carolina estaban en el campo, pero solo eso, estaban, y aún así interceptaron hasta 6 veces a Matthew Stafford y Cam Newton en un auténtico despropósito de ambos QB que inflaron sus estadísticas a base de lanzar pelotazos como si de un duelo de pitchers se tratara. Newton y Stafford son dos de los máximos exponentes de esa moda que se ha impuesto en la liga que consiste básicamente en que tu QB lance bombas de tropecientas yardas a la espera de que tu WR las atrape, es lo que tiene contar con esas dos máquinas de atrapar pases que son Calvin Johnson y Steve Smith, puedes lanzarles mandarinas, piedras, pizzas o un ladrillo, lo importante es eso, lanzarlo, el resto ya lo ponen ellos. La diferencia es que de momento Stafford tiene mas experiencia que el rookie Newton y pasó para 5 TD, Newton tuvo que correr para 2 TD cuando veía que no podía lanzar. Estos duelos prometen ser muy interesantes en un par de años, a lo mejor para entonces vemos a uno lanzar 75 veces y al otro 76. Por cierto, los Lions ficharon para el partido a Kevin Smith, un RB que ellos eligieron hará 3 años en el draft pero que cortaron por su incapacidad para estar sano, de momento será el RB en Detroit hasta que dure de una pieza, en Carolina el juego terrestre que se sepa no apareció, alguno se preguntan dónde está DeAngelo Williams.

 

  • Los Lions esperan a los Green Bay Packers en su tradicional encuentro del día de Acción de Gracias. Este partido por primera vez desde los tiempos de Barry Sanders en Detroit tienen alguna transcendencia. Los Lions llevan casi dos décadas siendo uno de los equipos hazmerreír de la liga y el partido era un simple aperitivo o una disculpa para comer. Este año parece que van por el buen camino, su ataque anota mucho puntos y su DL es una de las mas presionantes de toda la liga, pero Detroit ha mostrado una carencia en toda la temporada, no sabe ganar partidos a equipos con record ganadores con la excepción de los Dallas Cowboys, aunque en este caso deben el partido a la inestimable colaboración de Tony Romo. En Green Bay estará Aaron Rodgers que lleva una temporada en las antípodas del resto de los QB de la liga, a falta de 6 jornadas se puede decir que el MVP es suyo, pero el domingo a pesar de que sus números son los de otro día más en la oficina son números logrados a base de mucho sudor y esfuerzo, y eso que en Green Bay hacía algo mas que frío. Tampa Bay no irá a los playoffs y están en el lado incorrecto de la cuesta, pero es un equipo que pelea y te pone en serias dificultades cada partido, mas cuando el domingo jugaron contra los Packers en lo que antaño fue una rivalidad divisional donde saltaban mas que chispas ¿Quién no se acuerda de aquellos duelos con Brett Favre y Warren Sapp? Los Packers sufrieron a base de bien para ganar el partido, dos onside kick recuperados de forma milagrosa les permitieron no dejar que los Bucs se pusieran por delante porque si LeGarette Blount le siguen dejando correr acaba fulminando a toda la defensa de Green Bay, el TD de Blount fue todo un ejemplo de potencia e impotencia de la defensa de Green Bay que no sabe lo que es hacer un tackle.

 

  • También Dallas jugará su tradicional partido de Acción de Gracias ante el equipo mas caliente de la AFC a juicio de muchos analistas. Yo no sé si los analistas ven todos los partidos de Miami o saben de la auténtica realidad del equipo de Tony Sparano, pero lo que si saben es de sus números, engañosos a todas luces. Miami es la nueva sensación de la liga, pero si uno ve todos los partidos de este equipo como hace servidor se dará cuenta de una cosa, han ganado 3 partidos a tres equipos que son una auténtica castaña y los mismos analistas que echaban flores sobre la temporada que llevaban los Buffalo Bills y Washington Redskins en septiembre o de la gran recuperación de los Kansas City Chiefs en octubre cuando ganaron 4 partidos consecutivos, casualmente las 3 castañas de equipo que ha ganado Miami, son los que ahora dicen que Miami es un equipo tremendo. Dallas es otra cosa, también he visto casi todos sus partidos y solo me han parecido que estaban fuera en un partido, el día de Philadelphia, pero en el resto los Cowboys siempre han podido tanto ganar como perder y desde que han descubierto a DeMarco Murray el juego de carrera es también parte del repertorio ofensivo. Dallas como no quiere la cosa está con un record de 6-4 y un calendario de los llamados dulces, Miami y Arizona, lo que le permitiría llegar con un record de 8-4 antes de enfrentarse a los NY Giants y la división en el tramo final de temporada.

 

  • Hay equipos que estén como estén y en las circunstancias que sea parece que les tienen tomada la medida, por ejemplos a los New England Patriots se les atascan los NY Giants y a estos últimos se les atascan los Philadelphia Eagles. Los Giants jugaban en casa y tenían la oportunidad de dejar al borde del K.O. definitivo a los Eagles haciendo compañía a los Washington Redskins en la cola de la división, pero una vez mas los Eagles le dieron un nuevo disgusto a los de Tom McCoughlin, que no sólo ven como los Eagles siguen allí, sino que ahora el liderato de la NFC East es un duelo a muerte con unos Dallas Cowboys que tienen un calendario en principio asequible antes de que ambos equipos se vean las caras en diciembre. Los Eagles con Vince Young de QB se impusieron merced a un último drive magistral y una defensa que recuperó la posesión cuando los NY Giants parecía que podían empatar el partido.

 

  • El tercer partido de Acción de Gracias es la ya conocida como Harbaugh Bowl, por primera vez en 92 años de historia de la NFL se verán cara a cara dos hermanos como entrenadores. Desde ya nos están vendiendo el partido pero tengo mis serias dudas que al final acabe siendo un partido trascendente, es que a mi estos partidos entre equipos de diferentes conferencia no me dicen nada. San Francisco no se juega absolutamente nada de nada y tiene que viajar de costa a costa con muy poco tiempo para preparar, y Baltimore se lo juega todo para seguir arriba en la AFC donde no se puede permitir un solo despiste. Lo mejor que le puede pasar a los Niners es terminar el partido sin lesionados y preparar con algo mas de una semana lo que le resta de calendario. El domingo, los Baltimore Ravens sin Ray Lewis se impusieron no sin dificultades a unos correosos Cincinnati Bengals que están acusando su bisoñez cuando juegan contra los grandes equipos de su división, están allí pero les falta ese punto de veteranía y saber estar para poder ganar a equipos de vuelta de todo. Andy Dalton tiene un inmenso talento y un gran futuro, pero es un novato, eso tarde o temprano en la NFL se acaba notando. Los 49ers por su parte salieron en modo apático, sobre todo en la primera parte, delante tenían un equipo, Arizona Cardinals, que yo creo que si están tres días seguidos en el campo no ganan a los 49ers ni por incomparecencia de estos últimos. Al final Ken Whisenhurst sacó a su 3er QB para reemplazar a un penoso John Skelton. El chico no estuvo mal, hizo lo que pudo. Lo que es triste es ver como uno de los mejores WR de la liga se consume en un equipo tan malo como Arizona, lo malo es que aunque Arizona el año que viene apueste por otro QB será un novato y los mejores años de Larry Fitzgerald pueden empezar a ser historia, yo del WR iría seriamente pidiendo un traspaso aunque de lo que no se podrá quejar es de lo que le pagan. Los Cardinals siguen siendo el mismo conjunto no funcional que siempre han sido, lo único que ha cambiado es que ya no juegan en la tostadora del Sun Devil Stadium.

 

  • Si hay un equipo que puede alegar la mala fortuna es Chicago. Los Bears estaban en racha y lanzados, con Green Bay machacando a todo lo que se pone por delante su pelea es una plaza de wildcard en la NFC donde su principal rival son los Detroit Lions mientras no se monten al carro otros equipos. Chicago estaba ganando a unos San Diego Chargers en pleno modo auto destrucción y fue cuando llegó una de las cruces de Jay Cutler, una intercepción. Cutler quiso evitar el retorno del defensa de San Diego con la mala suerte de que se rompió el dedo y es cuestionable que pueda terminar la temporada, si los Bears no lo han puesto en la IR es porque creen que pueden llegar a los playoffs y para entonces podría estar en condiciones. Los Bears no tienen un reemplazo de garantías, al menos que se sepa, y deberán confiar el resto de la temporada a su defensa y a Matt Forte. Por su parte los Chargers como hemos dicho están en modo autodestrucción, Phillip Rivers sigue enganchado a las intercepciones, el último pase alguien nos deberá decir a quien lanzaba, y ya acumula 17 en la temporada, poco más que las que tenía en las dos últimas temporadas. Con los Raiders mas firmes que nunca y unos Broncos que han resucitado con Tebow la cosa se complica muy mucho en la soleada San Diego.

 

  • Como ya hemos adelantado Tim Tebow otra vez protagonizó una remontada con tintes épicos. Tebow como es habitual en él llevaba una estadísticas indignas de un profesional, durante más de 50 minutos estuvo ausente, el ataque de Denver no se sabe donde estaba, pero tampoco le hacía falta presentarse a jugar, su defensa se las arreglaba para tener el partido igualado y paraba a un incapaz Mark Sanchez cada día más cuestionado en los NY Jets y que puede en breve pasar a la lista de incapacitados. Los NY Jets cometieron un error que con Denver te acaba siempre pasando factura, dejar el partido igualado, Tebow puede estar 50 minutos lanzando pizzas, mandarinas o la toalla que lleva colgada en el cinturón, puede no acertar un pase, puede lanzar con la misma puntería que Rompetechos, pero como le dejes espacio y el marcador igualado es capaz de sacarse de la chistera una carrera por aquí, un pase por allá y alguna otra cosa marca de la casa del mas allá. Los NY Jets dejaron que Tebow liderara un drive ganador en los minutos finales, cometieron fallos defensivos de bulto y en la última jugada se declararon de tal forma en defensa que hasta alguien que no sabe leer una defensa como Tebow pudo ver venir la jugada defensiva. El resto lo puso ese corazón y capacidad atlética de Tebow. A los Broncos solo hay una forma de ganarlos, machacarlos y no dar siquiera pie a que Tebow pueda intentar la remontada, este tío subiría al Everest sin oxigeno y desnudo si tuviera que anotar un TD.

 

  • Los Kansas City Chiefs matemáticamente no están eliminados, pero es casi imposible sobrevivir al ataque tanto de Miami y Denver y pretender salir vivo. Los Chiefs sin su QB titular y con un QB que en el tiempo que lleva en la liga ha lanzado media docena de veces fueron apaleados sin compasión por los New England Patriots que tras un primer tiempo más bien gris en la segunda parte metieron la directa y dejaron a los de Kansas al borde del K.O. Los Chiefs están empatados a todo con los San Diego Chargers y ven como los dos equipos que en principio no estaban ni llamados a competir por la división se les escapan. Los Raiders ganaron en Minnesota con relativa comodidad, se fueron en el marcador pero dejaron que los Vikings sin Adrian Peterson se acercaran demasiado en el marcador, pero es que el peor enemigo de los Raiders son los propios Raiders. Una vez mas fueron mas que penalizados y dando oportunidades a un equipo al que tenían derrotado. Hue Jackson se quejaba amargamente del rasero de los cebras para con su equipo, y para mi algo de razón tiene, los árbitros pitan faltas que rozan el absurdo, pero si estos Raiders cometieran menos penalizaciones no hay duda que serían uno de los favoritos a llegar lejos en la AFC, tienen talento en la defensa y en ataque. Carson Palmer parece que ha renacido y tienen un calendario asequible, un Chicago en estado de shock por la perdida de Cutler y unos Dolphins que no se sabe realmente si son tan buenos, pero un Palmer certero podría destrozar a una secundaria cogida con alfileres.

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